บท 93: Un escenario macabro
Adriel miro al soldado que estaba vomitando toda su comida en el suelo, este soldado es un recluta que acababa de terminar su entrenamiento, es fuerte, pero carece de experiencia y solo ha luchado contra zombis y algunas bestias.
Los soldados que han luchado en el frente durante la prueba de promoción no se inmutarían aunque estuvieran frente a un mar de cadáveres.
"¡De pie, soldado!", Adriel ordenó inexpresivamente, con la cara todavía pálida, el recluta se levantó e hizo un saludo militar frente a Adriel.
"¡Me disculpo por mi comportamiento, señor!"
"La próxima vez serás enviado de vuelta al campo de entrenamiento", Adriel comentó casualmente, haciendo que el soldado se pusiera pálido, el entrenamiento dirigido por la comandante Irina ya es lo bastante horrible, si fuera devuelto por mala conducta ...
"Llévame a lo que viste", el soldado no tuvo tiempo de planteárselo antes de escuchar de nuevo la voz de Adriel.
"E-Esto, señor, está seguro..."
"Es una orden soldado", el tono de voz esta vez era mucho más frío, haciéndole saber al soldado que no debería decir nada más.
El soldado asintió y lo guio por las escaleras, mientras caminaban el soldado miró a Adriel con un tono suplicante, "Señor, cuando lo veas ... por favor no te vuelvas loco, por favor, no quiero morir por un ataque de rabia de mi superior"
Adriel no hablo, se preguntó que ha encontrado este hombre para que esté tan asustado de su posible reacción.
Los dos llegaron a una puerta entreabierta al final del segundo piso, el joven recluta una vez más se puso pálido al recordar lo que vio dentro.
Adriel no se entretuvo, abrió la puerta directamente y miro dentro.
"..."
"..."
"..."
El silencio reinó durante un largo tiempo en el viejo y descolorido pasillo, la atmósfera anteriormente rancia y húmeda empezó a congelarse a tal grado que el soldado de rango B creía que moriría del frío.
¿Qué hay dentro de esa habitación que podría hacer que alguien tan tranquilo y sereno como Adriel apenas pueda controlar su furia?
Lo que Adriel vio ... fue incluso más traumático que la escena de cientos de cadáveres apilados y podridos, más traumatismo que una guerra a gran escala.
Dentro de la habitación hay ... niñas, niñas pequeñas, chicas y chicos, todos de menos de 10 años de edad.
Todos estaban muertos y desprovistos de ropa, sus cuerpos desnutridos estaban llenos de heridas, sus mitades inferiores están totalmente devastadas y llenas de un líquido blanco que no necesita ser descrito.
Y eso, por muy horrible y macabro que parezca, no es lo peor, todos estaban colgados del techo con juncos grandes que suelen usarse para sacar agua de los pozos, muchas de las extremidades de los niños faltaban, a algunos les faltaba la mitad del cuerpo y a otros solo les quedaba un esqueleto.
Encima de una mesa grande donde estaban depositados algunos cuchillos de gran tamaño, rodajas de carne y algunos brazos y pies pequeños estaban presentes, dando el toque final a esta escena extremadamente macabra y espantosa.
"¿Oye, que es lo que pasa hay?"
En este momento, llegó Isabela, rodeo a Adriel y también miro lo que había dentro del pequeño habitáculo.
El silencio volvió a reinar, duro varios minutos más antes de que Adriel diera media vuelta junto con Isabela y se marchara, dejando al soldado inseguro de que hacer.
En este momento, escucho la voz de Adriel desde atrás, "Retiro lo dicho anteriormente sobre tu comportamiento, selecciona a algunos soldados para enterrar a esos niños después, ahora baja, quiero que veas esto"
La voz sonaba tan fría como el infierno, aunque parte del discurso lo elogiaba, el soldado estallo en sudor frío y corrió hacia el primer piso como si su vida dependiera de ello.
Durante un breve instante, sintió pena por las personas de abajo, pero al recordar el escenario macabro que aún estaba fresco en su memoria, esa simpatía desapareció de inmediato.
Abajo, la atmósfera se congeló de inmediato en el momento en que Adriel e Isabela entraron al vestíbulo.
Adriel ni siquiera miro a los hombres arrodillados mientras ordenaba a dos soldados que seguían consolando a los huérfanos, "Saca a los niños de aquí, ya sabes donde llevarlos"
Los soldados asistieron de inmediato y sacaron a los huérfanos del edificio, esos niños serían enviados a los orfanatos que Ariel había ordenado construir personalmente, donde recibirían la mejor educación, comida y entrenamiento, también les enseñarían sobre la cultivación para poder volverse más fuertes y controlar su destino.
Adriel miro a los hombres que estaban arrodillados con miedo y dijo inexpresivamente, "Asesinato de menores, pedofilia, agresión sexual, canibalismo, abuso, ¿algo más que añadir antes de que declare vuestra condena?"
Los rostros de todas las personas se pusieron pálidas una de ellas se levantó y exclamó, "¡No es lo que piensas, no es lo que piensas, sea lo que sea lo que hayas visto, no hemos sido nosotros!"
Un puñetazo de Isabela envío a hombre volando por los aires y se estrelló contra la pared, su cuerpo estalló en pedazos sangrientos al instante.
El resto de los hombres empezó a suplicar y gritar, pero fueron silenciados rápidamente por los soldados que los golpearon en la cabeza.
Adriel escribió rápidamente en una hoja de papel antes de entregárselo a una mujer de aspecto serio a su lado.
Esta mujer tiene un talento peculiar, puede obligar a alguien a decir la verdad, si pregunta algo, la persona preguntada se verá obligada a decir la verdad y solo la verdad, esta a cargo de interrogar a los supervivientes sospechosos.
La expresión de la mujer cambió drásticamente al ver la lista de preguntas, miró a Adriel para confirmarlo, al ver que este asentía, la mujer solo pudo aceptar que era verdad y se dirigió hacia uno de los criminales que estaba atado e inmovilizado.
Así, empezó el interrogatorio.
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