Esta fue la historia de un héroe rescatando a la belleza. Para la princesa Ming Zhu, An You brilló con el halo de un héroe.
Y una gracia salvadora, por supuesto, debe ser retribuida con el cuerpo.
Ning Shu: JeJeJe.
La princesa, que obviamente tiene un estatus noble, se arrodilla a cada paso. Claramente se suponía que iba a vivir en el palacio imperial, pero insistió en quedarse en la casa de un súbdito y le dejó la gran responsabilidad de reconstruir el legado del Príncipe Yan a un niño que ni siquiera había cumplido los siete años mientras ella pasaba su tiempo disfrutando del romance.
E incluso tenía un sirviente que no tenía sentido del estatus de clase.
Ning Shu tuvo la premonición de que una ola de absoluta estupidez basada en el nombre del amor verdadero estaba a punto de atacar.
Sin embargo, Ning Shu realmente solo se vino abajo cuando vio el deseo de la propietaria original, porque así era como se veía el deseo.
El deseo de Wei Ling Xian:...
No había contenido en absoluto. Maldición, si no tienes ninguna tarea o demanda, ¿cómo se supone que voy a contraatacar por ti?
"2333, ¿qué pasó?" preguntó Ning Shu. "¿Qué pasa con el deseo de Wei Ling Xian?"
2333 dijo: "La propietaria original ni siquiera sabe lo que debería desear ya que tiene tantas quejas que ni siquiera sabe por dónde empezar a expresarlas. Ella había respetado a su suegra, apoyó cuidadosamente a toda la familia para que An You no tuviera preocupaciones mientras estaba en campañas. Hacia sus dos hijos, naturalmente era tan cariñosa que ni siquiera hace falta decirlo, pero terminó sin nada. No importo cuán buena fuera con su suegra, su suegra solo se preocupaba por su hijo y su nieto, y había aceptado que la princesa Ming Zhu se convirtiera en la concubina de su hijo. En cuanto a su marido, después de casi veinte años de amor mutuo y sin concubinas, ahora le dice que ha encontrado a su verdadero amor. Además de todo eso, sus dos hijos apoyan a la amante".
"Si pierdes todo, ¿qué tipo de deseo puedes tener? Su corazón está prácticamente muerto." 2333 luego dijo: "Esta es una tarea que está cerca de la dificultad de nivel medio. Las tareas en las que el encomendador no tiene demandas específicas son las más difíciles de llevar a cabo".
Ning Shu: …
Maldición. Es una locura de amor sin arrepentimientos, un amor verdadero que te hace capaz de renunciar a todo, incluida la familia.
Esta tarea fue seriamente problemática.
Se rascó la cabeza y algunos mechones de cabello cayeron en su mano. Cada vez que An You hiba a la batalla, la propietaria original esperaba ansiosamente a que regresara, sin apenas comer. Siempre estaba preocupada de que algo le sucediera a An You en el campo de batalla, pero aún así tenía que mantener una actitud tranquila y administrar con cuidado toda la residencia.
Ning Shu se levantó de la cama y miró hacia el espejo de cobre. Wei Ling Xian tenía rasgos armoniosos y dignos. Estaba claro con una sola mirada que era una mujer serena y generosa que entendía bien el decoro y cuidaba hábilmente a la familia. Era una mujer que era capaz de llevar a su familia a alturas más altas en la sociedad feudal.
Por el bien de Wei Ling Xian, An You no había tenido concubinas, por lo que eso había causado que todas las demás mujeres casadas en la capital envidiaran mucho a Wei Ling Xian. Wei Ling Xian había hablado una vez con An You sobre tener un par de concubinas, pero An You se había negado.
Se decía que An You, un general poderoso, era dominado, pero Wei Ling Xian lo encontró muy dulce.
Ella nunca imaginó que An You realmente terminaría entrando en calor primaveral en su vejez y teniendo sentimientos eternos por una mujer que tenía aproximadamente la misma edad que su hija. ¿En qué la convirtió eso?
La diferencia entre humanos y animales era que los humanos tenían reglas, moral, responsabilidades y sentido de la justicia. Si uno actuaba basado en instintos e hizo lo que quería, entonces solo eran animales.
Las grandes puertas talladas se abrieron y el crujido interrumpió la línea de pensamiento de Ning Shu. Entró una criada con una apariencia sencilla y elegante. Probablemente solo tenía unos diecisiete años y parecía tener una personalidad tranquila ya que sus pasos eran ligeros y firmes al entrar en la habitación.
Cuando Zhu'er vio a Ning Shu sentada frente al espejo de cobre, se acercó con una sonrisa. "Señora, ¿está despierta?"
Ning Shu asintió y luego dijo: "Ayúdame con mi cabello".
Zhu'er cepillo el cabello de Ning Shu, luego hábilmente comenzó a peinarlo mientras decía: "Señora, su siesta de la tarde fue bastante larga esta vez. Ya es hora de la cena, la vieja señora envió a esta sirvienta a llamarte."
Ning Shu asintió y luego se puso de pie. Zhu'er rápidamente quitó el cabello caído del peine de marfil y lo escondió en su palma para evitar que Ning Shu lo viera.
"Zhu'er, he envejecido de nuevo, ¿no?" Estrictamente hablando, Wei Ling Xian ya contaba como una mujer de mediana edad ya que su hijo ya tenía diecisiete años.
Zhu'er dijo con una sonrisa: "La señora es para siempre la más hermosa en el corazón de Zhu'er".
Ning Shu negó con la cabeza. Una figura que era ágil como una mariposa apareció de repente.
"Madre." An Ling Yun se acercó para tirar del brazo de Ning Shu. "La abuela hizo que tu hija viniera a ver cómo estaba mamá hoy. ¿Te enfermaste? ¿Estás bien?"
Ning Shu miró a An Ling Yun. Era una niña adorable y mimada. En el momento en que la princesa Ming Zhu llegó a la residencia del general, las dos se hicieron buenas amigas.
Cuando su madre sufría, An Ling Yun seguía corriendo hacia el patio de la princesa Ming Zhu. Incluso si no se molestara en consolar a su madre, no debería dirigirse al patio que le causaba tanto dolor.
Todos dicen que las hijas eran dulces angelitos, pero al final, todos quedaron conmovidos por la sinceridad de la princesa Ming Zhu y acusaron a la propietaria original de ser envidiosa y maliciosa.
Cuando An Ling Yun vio que Ning Shu la miraba con una mirada escrutadora e indiferente en sus ojos, movió un poco el brazo de Ning Shu con inquietud. "Madre, ¿Qué te pasa?"
Ning Shu sonrió amablemente y dijo: "Madre estaba pensando que Ling Yun ya es una niña grande ahora. Ya es hora de que tengas tu propia familia. Mamá está pensando en qué tipo de suegros encontrarte".
Esta An Ling Yun también era una joven ingenua que había crecido en una familia armoniosa y perfecta, por lo que no se dio cuenta del daño que la princesa Ming Zhu le había causado a su madre al convertirse en la concubina de su padre. Esto no fue solo un problema de un par de palillos adicionales.
Por eso la ingenuidad nacida de la ignorancia era la más dañina. An Ling Yun era así y la princesa Ming Zhu también era así.
Cuando An Ling Yun escuchó que Ning Shu quería encontrarle un marido, se sintió un poco avergonzada, pero aun así dijo abiertamente: "Ling Yun quiere encontrar un hombre como padre que sea majestuoso y alto, y trate a Ling Yun como el padre trata a la madre con total devoción."
Cuando Ning Shu escuchó lo que dijo, antes de que pudiera responder, sintió que una intensa ola de tristeza y entumecimiento llenaba su cuerpo junto con el miedo, miedo a la destrucción que pronto traería la llegada de la princesa Ming Zhu.
Incluso Ning Shu se vio afectada por la tristeza, la vacilación, el odio y el dolor que brotaron de su cuerpo.
Desde que su alma se hizo más fuerte, rara vez se vio afectada por las emociones de los propietarios originales, pero estos sentimientos surgieron como olas colosales y causaron que su corazón se apretara con un dolor agudo. Fue tan malo que Ning Shu se dobló de dolor y tuvo que agarrarse el pecho. Se sentía como si innumerables agujas finas estuvieran apuñalando su corazón.
Fue tan doloroso, las venas de su frente se hincharon y no parecía haber un solo rastro de calor en su cuerpo.
¡Hacía tanto frío!
Ning Shu se tambaleó y An Ling Yun se movió apresuradamente para apoyarla. Cuando vio que el rostro de su madre estaba mortalmente pálido y que su frente estaba cubierta de sudor frío, preguntó preocupada: "Madre, ¿estás bien?"
Zhu'er también se acercó para apoyar a Ning Shu y Ning Shu dijo débilmente: "Ayúdame para sentarme en la cama por un rato".
An Ling Yun y Zhu'er ayudaron a Ning Shu a sentarse. Ning Shu presionó su corazón mientras respiraba profundamente para calmar sus emociones.
Una sensación de frescura fluyó en su corazón calmando el dolor y la furia impotente que llenaba su corazón. Ning Shu sabía que este era el efecto del halo de calma en el que había gastado ciento cincuenta mil puntos.
¿La propietaria original había vivido sus días con estas emociones reprimidas en su corazón? ¿Qué tan doloroso debe haber sido?