En la fiesta de Emira, cuando esta se dirigía a donde Dalila a hablarle por orden de sus padres, iba pensando en porqué sus padres la habrían invitado junto a su padre, Abdiel, aún sabiendo que no cumplieron las ordenes de ella. Al llegar al lugar donde se encontraba Dalila, con un tono serio le pregunta _ ¿Tú que haces aquí? Yo en ningún momento te invité a mi fiesta_ devolviéndole la seriedad a Emira, Dalila le responde _ Pues vine aquí por la gentileza y cortesía de tus padres y por mi amistad con ellos _ Emira aún más molesta le dice _ Pues disfruta mientras dure esta fiesta, porque no volverás a este palacio_ Cuando terminó esta plática poco amena, Emira se retira con paso elegante hacia donde estaban sus padres para iniciar la fiesta.
Una vez iniciada, Emira voltea a ver hacia uno de sus lados y entre la multitud mira a una adolescente, al verla Emira se acerca a ella e interrumpiéndola en una conversación Emira le pregunta _ ¡Hola a todos, buenos días! Oye niña ¿cómo te llamas? Quiero saber tú nombre_ A lo que esta le responde _ Me llamo Badra, tú debes ser la princesa Emira, ¿cierto? _ Emira le contesta _ Sí, soy la princesa y ¿tú quién eres? ¿Perteneces a una familia poderosa? _ Con una sonrisa en su rostro Badra le contesta _ Todo un placer princesa, sí soy de una familia muy adinerada, por eso la gran relación de mi familia con los reyes, pero si me permites princesa, déjame decirte que te ves muy elegante y bella hoy con ese vestido blanco y esa corona de flores que portas en tu cabello negro y largo, te resalta perfecto con tus ojos color verdes y tu piel de porcelana _ Sonrojada y con una sonrisa, Emira le dice _ Créeme que lo noté por tu vestido tan formal y la tela tan fina que portas. Por cierto, tú también te ves muy bella y gracias por los cumplidos, los aprecio mucho, si quieres Badra nos vamos a hablar a otro lugar y a presentarte con mis padres, sígueme_ a lo que Badra replicó_ Claro que sí princesa.
Mientas esto sucedía, Dalila al ver a Emira hablando con Badra, le causó un conjunto de sensaciones, como celos, envidia y enojo hacia Emira y Badra. Por lo que para vengarse de Emira, Dalila se dirige hacia donde estaban ubicados los reyes y antes de disfrutar el banquete preparado por los mejores chefs del imperio les dice _ Su majestad disculpen que los moleste, pero cuando me invitaron me dijeron que Emira iba a reconciliarse conmigo, pero pasó todo lo contrario y ahora anda con otra niña_ los reyes le contestan _ No te preocupes, mira hay un muchacho que le pareció atractivo a Emira, ve y habla con él y después preséntaselo a Emira_ Dalila con una sonrisa maliciosa les agradece a los reyes y se va con el chico.
Dalila iba caminando entre la multitud y pasó cerca del aposento de Emira, quien estaba hablando con su nueva amiga Badra, Dalila confirmó lo dicho por los reyes al escuchar a Emira hablar sobre ese chico atractivo y sin pensarlo aceleró su paso hasta dar con el chico.
De forma tímida Dalila se le acerca y le pregunta _ Buenas tarde, una pregunta ¿cómo te llamas? _ a lo que el chico le responde _ Hola, me llamo Hattili y ¿tú como te llamas?_ Sonrojada, ella le responde _ Todo un gusto Hattili, yo me llamo Dalila y dime ¿qué te trae por el palacio? _ con una copa de oro en la mano le responde _ Pues soy hijo y heredero de una prestigiosa familia que presta dinero a los pobres y después les cobra el doble de dinero y siempre mi familia a tenido una buena relación con la familia real. ¿Y a ti que te trae por acá? _ Tímida Dalila le responde _ Soy hija de un general y mano derecha del rey, también estoy acá porque solía ser una gran amiga de la princesa Emira_ sorprendido Hattili le dice _ ¿conoces a la hermosa princesa Emira?...
Durante esta plática de Dalila con Hattili, Emira y Badra habían salido del aposento de Emira quien quedó asombrada por el lujo que Emira tenía en su aposento y caminando por los pasillos del palacio, Emira escucha la voz de Dalila y de un hombre, por curiosidad, Emira va a investigar con Badra con quién hablaba Dalila, para su sorpresa, Dalila hablaba con el chico que le había parecido atractivo. A Emira no le gustó nada y reaccionó de mala manera diciéndole a Badra _ No puede ser que esa inmunda esté hablando con ese chico y yo no, me pareció muy atractivo, además si está aquí es porque es de familia adinerada, lo cual me gusta más, pero no le diré nada para no dar mala imagen, sabes qué Badra, acompáñame a donde mis padres y hablaremos de esto_ Badra un poco descontenta le dice _Está bien, vamos.
Al llegar, los reyes estaban hablando de negocios con una familia muy prestigiosa tanto en el imperio, como en Egipto. Emira interrumpe de una manera muy descortés diciendo _ Papá necesito hablar contigo ya y no me importa con quién estés hablando_ de una manera muy apenada, el rey les dice a sus invitados _Denme un momento, ya los atiendo mejor, mi hija me necesita_ retirándose el rey le dice a Emira _ ¿Qué pasó hija? ¿Qué es tan importante para interrumpirme? _ Emira furiosa le dice _ Papá por tu culpa Dalila está hablando con el único que me ha parecido atractivo, todo por ti, yo no quería que viniera ella, yo soy la princesa y le ordené que no volviera jamás pero todo es tu maldita culpa_ el papá enfurecido con Emira le dice _ Yo soy el rey, tú eres la princesa, las personas me obedecen a mí, no a ti, yo tengo el poder sobre ellas, además si la invité es para que recuperaran su relación, porque nadie más te va a soportar en este reino ni en ningún otro, dile a Dalila que te lo presente o ¿eres muy egocéntrica para decírselo? _ furiosa Emira llama a Badra y se van del lugar.
De camino Emira le pregunta a Badra _ Tú sí me soportas verdad, tienes que soportarme, soy la princesa_ Badra disconforme le dice _ Pues mucha de tú actitud no me gusta para nada y no te soporto mucho_ lo escuchado por Emira no fue de su agrado, quien de manera repulsiva le dice _ Pues entonces aléjate de mí vista_ Badra insatisfecha se marcha.
Cuando Emira encontró a Dalila con el apuesto joven charlando y recorriendo el salón, a Emira le causaron celos de verlo con otra…