บท 48: Capítulo 45 - Los niños son el futuro (3)
Nota del autor: Una disculpa queridos lectores, pero desafortunadamente como a muchos me llego la enfermedad, y apenas me estoy recuperando...
Aun asi aqui viene el capitulo retrasado y tratare de volver a agarrar el ritmo mientras me recupero.
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¡Crash!
Se escuchó el impacto de los platos al golpear el suelo, esto causó que los párpados de Ino temblaran levemente y en solo unos segundos su conciencia volvió.
Cuando la pequeña se incorporó, se dio cuenta de que se encontraba durmiendo actualmente en recámara de Lina, esto implicaba que el plan de Samantha había funcionado y por ende fueron capaces de encontrar a los culpables, aunque era difícil creer que todo el tiempo fueron los vecinos.
Ino se levantó y camino lentamente hacia la puerta de la habitación, al otro lado pudo escuchar las voces de los padres de Lina y Samantha discutiendo en voz baja, el llanto de la madre de Lina fue evidente incluso hasta su posición, probablemente el ruido escuchado fue causado por ella accidentalmente.
"Has despertado... Ven, todavía tengo trabajo que hacer, pero te llevaré a casa primero." - Al salir de la habitación, Samantha llamo a la joven y después de dar un asentimiento al padre con la cabeza, tomo a Ino y ambas salieron por la puerta principal de la casa, fue entonces que para sorpresa de Ino, esta noto que hubo un enorme alboroto en la calle, para ser más precisos los guardias de la ciudad acordonaron el otro lado de la casa mientras se movían frenéticamente de un lado a otro.
Muchos vecinos se amontonaron en las inmediaciones mientras murmuraban entre ellos con horror sobre lo sucedido en aquel lugar.
"¡Increíble!, no puedo creer que un asesino pueda ser tan cruel para incluso matar a un niño, dicen que lo degolló..." - Una mujer de mediana edad estaba hablando en un pequeño grupo con otras vecinas, las cuales palidecieron ligeramente al escuchar sus palabras.
"No, mi primo trabaja en la guardia, él me dijo que el niño murió desangrado, significa que el asesino no lo mato y en cambio lo dejo sufrir hasta su muerte... además parece que el padre también fue asesinado, pero no han querido darnos ningún detalle al respecto." - Otra mujer interrumpió y bajando la voz dio sus conjeturas, al escuchar esto Ino tembló ligeramente antes de dirigir su mirada a Samantha quien ocultaba su expresión bajo su túnica.
Ella no pregunto nada y ambas caminaron lentamente hasta que salieron del distrito, fue entonces que la niña decidió preguntar aquello que no dejaba de rondar su mente.
"Lina no estaba ahí ¿verdad?, ¿qué es lo que harás?" - La pregunta tomo por sorpresa a Samantha, ya que ella esperaba que le preguntaran sobre la muerte del niño, fue entonces que Samantha observo fijamente los hermosos ojos de la niña, y aquellas preocupaciones escondidas en su mente se disiparon.
"Sé donde se encuentra, pero me temo que será difícil rescatarla..." - El traficante confeso que Lina estaba en la posesión de un Noble, y entrar a su residencia para salvarla era el menor de los problemas, por lo que Samantha aprendió desde que llego a este mundo, lo cierto es que la magia era algo realmente versátil y sin saber si Lina tenía alguna marca, era difícil rescatarla sin que la rastrearan, por otro lado estaba la opción de matar al Noble, pero entonces Samantha sería la marcada y tampoco era una gran opción. - "Ino, ¿sabes si hay alguna forma de obtener orbes?"
La pregunta de Samantha tomo por sorpresa a la Joven, quien rápidamente pidió una explicación más detallada, después de todo los Orbes era un objeto común, pero dependiendo el tipo de Orbe, podría volverse difícil o imposible encontrarlos.
"Quiero los orbes que graban imágenes, esos que permiten obtener imágenes de su alrededor y luego proyectarlas en otro momento." - Samantha detallo sobre los orbes que llego a ver en algunas ocasiones en el templo, aunque lo cierto es que aunque creyó que eran interesantes, nunca pensó que terminaría deseando tenerlos.
"Mmm, sé de cuáles hablas, normalmente se llama [guardián de momentos]... Creo que los venden en la Academia, aunque no tienen la misma calidad que los del Templo." - Ino le explico con calma a Samantha sobre los detalles de esos orbes, incluyendo su costoso precio...
"Sigh... Bueno ya esperaba que esto resultara asi, aun asi no se me ocurre una mejor idea, esto es lo que haremos..." - Samantha comenzó a explicar detalladamente su plan.
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La oscuridad cubrió toda la ciudad, el movimiento en las calles fue desapareciendo poco a poco mientras el único movimiento termino siendo el de aquellas personas sin hogar, o naturalmente los guardias que realizaban sus rondas en la noche.
Aparte de ellos y de los movimientos realizados en calles con burdeles, solamente los bares tenían actividades a tales horas de la noche e incluso esos comenzaban a detenerse pasado cierto momento.
Fue en estos momentos que, en el distrito este, en una mansión ubicada cerca del cuartel militar, una figura parpadeo por un momento en las sombras, nadie pudo percibir sus movimientos mientras penetraba las defensas en la mansión y pasaba los guardias de la misma, en poco tiempo la figura quien obviamente era Samantha, ingreso dentro del edificio y usando las sombras se escurrió por los pasillos del edificio hasta llegar directamente al sótano del lugar.
Ciertamente el lugar parecía más algo destinado a un calabozo que un simple sótano, aunque ciertamente no era el momento de clasificar el lugar, Samantha abrió lentamente la pesada puerta de madera con refuerzos metálicos que estaba al fondo de las escaleras (que bajaban al sótano) e ingreso.
Esto la llevo a estar en lo que solo se pudo describir como un escenario surrealista, absurdo en el contexto.
La habitación con una puerta de madera antigua, en realidad estaba rodeada de paredes blancas lisas como si se tratara de paredes metálicas, y en uno de los extremos incluso se vieron un par de cilindros gigantes de cristal, dentro de ellos en un extraño líquido verde flotaban un par de cuerpos desnudos en posición fetal.
Simplemente no hubo manera sencilla de explicar cómo pudo aparecer un laboratorio de ciencia ficción dentro del sótano de una mansión medieval, Samantha se quedó paralizada cuando encontró esta escena que simplemente no coincidía con su entorno.
"¿Quién eres?" - El profundo sonido de la voz, saco a la joven de su aturdimiento, fue entonces que se percató del hombre mayor que hablaba desde un escritorio al otro lado de la sala, este sujeto tenía el cabello canoso, no obstante, en realidad su apariencia no aparentaba más de 30 años.
Al no recibir respuesta el hombre volteo a la entrada de la habitación y para su sorpresa, aparte de la puerta ligeramente abierta, en realidad no fue capaz de captar la figura de nadie más, esto provoco que frunciera el ceño profundamente por un momento.
"Es imposible que no sea nadie, seguramente ya se han dado cuenta de mí... no me queda mucho tiempo." - El hombre murmuro en voz baja antes de regresar a su trabajo, naturalmente no se percató de la delgada presencia oculta en una esquina de la habitación.
Mientras el hombre continuaba con su trabajo, en la mano de Samantha brillo un Orbe de color azul, este se activó con energía (Mp) y comenzó a registrar todo dentro de la habitación al igual que una cámara de video, al mismo tiempo Samantha no se olvidó de revisar con cuidado cada lugar buscando cualquier pista que pudiera conducir a Lina.
Así fue hasta que llego a una pequeña puerta de barrotes que conducía a una pequeña cámara anexa, en esta Samantha se topó con un grupo de niñas, todas con alrededor de 10 a 14 años, la mayoría de estas niñas estaban desnudas, aunque afortunadamente no mostraban signos de maltrato, a lo mucho mostraron un poco de desnutrición.
"Te encontré..." - Murmuro la joven cuando vio a una pequeña niña en el fondo de la habitación, como las demás tenía la cabeza gacha y estaba un poco delgada, pero aparte de eso no parecía tener ningún problema.
Un punto extraño a tener en cuenta fue el hecho de que todas las niñas mostraban expresiones muertas (metafóricamente), como si hubieran visto algo que las hiciera perder toda la esperanza, esto sin duda dejaría marcas en su psique incluso después de que todo esto terminara.
Samantha se aseguró de grabar detenidamente al grupo de niñas durante unos momentos antes de continuar su avance explorando aquel extraño lugar, curiosamente el hombre de vez en cuando levantaba la mirada y escaneaba su alrededor, pero después de no encontrar nada, volvía a centrarse en su trabajo.
"Esto es..." - Samantha dejo escapar un pequeño grito cuando llego a otra cámara anexa, esta extrañamente tenía una puerta de metal totalmente cubierta de hielo, no obstante, en la parte central había una pequeña ventana de cristal que permitía observar el interior, esto fue lo que permitió a Samantha observar con horro el interior de ese lugar.
Dentro de la habitación-congelador, había una gran cantidad de cadáveres descuartizados y separados ordenadamente, brazos apilados en un costado, torsos al centro, piernas en el lado opuesto, incluso las cabezas estaban ordenadas en una estantería, todas colocadas en fila.
Estos eran cadáveres de mujeres en general, y por las facciones se pudo determinar que la edad probablemente no sobrepasaba los 25 o 30 años, lo que implicaba que por lo menos cerca de una docena de mujeres jóvenes fueron asesinadas en este lugar.
La ira recorrió la mirada de Samantha, no obstante, se contuvo cuando decidió seguir observando el lugar hasta que finalmente llego frente a los dos contenedores de cristal, en estos flotaban dos cuerpos desnudos de mujeres, una sin duda joven de alrededor de 25 años y la otra por el contrario era la de una niña, con cerca de 12 años.
El cuerpo de la mujer estaba en buen estado y Samantha fue capaz de notar que los parpados de la misma temblaban, como si esta estuviera cerca de recuperar su conciencia, la niña por otro lado estaba totalmente pálida sin mostrar señales de vida.
Samantha se aseguró de grabar las imágenes de ambos cristales, aunque por algún motivo decidió no dejar que los rostros o facciones de ambas aparecieran, poco tiempo después de obtener todas las imágenes necesarias en el orbe, decidió guardar el orbe y revelar su figura de las sombras.
"Supongo que tendrás una razón para hacer esto ¿no?" - Cuestiono Samantha mientras volvía a fijar su mirada en ambos cilindros.
"¡Tu...!" - Una exclamación salió del hombre cuando vio que desde las sombras aparecía la figura de una mujer usando una gabardina oscura y ocultando su rostro bajo una capucha, un momento después el hombre sonrió con ironía cuando se dio cuenta de que el intruso habia estado durante mucho tiempo en aquella habitación. - "No has venido a asesinarme, o ya lo habrías hecho... o planeas hacerlo después de saciar tu curiosidad... Sigh."
El hombre comenzó a hablar consigo mismo mientras se levantaba de su asiento y se acercaba a Samantha, al ver que la joven no volteo a verlo, pensó en atacarla por la espalda por un segundo, pero después de pensarlo un momento al final solo pudo renunciar cuando se dio cuenta de sus escasas posibilidades de victoria.
"Responderé tus preguntas, pero, antes que nada, me dirás ¿quién te envió?" - A la pregunta del hombre, Samantha simplemente permaneció en silencio, esto provoco que el hombre soltara un suspiro antes de comenzar a relatar su historia.
"En fin, la verdad es que..." - Así comenzó su historia...
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El hombre conocido como actualmente como el August Delmar, es un barón reconocido por la corona y con una excelente residencia dentro de la ciudad de Arcadia, no obstante, en el pasado su trasfondo fue algo aún más impresionante.
Anteriormente en el reino hubo un hombre ampliamente conocido por ser uno de los mayores poderes de toda la región, no solo tenía un amplio territorio rico en recursos, sino que también tuvo a su disposición un ejército personal con el poder suficiente para hacerle frente incluso al Rey, no obstante, el hombre era leal a la corona y poco ambicioso, debido a ello no hizo muchos enemigos lo que le permitió vivir relativamente en paz, este hombre en aquel momento era el Conde Delmar.
Así fue hasta que un día termino enemistándose con el Caballero Tristán, este caballero extranjero con gran fuerza y valor declaro que la hija del Conde era muy talentosa a su joven edad, y solicito al Conde que se la entregara como una escudera para el Caballero.
El conde naturalmente rechazo la oferta, luego de lo cual le pidió al caballero que se retirara de sus tierras, esto fue toda una noticia en el reino, ya que el caballero rechazado era ampliamente conocido por no aceptar rechazos con facilidad.
El Conde nervioso decidió enviar a su familia al centro de su territorio donde estarían protegidas por su ejército, no obstante, a mitad de camino terminaron siendo atacados por un grupo de bandidos y ambas mujeres murieron.
Ese día el Conde le rezo a la diosa Athena por su familia, las cuales murieron (para colmo) en uno de los descansos al pie de un monumento del dios Hermes, no obstante, nadie le respondió, aun así, el conde uso a su ejército para cazar y castigar a los culpables de tal crimen, esto lo llevo a eliminar grupos de bandidos por toda la región sin encontrar con éxito a los culpables.
Un día, sin embargo, el conde fue capaz de obtener una pista sobre un grupo de mercenarios y aventureros contratados por cierto caballero, los cuales obtuvieron una pequeña fortuna después de realizar cierta misión.
El conde los persiguió y atrapo, solo para terminar descubriendo aquello que ya sabía.
Resulto que el Caballero Tristán fue quien patrocino a este grupo variopinto y los dirigió personalmente en el ataque a la familia del conde, todo como repercusión por rechazar su buena voluntad, lo peor del asunto es que después del hecho, el Caballero volvió a su país de origen, e incluso si el conde deseaba perseguirlo, no tenía forma.
Al final, el hombre termino hundiéndose profundamente en un abismo de culpa y remordimiento, hasta que un día mientras salía de un bar borracho, se dio cuenta del pequeño templo en la ciudad, el mismo utilizado por las personas del distrito oeste que no eran capaces de pagar los elevados costos del Templo principal de Athena.
Cuando el hombre observaba este pequeño lugar (en comparación) fue que tuvo una iluminación repentina.
Con esto en mente comenzó su plan de crear nada más y nada menos que un Homúnculo, todo con el propósito de traer a la vida a su difunta familia, para esto el hombre vendió su título Noble, así como la mayoría de sus posesiones y tierras, dejando solo la mansión en el distrito oeste donde actualmente residía.
Aparte de esto consiguió en el mercado negro una gran cantidad de libros sobre rituales y magia prohibida, llegando incluso a obtener los planes detallados de las maquinas (los cilindros) que fueron diseñados por [Perdidos], todo con el fin de que su plan tuviera éxito.
Después de ello comenzó a comprar esclavos...
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"Entiendo lo que planeabas... Un Homúnculo es un humano artificial creado por medio de alquimia y supongo que magia, pero... ¿es posible?" - La pregunta de Samantha fue natural, aunque por lo que ha aprendido, es posible crear un cuerpo humano, eso no tenía nada que ver con revivir a un muerto.
"Sigh... así que también lo entendiste... así es, yo cree con éxito un Homúnculo, probablemente sea incluso más perfecto de lo que jamás soñé, pero cuando despertó... No tenía idea de quien era yo." - El hombre se lamentó en voz baja mientras observaba atentamente el cuerpo de la mujer en el cilindro.
"Pensé que quizás si lo hacía con la niña... Ella me recordaría, pero me temo que todo ha sido una ilusión, en realidad es posible crear un cuerpo, quizás incluso revivir uno... pero no es posible traer a alguien de regreso, por lo menos no sin su alma." - Las palabras del hombre estaban llenas de pesar, no obstante Samantha no se compadeció de él, después de todo para crear el homúnculo fue simple deducir de donde salió el material.
"Realmente fue difícil, quizás siento incluso un poco de alivio de que todo haya acabado..." - El hombre se quedó por un momento en silencio antes de volver a hablar. - "¿Sabes cómo fue que me di cuenta?"
El hombre hizo una pregunta retórica refiriéndose a su iluminación cerca de aquel cementerio.
"Es porque en realidad no hay ningún Templo que cobre su cementerio... Al menos no existe ninguno en nuestro [panteón]..." - Cuando esas palabras llegaron a los oídos de Samantha, ella sintió como un martillo golpeo su cabeza, en ese mismo momento sus ojos se activaron automáticamente provocando un inmenso dolor en su cabeza.
Este se extendió rápidamente por todo su cuerpo impidiéndole moverse, era como si alguien hubiera colocado pesas sobre sus hombros y trataran de doblegarla, Samantha resistió con todo lo que tenía mientras apretaba los dientes, pronto un pequeño rastro de sangre escurrió por sus labios.
No obstante, la voluntad de Samantha apenas le permitía mantenerse en pie, y a este paso su cuerpo se rompería antes de que consiguiera liberarse de aquella restricción, fue justo en ese momento que recordó las conferencias en la Academia, así como lo que aprendió de Ino.
Entonces como un último esfuerzo comenzó a circular la energía (Mp) por su cuerpo, esto le costó, pero rápidamente se dio cuenta de que daba resultado, pues la presión sobre su cuerpo se redujo ligeramente, así entro un duro proceso en el cual Samantha canalizaba la energía una y otra vez intentando resistir aquella presión.
El hombre a su lado termino de hablar y sin darse cuenta de las acciones extrañas de Samantha, este se dirigió nuevamente a su escritorio, en sus palabras iba a tratar de terminar su trabajo antes de que Samantha decidiera acabar con él.
Solo fue hasta cerca de 10 minutos después que una notificación apareció frente a los ojos de Samantha.
[Habilidad Pasiva adquirida - Cuerpo de Hiena (Alto)]
[Título Adquirido - Rompe Cadenas]
La presión desapareció se redujo lentamente hasta que desapareció totalmente, por otro lado, Samantha sintió que su cuerpo se volvía completamente ligero y lleno de fuerza, como si realmente se hubiera liberado de todo aquello que la detenía.
Por otro lado, sintió como el flujo de la energía en la atmosfera era absorbido por su cuerpo a un ritmo constante reponiendo el que ella habia usado a un mayor ritmo.
"Aaa..." - Samantha exhalo un poco de aire turbo y limpio la sangre en sus labios, por otro lado, su mente se aclaró completamente cuando se percató de aquello que el Barón estuvo insinuando.
"Sigh... Así que esta ciudad está totalmente perdida..." - Después de terminar sus palabras, Samantha se dirigió a la salida de la habitación, pero antes de salir le dirigió algunas palabras al hombre que se encontraba trabajando en su escritorio. - "Mañana al mediodía, ese es todo el tiempo que puedo darte, y debes entender que no puedes escapar."
El hombre levanto la vista de su trabajo solo para descubrir que la joven habia desaparecido, la puerta por su parte estaba entreabierta dando evidencia de que aquel encuentro realmente paso, el barón por su parte lanzo un vistazo al cilindro con la mujer con una mirada complicada antes de soltar un suspiro resignado, luego volvió a centrarse en su trabajo.
Por otro lado, Samantha abandono la mansión, y poco después el distrito, volviendo nuevamente a el distrito oeste, donde esta vez se dirigió directamente al gremio de mercenarios en vez de ir a casa.
En el cielo la oscuridad comenzaba a ser reemplazada lentamente por la luz del sol, señalando el inicio de un nuevo día, fue precisamente por eso que Samantha opto por no volver a casa y en cambio se dirigió al gremio de mercenarios.
Las puertas del edificio se mantenían abiertas las 24 horas, por lo que no fue difícil para Samantha ingresar, lo complicado fue que solicitar reunirse con el maestro del gremio no era tan simple, más aún si eran alrededor de las 5 am...
Aun así, el hombre gruñón acepto la reunión una vez que se enteró de que era de Samantha....
"Sigh... espero que tengas una buena razón para hacer que me levantara a esta hora..." - Samantha solo sonrió en respuesta, después de todo esta era la última fase de su plan....
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PD del autor: Estoy planeando iniciar un nuevo proyecto para este semestre... Por recomendación y eliminación de parte de unos compañeros hay dos opciones...
1- Cyberpunk
2- Apocalipsis
¿Cual creen que debería hacer (será semanal)?
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