—La atención al detalle de Leo superó las expectativas de Hera y Athena; era meticuloso, pero su atención nunca cruzaba la línea hacia lo espeluznante —Hera se sentía genuinamente halagada porque, aparte de Athena y su abuelo, nadie había mostrado tanto cuidado hacia sus preferencias. Los esfuerzos de Leo para entender sus gustos y aversiones iban más allá, un nivel de atención que ni siquiera Alexi había alcanzado. Típicamente, Hera era la que prestaba mucha atención a las preferencias y sentimientos de los demás, lo que hacía las acciones de Leo aún más especiales para ella.
—Ahora, al ser el objeto de tal cuidado meticuloso, Hera sentía un calor en su corazón que la hacía aún más reacia a herir a Leo, fortaleciendo al mismo tiempo sus sentimientos hacia él —Atrapada entre emociones contradictorias, se sentía cada vez más atraída hacia Leo. Era como estar entre la espada y la pared, incapaz de ignorar la creciente conexión entre ellos.