บท 74: Cap 74: Madrigueras Rango C- y Armas Magicas
"Lo único que eh podido ver fue a uno de esos árboles gigantes y a 6 limos de acido"(Fliis)
"La puta madre, ¿No podemos cazar otra madriguera?"(Leo)
"Apoyo la idea"(Galván)
"Sí, sí, yo también"(Lorenzo)
Los limos, o mayormente conocidos como slimes, son intangibles y requiere magia para dañarles, además, de entre todos los limos, los de acido son mas cansinos que el resto.
Derritiendo escudos y espadas, los guerreros tenían difíciles momentos para mantenerse en primera línea, por eso eran odiados y repudiados por ellos.
"Es la madriguera más factible que eh encontrado, en el resto o hay otra madriguera pegada o hay 2 o 3 de esos árboles"(Fliis)
Hace ya 3 días que estaban caminando en diagonal rodeando –Plaga- y acercándose a las Tribus Heladas, y ahora que había una buena oportunidad ¿Querían ignorarla? Fliis que había estado corriendo y explorando esos 3 días tenía venas en la sien y tenía ganas de golpearlos a todos.
"Y una mierda, vamos a esa y se aguantan"(Santiago)
Con los huevos por los suelos, desde hace 3 días que Santiago había estado entrenando su energía corporal y perdiendo contra Ariel por lo que estaba deseando un combate decente.
Aunque ese árbol de mierda no le daría mucha batalla, al menos podría golpearlo hasta sentirse mejor.
La formación fue veloz y sencilla, un muro de escudos pero con espacio detrás para poder esquivar el acido de los limos, y el árbol que estaba en el centro de los 6 limos, era atacado por Santiago y Ariel.
Cuando todos estaban a punto de mostrarse, Santiago se quito su camisa blanca y se rodeo con el –Quinto Cielo- y con sus ojos brillando, uso –Camino al Cielo- para correr a toda velocidad pero sin hacer casi sonido alguno.
Ningún enemigo noto su presencia hasta que con su puño derecho golpeo la cara de la bestia árbol, el estrepitoso sonido explosivo del golpe hizo que a todos se les pusiera la piel de gallina, pero sin quedarse allí, el golpe creó una presión descontrolada que separo a los limos del árbol.
Dejando la marca de su puño grabada en la cara del árbol y alrededor del mismo, todo parecía hundido, como si una esfera enorme le hubiese golpeado y destrozado.
Sin poder reaccionar, las ramas del árbol intentaron atacar a Santiago, pero este piso el aire saltando hacia atrás de forma horizontal al suelo y luego como si existiese una barra en medio del aire, se sujeto y giro, colocándose de forma horizontal de vuelta pero con su cabeza apuntando a la bestia, nuevamente piso el aire impulsándose.
Las ramas del árbol fueron directo hacia él, cientos de ellas, pero usando –Torbellino de desplazamiento- todos los ataques fallaron y pasaron por los lados de Santiago mientras que este seguía recto.
Y nuevamente, sobre el anterior golpe, su puño izquierdo se reventó contra el árbol haciéndole inclinarse hacia atrás y casi caer al suelo.
Cuando el ataque bestial de Santiago parecía haber terminado, el árbol intento de nuevo golpearle con sus ramas, pero Santiago salto hacia arriba pisando el aire y salió del rango de ataque por apenas una milésima de segundo, de hecho la suela de su zapato fue cortada mientras que su pie quedo intacto.
Pero habiendo quedado absorto y concentrado en atacar a Santiago, la bestia ni siquiera se había percatado que justo detrás de él estaba Ariel, totalmente transformado y con sus garras listas para cortarle en trozos.
Un solo barrido horizontal con sus garras le abrió 4 marcas extremadamente profundas pero mientras intentaba girarse para atacar, un segundo barrido justo sobre el anterior fue dado, dejándole el tronco cortado a la mitad.
Las ramas ya estaban volando pero en vez de retirarse, Ariel sonrió y un anillo rodeo su brazo derecho.
"-Anillo de Poder: Barrido-"(Ariel)
Y en solo unos 20 segundos luego de comenzar el combate, el único enemigo rango C había caído y todo lo que quedaba eran los 6 limos de acido rango C-, las diferencias de poder eran abismales y eso se hizo notar al instante.
En especial para los Bellian que no usaban energía corporal, Santiago era como un experto y ellos simples novatos, ni técnica, ni poder puro, ni rangos, eran inferiores en todo.
Santiago por cuenta propia había casi derrotado a ese árbol en unos segundos, mientras que todos ellos juntos habían tardado 10 o 15 minutos de combate intenso y muy difícil.
Sentándose sobre el tronco partido al medio, Ariel se destransformó y bostezo mirando hacia los limos, Santiago que cayó del cielo unos segundos luego, apareció con una sonrisa brillante.
Sentándose de piernas cruzadas, volvió a ponerse a entrenar, en los últimos meses, había encontrado una forma de cultivar mana, energía corporal y su corazón puro, todo a la vez y aunque ganaba un poco menos de lo que ganaría normalmente en cada entrenamiento singular, se ahorraba mucho tiempo de entrenamiento.
"¿Qué tal va tu entrenamiento?"(Ariel)
Aburrido, Ariel que estaba viendo al resto luchar contra los limos, bostezaba y se apoyaba sobre su mano.
"Supongo que tuve un buen progreso, voy por el 20% de conseguir una habilidad genial"(Santiago)
"Hmmmm, ¿Solo 20%?"(Ariel)
"Si, solo 20% y ya puedo notar las mejoras sobre mi cuerpo, ni me imagino cuando la complete"(Santiago)
Apretando su puño y con una enorme sonrisa llena de emoción, Santiago desvió su mirada hacia el combate, viendo como George, Darius y Nacho hacían todo su esfuerzo en derrotar a los limos, Santiago suspiro.
"¿Deberíamos haber traído mas magos?"(Santiago)
"Creo que si deberíamos haberlo hecho..."(Ariel)
Los dos estaban mirando al grupo y los 3 magos ya habían agotado sus hechizos, de hecho, Nacho invoco a su tortuga volcano y George a su salamander, la tortuga comenzó a arrojar lava desde su espalda mientras que el salamander escupió bocanadas de fuego para mantener a raya a las bestias.
Pero al casi nunca haber convocado a sus familiares, estos dos eran débiles y no poseían poder y fuerza como para resistir o enfrentar por más de unos segundos a los limos.
"Voy a intervenir"(Ariel)
Cuando Ariel se levanto, Santiago sujeto su muñeca y sin dejar de mirar el combate, dejo de sonreír.
"Si ellos mismos no se dan cuenta de sus errores, no valen para ser elites, déjales aprender solos"(Santiago)
La mirada de Santiago no era de broma, hablaba en serio, casi como si fuese un maestro, cuando noto esto Ariel le miro y comprendió luego de unos segundos, ¿Los estaba poniendo en situaciones críticas a propósito? ¿Todo para que vean sus errores?
"Estas haciéndoles entrenar su juicio..."(Ariel)
"Ellos realmente creían poder contra los limos ellos solos, desde el comienzo ya sabía que no lo lograrían, quiero que ellos se den cuenta, si no saben ver sus propios límites van a morir como idiotas en las tierras salvajes"(Santiago)
"Tienes razón"(Ariel)
Sentándose de vuelta, Ariel cambio ligeramente su forma de ver a Santiago, entonces, no era un idiota que se mandaba de cabeza a cualquier sitio, claramente sabia ver sus propios límites correctamente y también los de quienes le rodean.
Es más que claro que tenía una mente fría detrás de todas esas bobadas que siempre muestra, es más confiable de lo que aparenta ser.
Luego de casi 40 minutos de combate, todos los guerreros de la línea frontal estaban agotados al punto de estar jadeando, hace casi una hora que estaban esquivando los ataques ácidos mientras portaban sus pesadas armaduras.
Leónidas, Linda, Diego y Luciano ya se habían rendido y estaban en la línea trasera recuperando su aliento, en todo ese tiempo, habían eliminado tan solo 2 limos y los 3 magos que tenían, estaban jadeando.
"¿Vas tu o voy yo?"(Ariel)
"Yo lo hago"(Santiago)
Rodeando sus brazos con el –Quinto Cielo- a toda potencia, Santiago camino hacia los Limos y usando –Desviar definitivo- el acido que era arrojado hacia él lo trasladaba a un costado suyo con sus manos.
Formando un taladro de viento en su mano derecha, Santiago clavo su brazo completo dentro de uno de los limos y en solo un instante, este cayó al suelo muerto, la resistencia de los limos hacia los ataques físicos es infinita pero ante la magia de alto rango reforzada con energía corporal eran simples insectos.
Los restantes 4 limos habían muerto como si fuesen basura a las manos de Santiago, siendo el cazador perfecto de los mismos, Santiago poseía la capacidad de desviar todos los ataques que le lanzaran y además, destruirlos en segundos.
"No-Nos falta poder mágico..."(Darius)
Dándose la vuelta, Santiago le sonrió a Darius y luego levanto su mano con un dedo apuntando al cielo.
"Poder y cantidad, ambas son escasas"(Santiago)
"Han arrasado la madriguera, la recompensa aparece en 5 segundos"
Cuando la extraña voz resonó en la cabeza de Santiago, sus ojos se convirtieron en monedas de oro y este se giro observando hacia todas partes.
Sobre el árbol un cofre pequeño apareció y detrás del, clavado sobre el tronco caído, había 4 espadas brillantes.
"¿Espadas? Mierda"(Santiago)
"Es justo lo que precisábamos..."(Bruno)
Sin demorarse, Bruno salto y sujeto la espada más grande que había, era estilo medieval, como las que usaba el Reino, totalmente común a simple vista pero al desenfundarla, una hoja tenía una línea gruesa en el centro de color marrón y a partir de esta, salían venas marrones alrededor de toda la hoja.
"Supongo que significa que es de elemento roca"(Santiago)
El segundo en tomar una espada fue Leo, el cual salto directo a por la espada más alejada de todas del cofre, era de un tamaño común, pero su funda tenia flamas gravadas y su empuñadura era un sol.
Al sacarla, una espada media fina y ligera, con una línea en el centro roja y 7 venas que conectaban a través de la hoja, Leo parecía querer llorar al verla.
Ni hablar de Galván y Lorenzo, Galván había conseguido una espada de roca y Lorenzo de agua, tanto como para Leo, Galván y Lorenzo, era la primera vez tocando un objeto de este nivel y se sentían orgullosos de haberlo adquirido.
Con algunas dudas, Bruno le arrojo mana a su espada y cuando lo hizo, desde la punta de la misma se formo un círculo mágico y dos rocas del tamaño de su cabeza se levantaron, una a su derecha y otra a su izquierda.
Ambas salieron disparadas hacia donde la punta de su espada estaba apuntando, golpeando y haciendo caer un árbol, el golpe fue brutal y lo que hizo ser más alegre a Bruno, fue que esta espada no parecía tener tiempo de recarga.
Cuando volvió a darle mana a la espada, esta consumió mas mana que antes pero volvió a arrojar el hechizo sin demorarse.
"¡¿Cómo hiciste eso?!"(Galván)
"Denle mana a la espada"(Bruno)
Haciendo lo mismo, Galván le dio mana a su espada y esta creó un círculo mágico delante de la punta de su espada, un montón de piedras del suelo se despegaron y flotando a una velocidad vertiginosa, comenzaron a girar alrededor de su espada.
Golpeando un árbol para comprobar el poder de la misma, Galván quedo sorprendido, había fácilmente cortado el árbol y las rocas parecían haber hecho muchísimo daño.
Emocionando con ver a ambos, Lorenzo hizo lo mismo, pero al contrario que ellos dos, la espada de Lorenzo creó un círculo mágico y su espada se rodeo con agua, parecía extremadamente inútil al punto en que Lorenzo cayó de rodillas con ganas de llorar.
"Las armas mágicas tienen varias etapas, la primera es casi siempre la más inútil, ya vas a poder conseguir algún ataque interesante"(George)
Antes de que Lorenzo se desesperanzase, George ya le consoló y conto sobre las armas mágicas, al oírle, al menos sentí que podía encontrar algo mejor.
Pero el que más sorprendió a todos, fue Leo, ya que al darle mana a su espada, esta se torno de color rojo y 3 círculos de pequeñas esferas de fuego la rodearon.
Al atacar un árbol, las esferas explotaron y la hoja de la espada quemo tanto el árbol, que el corte fue tan fácil y sencillo como cortar manteca.
"Por lo sagrado, el desgraciado se saco el oro"(Galván)
"Y con esta cosa que parece inútil..."(Lorenzo)
"No te sientas tan decaído, no es como si fuese a ser la única arma mágica que fuésemos a ver"(Ariel)
Cuando Ariel dio el comentario, Lorenzo abrió los ojos y se giro con sus ojos brillando.
"Oigan... ¿Y qué hacemos con el oro?"(Santiago)
Con sus ojos con forma de monedas de oro y babeando, Santiago tenía el pequeño cofre abrazado como si fuese un bebe.
"¿Qué mas vamos a hacer? Obviamente abandonarlo"(Ariel)
"PFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFF, ¡Y una mierda!"(Santiago)
"¿Y qué vas a hacer entonces? ¿Cargarlo ida y vuelta?"(Ariel)
"Puees..."(Santiago)
Abriendo el cofre, Santiago tomo las monedas de oro y comenzó a ponerlas en sus bolsillos, Ariel le miraba y estaba de cara, y de hecho, Linda y todos los otros líderes de pilar también lo estaban.
¿No eran solo unas 15 o 20 monedas de oro? ¿Por qué tanta desesperación por tomarlas?
"El cofre es mierda, no lo quiero"(Santiago)
Tirándolo como si fuese basura, Santiago mordió una de las monedas de oro y la coloco de vuelta en su bolsillo, con una sonrisa de lado a lado camino recto hacia delante.
"...Da igual, voy a hacer como que no vi eso"(Ariel)
"Y-Yo igual..."(Leónidas)
"HAHAHAHA"(Leo)
"Cerdo avaricioso"(George)
Luego de haber terminado, todos estaban listos para ir hacia el territorio salvaje pero nada más llegar, comenzaron a ver más y más problemas, entre estos, estaba la clara falta de resistencia al frio.
Las armaduras de metal se congelaban y comenzaban a dañarles, la nieve se volvía más y mas densa por lo que apenas podían caminar o correr en ella, el frio les llegaba hasta los huesos y de las 4 veces que intentaron adentrarse, en todas fallaron al encontrarse bestias de muy alto rango.
La comida se podía conseguir cazando, el agua derritiendo la nieve, los abrigos los compraron de ancianos en pueblos que estaban abandonados, y mientras se movían, todos estaban notando algo que les hizo sentirse incomodo.
Por alguna razón, en los pueblos solo había ancianos y gente enferma, no había ningún guerrero o joven.
"Algo está pasando en las Tribus, ¿Deberíamos de irnos?"(Fernando)
"Conseguimos bastantes cosas pero..."(Leo)
"Podríamos conseguir más, además, una vez que volvamos no vamos a poder repetir esto, no nos van a dejar hacerlo"(Bruno)
"..."(Fernando)
"Es cuestión de arriesgarse, podríamos dividirnos, aquellos que deseen volver entonces háganlo"(Ariel)
Claramente Ariel estaba apuntando a personas en específico, Leónidas, Luciano, Diego y Linda, todos ellos ya estaban mostrando estar muy por detrás de todos, al no haber aprendido a usar energía corporal, todos estaban tan por detrás como si les faltasen 1 o 2 rangos y técnicas básicas.
"Necesitamos cazar madrigueras de rango C- para obtener más objetos mágicos"(Darius)
"Lo que necesitamos son huevos, hay que ir directo hacia el centro del territorio salvaje"(Santiago)
Golpeando el suelo Santiago exclamo como si sus palabras tuviesen todo el sentido del mundo.
"¡¿Estás diciendo que me faltan huevos?!"(Leo)
"No te da, nunca te dio, tenes escases de huevos, ¡Pinche puto!"(Santiago)
Leo tiro su escudo y espada al suelo y comenzó a darse de golpes con Santiago, ambos ya estaban aburridos de que todos le aplicasen tanta lógica a todo por lo que estaban ansiosos de darse de golpes con algo.
Mientras estos dos estaña luchando, Galván y Lorenzo se miraron y sonriendo corrieron y embistieron a los dos para unirse a la batalla, mientras estos 4 se revolcaban en la nieve golpeándose y gritando como perros.
Linda hablo hacia Ariel con pena, Diego estaba a su lado y asentía a sus palabras sin poder levantar el rostro.
"Tengo pensado volver, no es mala idea reportar que todos están bien, además, no creo poder ser de utilidad en el territorio salvaje"(Linda)
"No tienes que preocuparte, ya es demasiado anormal e impresionante que hubiesen llegado hasta aquí, eres parte de una generación de elites sin precedentes del Reino, no sientan vergüenza"(Ariel)
Sonrojándose un poco y agradeciendo, Linda y Diego parecían estar preparándose para irse, pero justo en ese momento.
"Quiero aprender energía corporal"(Luciano)
Con una mirada decidida, a lo largo de estos meses, ya había quedado claro cuán importante era la energía corporal y la diferencia entre usarla y no hacerlo, estaba harto de estar por detrás y no alcanzar al resto.
Incluso si esto le restringía en un futuro, incluso si no fuese a ser tan libre como deseaba serlo, ese poder lo valía, era completamente lo que Santiago había dicho, ¿Y que si el rey y la Iglesia lo desaprueban? Que lo hagan, ellos son quienes terminaran siendo los débiles.
"¡Ese es el espíritu!"(Santiago)
Con Leo enganchado del cuello tratando de ahorcarle, Galván y Lorenzo tirando de cada uno de sus brazos, Santiago se levanto revoleando a los 3 y riéndose.
"Supongo, que siempre y cuando mi padre no se entere, voy a estar bien"(Leónidas)
Suspirando y viendo a Santiago, cada vez que había una lucha, el corazón de todos los Bellian se hundía, ese poder inalcanzable que él tenía, si tan solo pudieran poseerlo.
Aunque se sentían mal, Linda y Diego al final terminaron optando por irse, 4 meses habían pasado desde que habían comenzado su invasión al norte en busca de poder, todos habían alcanzado rangos y poder magníficos, incluso ahora, también parecían estar consiguiendo objetos, pero poco a poco todos estaban viendo una clara línea que era su límite actual.
"Fliis y Santiago busquen una madriguera C- o C en el territorio salvaje, una vez encuentren una, la vamos a tomar, iremos avanzando tomando madrigueras, será lento y terminaremos con heridas, pero debemos hacerlo sin volver"(Ariel)
Saltando 10 metros hacia el cielo, Santiago corrió por el aire a toda velocidad en busca de madrigueras, mientras que Fliis fue hacia el lado opuesto, en solo 10 minutos en los que Ariel explicaba a todos el plan a seguir, Santiago había vuelto.
Cayendo en el suelo como una pluma y una sonrisa, levanto sus brazos con alegría.
"3 madrigueras rango C- y 5 C, todas en la cercanía de un rio, al parecer son hombres lagarto de piel roja y piel azul, pero las de rango C son lagartos de piel blanca"(Santiago)
"Ese rio es la frontera de la Tribu Aku y la tribu Im, nos estaríamos alejando mas del Reino y con esta situación desconocida..."(Ariel)
"Son al menos 24 objetos mágicos, ¿no?"(Santiago)
"Si tenemos suerte, pues si, sino podríamos no volver a ver más objetos mágicos"(Fernando)
Habiendo coincidido todos, esperaron a que Fliss volviese y entonces, partieron hacia allí.
El viaje fue tranquilo, tanto que incluso parecía irreal, sin encontrarse con absolutamente nadie, una vez que llegaron, incluso Santiago se sentía extraño, como si algo estuviese totalmente fuera de lugar.
Su normal y tonta actitud ahora era seria, al llegar Santiago apretó sus puños y con una mirada de concentración y rostro serio, se puso en posición y activo su Quinto Cielo.
Sus brazos se rodearon de poder y color verde-celeste a la vez que el cuerpo de Ariel se agrandaba dándose forma de lobo, la energía corporal de ambos exploto de forma agresiva y violenta, levantando viento a sus alrededores.
"En cuanto una madriguera de las proximidades nos note atacaran, hay que hacer esto rápido"(Ariel)
Dándole ordenes a Leónidas, George y todos en el grupo, Ariel paso a tomar la línea delantera mientras que todos cubrían las proximidades, ¿Ellos dos solos contra una madriguera rango C-? Era totalmente lógico
"..."(Santiago)
Sin decir una sola palabra, Santiago piso el aire por encima de la nieve y aplicando el -primer pilar- de forma horizontal y agregándole energía corporal, desapareció de la vista de todos y una explosión que erizo a todos los elites se escucho en el mismo segundo.
Una madriguera de Trolls de Hielo, era resistentes al hielo y los ataques físicos, pero el fuego era su debilidad, rodeándoles a todos con 3 muros de fuego, los magos dejaron solo una zona de escape, y esa era donde estaba Ariel parado.
10 Trolls de Hielo, y uno ya medio muerto, Santiago tenia la mitad de su brazo enterrado en el pecho de uno alejado y solitario, este como si no sintiese dolor le sujeto con sus dos enormes manos y apretó el torso completo de Santiago.
Pero este creo púas de energía corporal y magia de viento, pero en vez de dejar de apretar, el troll sujeto con aun más fuerza y arranco a Santiago de su pecho, lo tomo y arrojo al suelo.
Quedando asombrado, Santiago apenas pudo reaccionar y evito chocar contra el suelo girando en el aire y usando su –Primer Pilar- para tomar distancia.
Una vez alejado, puso ver como las manos del Troll que estaban llenas de su propia sangre, estaban curándose a una velocidad extrema y alarmante.
"¡¿Qué Mierda?!"(Santiago)
El agujero que había hecho en el pecho de la bestia también estaba sanando de forma aterradora, hace solo unos segundos casi perdía el corazón y en 3 minutos estaría intacto, ¿Cuánta vitalidad poseía esa bestia?
"Los golpes parecen poco eficaces, hay que matarles al instante"(Ariel)
Sacando sus garras y recibiendo un refuerzo mágico en ellas por parte de Darius y George, estas se rodearon de fuego, 5 Trolls fueron contra Ariel pero con solo un zarpazo horizontal hizo que retrocedieran.
Atemorizados por el fuego los Trolls tomaron distancia y en cambio prefirieron atacar a Santiago, este dejo sus puños y uso sus palmas, rodeándolas de filo hecho de energía corporal y viento, estas estaban de un color verde intenso.
Ariel que solo tenía dos oponentes aprovecho y salto sobre uno de los Troll mordiéndole el cuello de sorpresa en medio de la intenso intercambio de ataques, al tirarlo clavo sus garras en el pecho apuntando al corazón y comenzó a escarbar tirando sangre, costillas y órganos hacia todos lados mientras era golpeado por el segundo Troll.
Mientras que Ariel estaba rematando a uno, Santiago estaba distrayendo a los demás, rodeado por 9 enemigos, Santiago utilizo su –Torbellino de desplazamiento- para poder evitar los ataques de los que acaban de llegar a él con un salto.
Al instante luego, giro sobre sí mismo con su cabeza apoyada en el aire y se impulso hacia arriba la vez que usaba –Primer Pilar- para aplastar a los Trolls contra el suelo, habiendo tomado distancia Santiago estaba a punto bajar apara atacar a los Trolls y así evitar que se centraran en Ariel.
Pero antes de darse cuenta, ya había recibido un golpe en su estomago, uno de los Troll había tomado y arrojado una roca, impactando con una fuerza absurda en Santiago, doblándose y retorciéndose.
Santiago nunca cerró sus ojos, viendo hacia abajo y notando como todos los Troll estaba saltando hacia él.
"Idiotas"(Santiago)
Escupiendo sangre, Santiago sonrió y uso su –Primer Pilar- a toda potencia e hizo que todos los 9 Trolls subiesen 15 metros más de alto, tan solo 25 metros no los mataría ni haría daño, ellos median casi 4 o 4 metros y medio.
Sus piernas les dolerían pero sanarían casi al instante, por ello, Santiago subió corriendo y crenado cadenas de energía corporal comenzó a girar como cuando lucho con Leónidas y las cadenas le siguieron, los 9 Trolls comenzaron a girar alrededor de Santiago de forma lenta y luego de unos 5 segundos ya estaban girando a toda velocidad.
"¡VAMOOOOOOOOOOS!"(Santiago)
Volviéndolos a tirar Santiago los re impulso usando de nuevo el –Primer Pilar- a la vez que se elevo a sí mismo, todas las cadenas se retorcieron en el aire y terminaron rodeando y apretando a un solo troll, sin poder mover ni brazos ni piernas, el troll solo pudo ver como Santiago voló hasta él y se trepo en su espalda.
La densa nieve ayudaría en la caída, amortiguando parte del daño, pero, Santiago que ahora estaba a 40 metros del suelo, movió al troll poniendo su cabeza hacia el suelo, y sujetándole de la espalda comenzó a girar como un trompo.
Ariel que había matado a uno de los Troll y tenia al otro ya en el suelo moribundo cambio su mirada hacia Santiago y quedo asombrado, de hecho, todos lo estaban, lo que Santiago estaba por hacerle a ese troll era brutal.
Cayendo a toda velocidad, Santiago se separo del troll a último segundo y cuando el troll choco contra el suelo exploto, su sangre se esparció como una lluvia pero incluso con la mitad de su cuerpo reventado sus piernas se movían.
"¡¡ME CAGO EN-!!"(Santiago)
Desde lejos Santiago hizo cara de asco mientras era bañado en la sangre del troll, y al caer los otros, se lleno aun mas de sangre y comenzó a escupir y quitarse la sangre de los ojos.
En cambio Ariel no dudo en correr hacia el troll que había perdido la mitad de su torso y rematarlo atravesando su corazón casi expuesto.
Mientras tanto, los restantes 8 troll estaban observando impotentes, todos ellos sin sus piernas pero regenerándose rápidamente, al darse cuenta de que solo había podido ganar algo de tiempo, Santiago dejo de tontear y quitarse sangre de encima y corrió para separar a los troll.
Encadenándoles con energía corporal y haciéndoles girar para reventarles luego contra el suelo, Santiago logro separar a una buena cantidad de ellos para facilitar la tarea de rematarles.
Ariel hacia volar viseras, costillas, pulmones y corazones hacia todas partes pero aun así, si velocidad era insuficiente para matar a todos y de hecho, de los 8 paralizados, 4 estaban parados y sin heridas.
"AGOOOOOOOOOOOOOOOOOOO GHOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO"
Gritando a todo pulmón, los 4 a la vez parecían estar suplicando por ayuda a las madrigueras cercanas, pero no solo eso, sino que Fernando, Darius, George y Nacho cayeron al suelo sujetando su cabeza.
"¡Una habilidad de pánico!"(Leo)
"-Tercer Pilar-"(Santiago)
Extendiendo su mano y cerrándola, los troll quedaron en silencio y sujetando sus gargantas, un pequeño pilare de 8 metros de diámetro y 6 de alto quito por completo el aire de los troll, privándoles de poder gritar.
Al evitar que siguiesen gritando, Los afectados por el pánico pudieron recuperarse antes de tiempo y prepararse para los enemigos que vendrían.
Además, los 4 troll quedaron totalmente expuestos, sin aire, corrieron desesperados hacia fuera del pilar, pero Ariel los intercepto empujándoles dentro de vuelta y Santiago uso su –Primer Pilar- al máximo poder para aplastarles contra el suelo.
Desde el exterior, Santiago se encargo de controlar el pilar de tal forma que Ariel no fuese afectado pero todos los trolls si lo fuesen y entonces, en tan solo 20 minutos, Santiago y Ariel habían exterminado la madriguera.
Santiago salió ileso pero agotado y Ariel tenía heridas leves y mediasen su espalda y hombros, habiendo logrado exterminar la madriguera tan rápido, los refuerzos podrían ser evitados por lo que el grupo se retiro temporalmente luego de tomar los objetos mágicos.
"¡¿ESO ES UN GUANTE?! ¡¡ESE ES MI GUANTE!!"(Santiago)
"¡¿Cómo que tu guante cerdo avaricioso?!"(Ariel)
Peleándose entre los dos y tirando uno de cada lado del guante mágico ambos parecían furiosos y emocionados por tenerlo para ellos.
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