( Punto de vista de Angakok )
Angakok se preocupaba poco por las vidas insignificantes del dios que tenía enfrente. Lo primero que le importaba era comprobar el progreso de su futuro recipiente y le resultó fácil establecer el progreso de Max una vez que sintió el poder fluyendo a través del cuerpo del clon.
Al parecer, su elegido había activado el hechizo [ Levantar de la Horda ] pero se había desmayado antes de convocar a la horda para que realmente se uniera a él en la batalla.
Los tres bufones frente a él parecían querer matar a Max mientras estaba inconsciente, algo que Angakok no podía permitir que sucediera, pero si él los mataba en lugar de Max, entonces su recipiente perdería una valiosa EXP que tampoco deseaba perder.
Lo que necesitaba hacer era un acto de equilibrio donde debilitaba a los tres dioses frente a él a niveles patéticamente bajos para que, una vez que Max recuperara la conciencia, pudiera volver y matar a los 3 para acumular una tonelada de EXP.