—¡HAAAH! —gritó Damian mientras bloqueaba el ataque del monstruo.
Sam se movió rápido pasando por su lado y giró su lanza arrancando la mano del monstruo.
¡GOLPE!
Damian empujó al monstruo contra la pared, a un lado permitiendo que la lanza de hielo empalara al monstruo.
Alyssa, que caía del aire, se detuvo justo sobre el suelo mientras Asher la atrapaba.
Alyssa mantuvo su equilibrio y miró a Asher.
—Gracias —dijo ella.
—Está bien, ahora puedes descansar —dijo Asher.
—¿Vamos a tomar un descanso? —preguntó Damian.
—Sí —respondió Asher.
Sam asintió mientras se sentaba en una de las rocas y Asher sacaba las pociones para dárselas a Alyssa.
«¿Es este el mismo Asher Greville?», Sam pensó en su cabeza.
La primera impresión que Sam tuvo de Asher fue la de una persona despiadada e indiferente, que coincidía con la personalidad de aquellos que provenían de la Familia Greville.