บท 131: Emergencia del Dios del Juego (b)

—¡Los dos capítulos anteriores han sido corregidos! ¡Disculpen el error! —La multitud que fue testigo de su fracaso comenzó a comentar.

Alguien señaló las rocas esparcidas sobre la mesa y se rió:

—¡Oh Dios mío, son todos solo pedazos de basura! Perdió 100 mil en un solo día. ¡Su suerte es como la mierda de perro!

—Con suerte así, es una sorpresa que aún tenga una familia que lo apoye y dinero para gastar.

—Apuesto a que la riqueza de su familia se está agotando por su culpa.

Roy también se podía ver señalando y riéndose de Donovan:

—¡Pfft! Gastar 100 mil monedas de oro y solo obtener rocas valoradas en dos ladrillos a cambio... ¿qué tan desafortunado puedes ser?

Al escuchar sus palabras, Donovan se sintió tan sacudido que aparecieron arrugas en su cara y también se sintió tan enojado que le saltó una vena en el cuello.

Estaba frunciendo el ceño, llorando y sintiéndose enojado al mismo tiempo.

Mirando a Roy, dijo: