—Eso es inusual considerando que usualmente tratas a todos como si estuviéramos hechos de cristal —Leiah frunció el ceño.
—Eso es solo porque no sé cuándo estaremos lejos... Estoy planeando dejar a los gólems detrás para que guarden las montañas y asusten a la gente bestia —explicó Rain—. Para asegurarme de no perderme de nada y no hacer nada demasiado imprudente, será mejor que también vengas... Podría intentar apresurar las cosas si no conozco la situación aquí.
Todos asintieron... Rain era un preocupón de principio a fin. Además, les gustaba esa idea... querían ver el fin de esa complicada situación y finalmente tener la oportunidad de vivir en paz de nuevo. También querían asegurarse de que Rain no volvería todo desordenado.