—Sard… —Lucien confirmó la deducción de Rhine gracias a la reacción de su magia.
A pesar de que el antiguo Gran Cardenal de la parroquia de Orvarit y ambicioso conspirador había perdido su cuerpo bajo la Llegada de Dios y solo le quedaba un fragmento misterioso, aún tenía muchos secretos. Por ejemplo, por qué podía usar Llegada de Dios, la cual obtuvo del Reino de las Puertas, por qué huiría del monstruo, cómo cooperó con el Rey Ángel y qué era exactamente ese fragmento.
Rhine sonrió
—Vine al Reino de las Puertas para rastrearle pero le perdí la pista tras encontrar al monstruo. Sin embargo, ahora que había renunciado a él y me había dedicado a los misterios del monstruo, su rastro ha aparecido de nuevo de forma inesperada. Que traicionero es el destino.