-Una hora después-
Los capitanes están reunidos.
—Su espada absorbió el fuego... No, su espada absorbió la magia de Lena. Ese chico es muy fuerte. ¿Por qué Lady Khalifa nos ordenó no escogerlo?
—Yo también me pregunto lo mismo, me vendría bien un chico como él.
—Literalmente un animal hecho de fuego cayó sobre él y salió ileso.
—Durante la pelea lo golpearon muchas veces, pero no tenía ninguna herida.
—¿Tú qué opinas, Disas?
—No sé que decir... Sentí algo maligno en ese chico.
Fina se acerca a él.
—Yo también lo sentí... ¿Debemos hacer algo?
—No... Aún no.
-En un bosque cerca de la capital-
Golpeo un árbol con mis puños.
—¡¡Inútil, inútil, inútil, tanto esfuerzo para nada!!
Sigo golpeando el árbol.
—¡¡Odio no tener magia, lo odio, lo odio!!
Dejo de golpear el árbol y tengo los puños llenos de mi propia sangre.
—¡¡Les demostraré que soy muy fuerte!!
-Una hora después-
Llego al gremio y me dirijo a la encargada.
—¡¡Quiero que me dé la misión más difícil que tenga disponible!!
—¿La más difícil?
—¡¡Sí, la más difícil!!
—Con difícil te refieres a una misión peligrosa, ¿Verdad?
—¡¡Sí!!
—Bueno... Tenemos una, pero es algo... Bueno, en pocas palabras, si la haces te ganarías enemigos muy peligrosos.
—¿Por qué?
Se acerca a mí y me susurra.
—La misión consiste en matar a un noble que usa su estatus social para aprovecharse de la gente. Ahora mismo tiene al pueblo Osiris en su control, no deja salir a nadie del pueblo. Esta es una misión secreta y muy peligrosa. Si otros nobles se enteran que fuiste tú quién lo mató, podrían... Bueno, supongo que ya sabes a lo que me refiero. ¿La aceptas?
—Sí, la acepto- Digo sin dudar.
—Dame tú tarjeta.
Se la entrego y apunta un número.
—Buena suerte.
Me entrega la tarjeta y la guardo.
—¿En dónde queda el pueblo Osiris?
—Espera.
La encargada busca algo en los cajones de su escritorio y saca un mapa.
—Está algo lejos.
Me entrega el mapa.
—Supongo que necesitaré un caballo.
—Te presto mi caballo, está en el establo que está atrás del gremio.
—Bueno... ¿Por qué me ayudas tanto?
—E-es lo menos que puedo hacer por un amigo de Lady Khalifa.
—Ya veo... Muchas gracias.
Salgo del gremio.
—Bueno... Aquí vamos.
-Minutos después-
Khalifa entra al gremio y se dirige a la encargada.
—¿Aceptó?
La encargada se arrodilla.
—S-sí, Lady Khalifa.
—Vaya, muchas gracias. Hiciste un buen trabajo.
-Tres días después-
Veo el pueblo Osiris desde muy lejos. Está rodeado por un campo de fuerza color verde.
—Bien... Debo actuar sigilosamente... O tal vez...
Bajo del caballo y lo dejo amarrado en un árbol.
—No tener magia puede ser ventajoso.
Me acerco al pueblo.
—He leído sobre ese campo de fuerza. El noble debe tener un poder mágico increíble.
Me acerco demasiado al pueblo.
—Nadie puede entrar ni salir... Nadie que tenga magia puede entrar ni salir. Y como yo no tengo magia...
Atravieso el campo de fuerza y entro al pueblo
—Yo sí puedo entrar.
Veo a las personas a mí alrededor, están actuando normal, no parecen preocupados.
—¿En dónde estará?
Escucho una campana y las personas se dirigen al origen del sonido
—¡¡Es hora de trabajar, excaven!!
Sigo a las personas y veo que en el pueblo hay un enorme agujero.
—¡¡Trabajen!!
Veo al tipo que grita. Es un señor muy gordo y calvo que usa un traje verde.
—Supongo que es él.
El noble está acompañado de dos aventureras que son gemelas. Tienen el cabello blanco y corto, usan una falda corta roja y una blusa rosa.
—Me encargo de las chicas y luego mato al noble... ¿Por qué estarán excavando?... Bueno, no importa.