Cuando Lara miró hacia la entrada, unos diez segundos después Rowin entró a toda prisa. Cuando nos vio ahí sentados, en especial a Roxy y Lara, se quedó paralizado por la impresión de ver a su hija, con una niña en brazos y un tipo con cara de idiota a su lado.
— Roxy cariño , ¿cuándo llegaste?, ¿Quién es él? ¿Quién es la niña?, —preguntó aún sorprendido.
— ¡Hola, papá!, acabo de llegar. Ella es mi hija, tu nieta, y él es Rudy, mi marido.
Rowin se acercó a Roxy y le dio un abrazo.
— ¡Dios, hija!, Estoy muy feliz de que estés bien. Nunca me imaginé que te casarías.
— Sí, lo siento por no avisar papá. Hemos estado ocupados . Ahora soy profesora en la Universidad de Ranoa.
— ¿Enseñas a humanos, hija? —preguntó Rokary.
— Humanos, demonios, elfos, feráles . En Ranoa puede estudiar cualquier raza. Es un país muy tolerante.
— ¡Me alegro mucho, hija! —dijo Rowin, que de pronto se fijó en mí, el "idiota" que se acuesta con su hija y la hace gritar de placer .
— Mucho gusto, joven. —(¿Joven?. Éso sonó raro, ya que Rowin se ve igual de joven que Roxy.)— Soy Rowin Migurdia, el padre de Roxy, me dijo
— Oh, mucho gusto, suegrito, quiero decir, señor. Soy Rudeus Greyrat.
— Mmm, ¿dónde escuché ese nombre antes? —se preguntó Rowin, llevándose la mano a la barbilla y mirando al techo.
— Querido, es el niño que estaba con el señor Ruidjerd hace doce años, ¿recuerdas?, El que te llamó suegro, —le dijo Rokary
— ¡Oh, ya recuerdo!, Así que era verdad. Roxy, en ese tiempo él solo tenía diez años, ¿que estabas pensando?, la regaño Rowin.
— Oye, papá, deja de avergonzarme. Nos casamos cuando Rudy ya era adulto. No soy una asaltacunas, no hice nada con el cuándo era un niño.
— Lo siento cariño, es que olvido lo rápido que pasa el tiempo. Sabes siempre me imaginé que si alguna vez te casabas, sería con un humano. Siempre fuiste tan arisca con la tribu al no poder usar telepatía amor.
— Deja de decir eso, papá, me avergüenzas frente a mi esposo .
— ¿Roxy se comporta bien cómo una esposa humana? —me preguntó Rowin.
— Sí señor y hacemos las tareas casi todas las noches —le dije—Aucht, Roxy amor, no me golpees.
— Deja de decirle eso a mis padres, tonto.
— Lo siento, Roxy.—le dije, pero luego me voltee para hablarle a papito suegro. —Señor, me he casado con su hija —dije, haciendo una reverencia .
— Sí, me alegra que Roxy formará una familia. Me asustaba que terminara sola o le pasara algo tan lejos.
— ¿No le molesta que yo sea un humano, señor?, pregunté.
— Claro que no. Además, cuando eras niño, solo nos hablabas de Roxy, jajaja aunque nunca me imagine que terminarían juntos. Aunque ahora que recuerdo, mi padre me contó que mi abuelo tenía una amante humana durante la guerra de Laplace, tal vez el gusto por los humanos venga de familia jajajaja.—A Roxy no le agrado nada esa broma. — Bueno, como sea, estoy muy feliz de verte de nuevo, hija, y más feliz aún de conocer a mi nieta, soñé muchas veces como sería ser abuelo y ahora lo soy . ¿Puedo tomarla en brazos?
— Claro —dijo Roxy, pasándole a Lara.
Lara miró a Rowin a los ojos, muy tranquila.
— ¡Qué linda eres!. Te pareces mucho a Roxy cuando tenía tres años. Bueno, excepto que eres más grande al ser mitad humana. Así que te llamas Lara. Ese es un nombre muy lindo —le dijo Rowin.
— ¿Cómo supiste que se llama Lara, papá?. No te dijimos cómo se llama.
— Ella usa telepatía. ¿Acaso no lo sabían?
— No —dijo Roxy con algo de mala cara.
— Ninguno de nosotros es telepata, señor. No sabíamos de eso —dije.
— Pero, Lara me dice que siempre habla con su abuelita Zenith y un tal Leo. Oh claro, Leo, la mascota, —dijo sonriendo mientras miraba a Lara.
Roxy y yo nos dimos una mirada.
— Claro, la bendita me dijo que mamá leía los pensamientos, pero también podía bloquear sus recuerdos, dije.
— Así es —me dijo Rokary—. Un telepata puede decidir qué recuerdos mostrar.
— Entonces, mi hija, ¿puede comunicarse con mamá y hacer de traductora entre ella y nosotros?
Rowin miró a Lara a los ojos y luego me dijo que sí. Lara puede hacer éso.
— Pero Lara no habla, Rudy,— me dijo Roxy.
— ¡Oh, tranquilos! Ella va a hablar. No se preocupen, tardará un poco, pero va a hablar. Los Migurd casi siempre usamos telepatía, pero empezamos a hablar alrededor de los tres o cuatro años, aunque si bien podemos hablar, todos usan telepatía, por eso el pueblo es tan silencioso. —dijo Rowin.
— Con razón mamá recordaba que podía hablar con Lara desde que nació. Pensé que tal vez había inventado eso,— dije muy feliz, cuando Lara aprenda a hablar, Mamá podrá comunicarse con nosotros.
Yo estaba muy contento con ésto , pero me di cuenta de que Roxy tenía una mueca en su cara. Los labios fruncidos y miraba al piso.
— ¿Estás bien, amor?, pregunté
— Sí, no te preocupes, Rudy.
— ¡Oye, Lara, soy tu papi!
— Ella dice que no te entiende —dijo Rowin.
— Oh, cierto —dije—. Estoy hablando en demoniaco. Soy tu papá —dije en humano.
— Ella dice que lo sabe. Dice que le gusta cuando le cantas por las noches en tu verdadera lengua, esa canción de la niñita aunque dice que tu voz es horrible.
La mire sorprendido por ésto , es cierto, a Lara, Lucy y Ars siempre les canto por las noche hasta que se duermen y les hablo en mi antigua lengua, pero Lucy jamás me a hablado en castellano, a pesar de que siempre le hablaba en ese idioma Cúado era una bebé.
— Lara, hija mía, ¿entiendes lo que estoy diciendo? —le dije, cambiando al castellano.
— Ella dice que sí, te entiende. Siempre le hablas y le cantas en esa lengua desde que nació.
La miré con ojos llorosos y ella saltó a mis brazos.
—Te amo mucho Lara, mi niña— le dije en castellano y ella me acarició la cara.
—Ella dice que también te ama mucho— me dijo Rowin sonriendo.
Le pasé Lara a Rokary y se quedaron viendo también. No sé qué se estarán diciendo, pero por la sonrisa de su abuela deben estar hablando de la vida de Lara en Ranoa.
—Roxy, amor, ¿estás bien?— le pregunté nuevamente, ya que estaba muy callada.
—Sí, estoy bien Rudy, no te preocupes.
—Bien, suegros, les traía algunos obsequios— les dije pasándoles la tela, el azúcar, las golosinas, el chocolate, las gemas y las monedas de oro. Además, les dije que Eris les mandaba sus saludos y les agradecía por la espada. Pensé que Rowin se molestaría porque tengo otras esposas, pero no le tomó mucha importancia, aunque Roxy ya me lo había dicho que Algunos migurd de alto rango tienen más de una esposa, así que era normal para ellos.
—Esto es mucho dinero, no sé si aceptarlo— dijo Rowin.
—Aceptalo, papá, por favor. Rudy y yo ganamos muy bien con lo que hemos creado para el gremio mágico Ranoa,—les dijo Roxy.
—Está bien, hijos— dijo Rowin con una sonrisa. Esa noche cenamos carne de tortuga, mientras hablábamos de nuestras vidas. Realmente, ellos no tenían mucha fe en Roxy, por lo que se sorprendieron mucho de todo lo que habíamos logrado. También hablamos de nuestras aventuras y la verdad fue un reencuentro bastante bonito, más que nada porque Rowin y Rokary estaban felices por conocer a Lara.
Esa noche, luego de saludar al anciano de la aldea (que sólo aparenta la edad de Paul), nos asignaron una casa vacía ya que éramos una pareja de casados. Encendí un fuego para estar calentitos y nos acostamos con nuestra hija en medio, quien rápidamente se durmió.
—Te ves feliz, Rudy— me dijo Roxy.
—Bueno, sí. Podremos hablar con mamá y tus padres estaban felices. Por cierto, ¿Te pasa algo, Roxy? Desde que llegamos, estás con la cara larga. ¿Te molesta que nos mandaran a dormir acá?. Debes entenderlos, tus padres se comieron una barra de chocolate cada uno y por cómo se miraban después de éso , es obvio que esta noche te van a hacer un hermanito.
—Ya cállate Rudy. No hables éso de mis padres. Puaj, maldita sea, me diste una horrenda imagen mental de ellos.
—Pero amor, es algo natural.
—Ya cállate, ni quiero escuchar más sobre eso.
—Lo siento, amor.
—Y otra cosa, tenías que decirles que hacemos las tareas todas las noches. No sabes la vergüenza que me dio cuándo le dijiste eso.
—Pero amor, pero ellos preguntaron.
—Tonto no debes responder a eso así, bastaba que le dijeras que si— me dijo inflando sus adorables mejillas.
Nos quedamos callados unos minutos después de ser regañado por Roxy. Y mientras, yo le acariciaba el pelo a Lara, quien dormía plácidamente, rompí el silencio .
—Tuvimos una niña muy linda, ¿no crees, Roxy?. Ella entiende mi antigua lengua, esta niña será una genio.
Pero Roxy no dijo nada y tenía una cara muy complicada, era como si quisiera decir algo.
—¿Está bien Roxy?, ¿qué te pasa? Estás con la cara larga desde que llegamos. ¿Acaso no estás feliz de ver a tus padres?—Ella no dijo nada, me miro y desvío la mirada. — Sé que no te gusta estar aquí porque no puedes usar telepatía y nunca te sentiste integrada, pero tus papás te aman. ¿Qué importa lo que piensen los demás? Eres una reina del agua por dios santo, eres la migurd más genial del mundo.
Roxy abrió los ojos con la última frase y me dio una linda sonrisa.
—No, no es eso, Rudy.
—¿ O es porque Lara es telepata?. Oye, ya lo sospechábamos cuando regresé con mamá de Milis. ¿No me digas que tienes envidia, Roxy? Creí que ya no te pasaba eso.
—Claro que no. Lara es mi hija, la amo. Lo que pasa, Rudy, es que yo me sentía una paria en esta aldea. Sólo papá, mamá, el sabio, sus esposas y sólo algunos migurd más sabían hablar idioma demoniaco y me sentía muy sola cuándo era niña. Nunca tuve un amigo ni nada, fue una niñez solitaria.
—Lo sé, amor. Me lo has contado muchas veces. Pero ahora somos felices, me tienes a mi, a las chicas a nuestros hijos, la familia y nuestros amigos, nunca más te sentirás sola amor.
—Lo sé Rudy, los amo a todos en nuestra familia, pero pensé en Lara, ¿y si ella se siente así con nosotros? , ella no puede hablar ¿y si se siente sola?, ¿y si por eso no tiene expresiones? , solo ríe aveces cuándo hace travesuras, pero y ¿si siempre está sería porque no podemos comunicarnos con ella?
—¿Adónde vas con ésto Roxy?— pregunté.
—Rudy, y si dejamos que Lara se quede aquí con mis padres y se eduque aquí en la aldea, aquí tendría muchos amigos y tal vez sea más feliz en este lugar.
—Por ningún motivo— le dije enojado.
—Pero Rudy.
—¡Pero nada! , Lara es mi bebé, no la voy a dejar al otro lado del mundo, lejos de sus hermanos, sus madres y sus abuelos. Ella puede venir cuándo quiera, pero cuando sea adulta, no quiero que se crie lejos de mí, soy su padre maldita sea.
—Rudy yo...
—¿Qué hay de Silphy, Eris y Nanahoshi ? Ellas también la aman, y aunque fuera cómo dices tú, yo voy a hacer todo en mi poder para que se crie cómo una niña normal y no se sienta sola.
—Lo siento Rudy, no pensé que te enojarías tanto. Lo sé, fue una idea estúpida, no lo tomes a mal, yo amo a Lara con todo mi corazón. Olvida lo que te dije.
—Escucha Roxy, en algún momento Lara será adulta y se irá de nuestro lado, yo quiero ver crecer a mi hija, quiero verlos crecer a todos.
—Lo siento amor— me dijo Roxy al borde de las lágrimas. Creo que esta es la primera vez que yo la regañaba, siempre es Roxy quien me regaña a mi, creo que esta es la primera vez que estaba molesto con ella.
Roxy acarició el cabello de Lara, le besó la mejilla, y luego se acurrucó a mi lado.
—Lo siento Rudy—dijo abrazándome y dándome un beso en la Mejilla—No se que estaba pensando, es obvio que tu jamás dejarías que aparten a nuestros hijos de ti.
—Tranquila amor, los voy a proteger a todos, lo juro, no te preocupes, pero no vuelvas a pensar en éso por favor .
—Nunca me habías hablado así Rudy, se nota que has madurado amor.
—Te amo Roxy, pero ya no soy el niño de la aldea buena, y mis hijos y ustedes son todo pa mi, buenas noches, dije besandola.
Pasamos un día más con Rowin y Rokary, dónde aproveché de hacer unos pozos de agua para la aldea migurd, que el anciano agradeció mucho, además de reparar los caminos y muros defensivos. Los migurd me miraban con los ojos abiertos cuando hacía esto, mientras los niños jugaban con Lara en silencio. Vi a Lara sonreír, ella destacaba en comparación con otros niños, es bastante más alta que los migurd de su edad, y es muy notorio a la distancia, lo que demuestra su ascendencia humana.
Y así llegó el día que debíamos partir. Aún me queda que hablar con un par de reyes demonio.
—Bueno, llegó la hora de regresar— le dijo Roxy a sus padres.
—¿Vas a volver, Roxy, cariño?—
—Sí, mamá, en unos 10 años.
—Regresa Roxy, quiero volver a ver a Lara, —dijo Rowin
—No se preocupen— dije —, volveremos pronto. Es más, ¿porque no nos visitan en Ranoa, cuando todo ésto termine? .
—Jajaja, no creo, ese viaje dura años— dijo Rowin.
—No, créame que sería muy rápido. Cuándo todo esto acabe vendré e iremos a Ranoa.
—Esta bien— me dijo Rowin con una cara de que no me cree una mierda.
—Si tenemos más hijos, les prometo que los visitaremos nuevamente — les dije.
Ellos solo sonrieron. —Bien hija, Rudeus, que tengan un buen viaje, pero antes me gustaría abrazar a Lara una última vez— dijo Rowin.
—Claro, toma— dijo Roxy pasándole a Lara, pero esta se aferró a ella como un monito.
—¿Qué pasa hija? Despídete del abuelo.
—Jajaja, no te preocupes Roxy, ella dice que no quiere que la alejen de su mami— dijo Rowin.
De pronto Lara miró a Roxy con los ojos llorosos y en sus tres años y medio de vida, por primera vez, habló:
—No quiero mami, quiero estar juntas.
Roxy la miro con sus grandes y hermosos ojos azules y le dio una hermosa sonrisa—Sí, mi amor, te prometo que jamás me separaré de ti— le dijo Roxy con los ojos llorosos.
—Lara, amor, nadie te va a separar de mami, lo juro— le dije —, pero dile adiós a los abuelitos.
Lara me miró y saltó a los brazos de Rowin y Rokary, y se despidió de ellos, quienes se quedaron mirándonos mientras desapareciamos en el horizonte .
Regresamos a Rikaris donde nos esperaba Eris. Cuando llegamos, Eris también se emocionó cuando Lara la llamó "mami roja", sin embargo a mí no me decía nada, cuando le pedí que le dijera papá, ella solo me miraba con sus ojitos risueños. En fin, la fui a dejar de vuelta a la Sharia, y de ahí regresé a Rikaris, desde donde iniciamos dos visitas más a los últimos reyes demonio. Eso nos tomó casi un mes. Ya con todo el continente informado sobre la búsqueda de Geese y Kishirika, regresamos a la Sharia.
Llegamos a la cabaña donde informamos a Orsted de que la misión estaba cumplida. Él parecía muy satisfecho con esto. Lo siguiente sería visitar al Dios de la espada Gal Farion.
—Orsted, Silphy dará a luz en unas tres semanas, ¿puedo postergar ese viaje? —le pregunté.
—Mmm, la idea es que vayas pronto, aunque es poco probable que Gal Farion sea un apóstol.
—¿Y qué debo esperar de él? —pregunté .
—Es un tipo afable, no deberías tener problemas, con la espada qué conseguiste seguro que podrás hablar con él.
—¿Y si se vuelve loco? —insistí.
—Lo dudo, pero si tienes problemas y si no alcanzas a ponerte la armadura dorada, tu ya sabes que hacer Rudeus .
—Sí ya veo , espero no tener que llegar a eso aún. No necesito que el hombre-dios y sus apóstoles se enteren por ahora .
—Rudeus, Ariel estuvo aquí, —dijo Orsted cambiando el tema.
Cuando me contó de eso, ese sentimiento de culpa que había olvidado en las últimas semanas me invadió de nuevo. —¿Qué queria?—pregunté .
—Hablar contigo. Ella está preocupada, por lo que paso, ademas vino con Edward.
—¿Ella está loca? , le dije a Ariel que no trajera al bebé. El debió gritar de terror al verte.
—No, no se asustó.
—¿Qué? Dije pálido.
—Ohhhh, este, veras, eeeee, es que estaba usando el casco —dijo Orsted.
—Oh, ya veo. Como sea, no puedo ir a verla. Debo estar con Silphy. Ya me siento demasiado culpable como para ir a ver a mi amante, quiero decir a la reina.
—Entiendo —dijo Orsted. —Pfff, bien, quédate y acompaña a tu esposa.
—Gracias. Me iré a casa.
—Rudeus por cierto, buen trabajo —me dijo mientras salía de su oficina . No mentiré, me sentí bien cuando me dijo eso.
Llegué a casa y Silphy ya tenía una gran panza. Tenía ocho meses y medio, podía dar a luz en cualquier momento, apenas llegamos la besamos y le acariciamos la barriga.
Esa noche cenamos en familia, incluyendo a mis padres y Norm, además de Elinalise y Clive quienes pasan mucho tiempo en casa .
Después de cenar, nos reunimos en la sala donde Lara era el centro de atención. Ya había empezado a hablar luego de que la deje después de visitar a los padres de Roxy. De hecho las chicas de la casa y papá ya le estaban enseñando cosas, cuando regresamos .
—Lara, ¿quién soy yo? —Mami azul —respondió. —¿Y quién soy yo? —Mami Nana. —¿Y yo, Lara? —Abuelito Paul. —¿Y yo? —Mamá roja y hermanito Ars. —¿Yo, quién soy, Lara? —Hermanita Lucy. —¿Y yo? —Mami blanca.
Y así reconoció a tía Norm, tía Aisha, abuelita Lilia, abuelita Zenith, Abuelita Liz y primo Clive, mientras todos le aplaudian.
—Lara, ¿quién soy yo? —le dije mientras la tomaba en brazos y ella me miraba,
a los ojos sin decir nada. —Vamos amor, di "papi Rudy".
Pero Lara se mantenía en silencio.
—Vamos amor, di "papi Rudy". Reconoces a todos menos a mí, soy papá, al menos di papá .
Cuando dije eso, Lara miró y sus ojos se iluminaron.
—Pa, pa, pa.
—Sí, Lara, amor, tú puedes. Di "Papi Rudy".
—Pa, pa, payaso —me dijo provocando que Paul se tirara al suelo a reírse.
—¿De qué te ríes, anciano? —le dije a papá con mal humor, pero el viejo le dio un ataque de risa que contagió a Elinalise, Aisha y Eris.
—Lara, no le digas "payaso" a tu papi —la regañó Roxy, quien me la quitó de los brazos y se fue a sentar con mis otras esposas. Cuando se llevaba a Lara, esta me miraba con una pícara sonrisa.
Después de esa noche, pasé los siguientes días con Lucy, Ars y Lara. Con Nana y Eris, los sacábamos a pasear y a tomar jugo y pasteles, luego pasaba las tardes con Silphy.
Una noche, cuándo dormía con Silphy, ella me habló.
—Rudy, ¿irás al santuario de la espada?
—Sí, pero después de que tengas al bebé. Prometí que estaría contigo, amor. Perdóname por estar lejos y dejarte sola. Te amo, Silphy.
—Lo sé, Rudy. Escucha, pronto daré a luz. Quería saber qué nombre elegiste para el bebé.— cuando dije eso me sentí como la mierda, lo había olvidado por completo.
—Silphy, amor, perdóname lo olvidé —le dije. Pude ver como se puso pálida y vi la decepción en su cara.
—Ya veo —dijo en tono melancólico, que me hizo sentir aún peor.
—Amor, lo siento. ¿Estás bien?—pregunte.
—Sí, te entiendo. Has estado ocupado y yo estoy presionándote con esto.
—No, yo debí pensar en un nombre. Lo siento Silphy. Escucha mi amor. Te amo a ti y al bebé. Pensaremos ambos en un nombre. ¿Esta bien?.
—Sí —me dijo, tratando de sonreír, pero mi Silphy estaba muy rara. Y es mi culpa. La dejé de lado en su embarazo, además me comporté de manera extraña estos meses debido a la culpa por mi maldito affaire con Ariel. Eso me hacía sentir como una mierda.
Uno de esos días estaba con Silphy en la sala pensando en un nombre, cuando Lucy saltó a mis brazos.
—¿Qué les pasa? ¿Por qué están tristes? —nos preguntó Lucy.
—Es que olvidé algo que me pidió mami Blanca amor, y herí sus sentimientos.—le dije.
—¿Quería dulces?
—No, amor. Quería saber un nombre para tu hermanito.
—Pídele perdón, papi.
—No, Lucy, no estoy enojada con papi, solo que estoy nerviosa por el bebé —le dijo Silphy.
—Oh, no te preocupes —dijo Lucy, acariciando la barriga de Silphy—. Yo cuidaré al bebé, soy la hermana mayor.
—Ven, mi niña —dije, sentándola en mis piernas—. ¿Nos ayudarías a elegir un nombre para el bebé?
—Sí —dijo Lucy con una sonrisa.
—Silphy, si es niña, llamémosla como tu mamá. Sé que dijiste que no querías, pero sería lindo y ella estaría feliz desde el cielo.
—Está bien —me dijo con una sonrisa—. Pero si es niño, elige tú el nombre, el de mi papá no por favor. Eso sería doloroso para mi abuela.
—Está bien, déjame pensar en uno heroico. ¿Qué tal Kanon?
—Rudy, te lo diré de inmediato, ningún nombre de esos caballeros del zodiaco, ni de Dragon Ball Z, ni de Robotech. ¡Está claro?
—Bien. ¿Qué tal Tony?
—Tampoco nombres de películas de superhéroes, Rudy.
—Bien, ¿qué tal Sigfried?
—Mmmm, suena bien, pero no sé, hay algo que no me cuadra—dijo Silphy.
—Sieghart —dijo de pronto Lucy. Silphy me miró, sonrió y aprobó con la cabeza.
—Bien, lo llamaremos Sieghart. ¿Te gusta ese nombre, Lucy?
—Siiii —dijo mientras le abrazaba la panza a Silphy y esta le acariciaba el cabello.
Unas semanas después, mientras entrenábamos en el patio, Silphy entró en trabajo de parto.
Rápidamente, Eris fue por el doctor y papá por Lilia. Es el segundo bebé de Silphy y ya todos sabíamos qué hacer. Estábamos en medio del parto cuando el doctor dio un pequeño grito y se puso muy nervioso .
—¿Qué pasó? —pregunté asustado.
—Nada, tranquilo —dijo el médico, que estaba pálido.
—Rudy, está todo bien —dijo Silphy, muy pálida.
—Sí, amor, tranquila —le dije mientras le tomaba de la mano.
Cuando un llanto de bebé hizo que todos quedáramos en silencio ...
—Felicidades, es un varón —dijo el médico, que me pasó al niño. El doctor estaba pálido cuando me lo paso, pero era un niño hermoso. Tenía orejas de elfo como las de Lucy. Se veía un niño saludable .
—Mira, amor, es nuestro bebé. Es Sieghart —le dije, pasándoselo a Silphy.
—NOOO RUDY, NOOO, ¿POR QUÉ? —dijo mientras lo sostenía. Yo entendía su reacción. Sé lo que pasaba por la cabeza de Silphy, los fantasmas de su niñez y los abusos que sufrió. Y eso era debido al cabello de Sieghart: tenía el cabello verde esmeralda.
De pronto, Silphy se desvaneció y Sieghart casi cae. Alcancé a sujetarlo, cuando miré a Silphy, estaba inconsciente. El doctor y Roxy me hicieron a un lado, pero al examinarla Silphy solo se había desmayado. Mientras estaba ahí, aún conmocionado por lo que había pasado, aún con Sieghart en mis brazos, de pronto Eris habló.
—¿Y tú qué mierda haces aquí?
Cuando voltee a mirar , parado ahí estaba Almanfi el radiante.
—¿Tú qué haces aquí? —le pregunté .
—Rudeus Greyrat —dijo, mirando al bebé en mis brazos—. El Rey Dragón acorazado Perugius Dola solicita tu presencia en el Caos Breaker de inmediato.