¡La famosa «Viuda Negra», Scarlett Johansson de Hollywood! Todo el mundo sabía quién era.
Pero ahora, Park Chan-young estaba tan enfadado que casi no podía respirar. Tartamudeó con rabia: —¡Tú... tú... estás mintiendo! Yo... yo fui el que trató a Sca... ¡Scarlett Johansson! ¡Yo... yo fui el que la hizo más joven! Tú... tú estás tomando el crédito por los logros de la familia P... Park. ¡Tú... tú eres desvergonzado y... y despreciable!
Park Chan-young siempre había vivido la cómoda vida de un joven señor de una familia adinerada de élite. Nunca había sufrido este tipo de contratiempos y frustraciones. Estaba tan furioso que casi no podía decir nada.
Al contrario, Jordan era la personificación de la calma: —Eres muy interesante. Copias todo lo que digo. ¿Te gusta tanto imitarme?
Park Chan-young estaba como loco: —Tú... tú...
Jordan replicó: —¿Yo qué? Más despacio, chico. No te atragantes con tu propia saliva y luego me culpes por ello.