Jordan cayó en la oscuridad.
Sintió que el mundo entero se había vuelto silencioso de repente. No se oía nada. Solo podía ver una escena en el oscuro mundo frente a él.
Levana y Chloe.
Vio a Chloe sonriendo mientras se lanzaba a los brazos de Jordan. Ella sonreía feliz.
—Papá, sabía que vendrías a buscarme. Dijiste que no abandonarías a Chloe. Lo sabía. ¡Jeje!
Levana le dijo a Jordan con alegría:
—Jordan, de verdad viniste al Planeta del Rey Celestial. Lo... hiciste de verdad. Estoy orgullosa de ti. Estoy orgullosa de que Chloe tenga un padre tan excepcional...
Jordan sabía que estaba al borde de la muerte. La espada voladora de Gerald era demasiado rápida y su poder demasiado dominante. Podía penetrar cualquier cosa que Jordan conjurara.
Al final, Jordan y Gerald eran de dos mundos completamente diferentes. Personas de dos niveles diferentes no podían luchar igual en absoluto.