Chloe dirigió rápidamente sus ojos hacia Vernon y negó con la cabeza.
Le parecía innecesario que un hombre ocupado como Vernon se encargara de una mujer poco pretenciosa, haciendo las tareas y esas cosas, pero Vernon no permitió que ella expresara su rechazo. En cambio, discutió con el Doctor acerca de qué hacer para que las manos de Chloe sanaran más rápido.
Así que Chloe solo pudo bajar la cabeza sintiéndose culpable por hacer que Vernon cuidara de ella.
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Pasaron casi medio día hasta que Chloe salió de la sala de emergencias con su mano derecha cubierta de yeso. Vernon le preguntó si quería que la llevara de nuevo, pero ella se negó rotundamente. Ya estaba avergonzada de que todos la vieran siendo cargada como un bebé.
Mackie saltó de la silla y se acercó a su mamá. Parecía muy preocupada cuando vio la mano derecha de su mamá,—Mamá, ¿duele mucho?
Chloe sonrió a Mackie,—Un poco, pero mamá está bien ahora.