"No importa como lo vea, es un poco arriesgado que una princesa entre a una zona desconocida" - dijo Kurama mientras servía un poco de té a su invitada, ignorando el hecho de que todas las chicas estaban "espiándolos", por no decir que estaban todas amontonadas en la puerta de la sala de estar.
"¿Eso es normal?" - preguntó Meroune mientras miraba a las chicas que ni siquiera estaban haciendo un esfuerzo por esconderse, aunque tampoco es como si fuera posible, no con el tamaño descomunal de las [Minotauros], y Tio-chan.
"Más normal de lo que piensas" - respondió Kurama mientras se encogía de hombros.
"Bueno, respondiendo a tu pregunta, he venido porque en nuestro reino todo es monótono" - respondió Meroune mientras negaba con la cabeza - "Nosotras, las [Sirenas], añoramos conocer el mundo y a nuestra media naranja"
"Y también ver como ese amor se va con otra" - respondió Kurama mientras notaba como Meroune abría los ojos con sorpresa - "He investigado algunas cosas, interesante fetiche que tiene tu raza con el cuento de [La Sirenita]"
"Por favor no se burle de nosotras" - respondió Meroune con vergüenza porque nunca pensó que la descubrirían tan rápido.
"¡Espera! ¡¿A caso estás diciéndome que ella tiene un fetiche con el NTR?!" - exclamó Miia con incredulidad, después de todo, ella nunca pensó que a alguien le gustaría ver a su amor irse con otra.
"Y para los que no sepan, NTR se refiere a Netorare, en otras palabras, que tu pareja te engañe, no confundir con Netori que es todo lo contrario" - pensó Kurama mientras asentía con calma.
"Siento que estás pensando algunas cosas raras, pero dejemos eso a un lado" - dijo Saane mientras miraba detenidamente a la [Sirena] - "Mira, yo puedo ser una pervertida, una perra molesta, bisexual, pero hasta yo tengo mis límites"
"¿No querías probar tener sexo con un shota unos años atrás?" - preguntó Mil mientras le daba una mirada en blanco.
"Sí, pero no lo logré porque nunca encontré a un HOMBRE con esas características" - bufó Saane mientras le giraba los ojos.
"Que sea mayor de edad, no cambia el hecho de que quisieras cogerte a alguien con apariencia infantil" - dijo Mil con neutralidad.
"Creo que nos estamos desviando del tema" - dijo Miia mientras veía como las dos mujeres bufaban y desviaban la mirada - "¿Por qué se hacen esto?"
"¿Qué?" - preguntó Meroune confundida.
"Herirse para sentirse como un personaje de fantasía" - respondió Miia con preocupación - "¿A caso no es hermoso el sentirse amada, el estar al lado de tu persona especial?"
Meroune se quedó muda ante estas preguntas porque sinceramente no sabía como responderlas. Ella nunca antes se había enamorado, pero de alguna forma podía deducir como sería su futuro con solo ver a su madre.
La reina Lorelei era hermosa, eso era imposible de refutar, pero Meroune sabía que ella era muy diferente a cómo se mostraba ante los demás.
Meroune rápidamente sacudió la cabeza porque sabía que estaba divagando demasiado, así que nuevamente miró a Miia con una extraña expresión en su rostro - "¿A caso estás diciendo que deje toda mi cultura atrás y busque la felicidad?"
"¿No es ese el objetivo de toda mujer, el encontrar la felicidad?" - preguntó Miia mientras ladeaba la cabeza y saltaba contra Kurama - "Después de todo, el amor es una guerra sin cuartel, una donde nosotras podemos ser derrotadas si no damos todo lo de nosotras"
"Ella tiene un punto" - dijo Saane mientras se encogía de hombros, solo para lamerse los labios - "Si no hacen todo lo posible, personas como yo, terminan llevándose a los hombres, aunque esto no es bueno porque nos ven como simple liberación de lujuria"
Las mujeres miraron a Saane, quien estaba mostrando una expresión conflictiva.
Kurama les dio una mirada antes de retirarse en silencio.
Cuando las chicas notaron esto, fruncieron el ceño porque esto era algo recurrente.
Ellas sabían que a Kurama no le gustaba meterse en conversaciones femeninas por algún motivo desconocido para ellas, pero no era como si él tuviera que hacer algo en estos momentos.
"Lamento haber hecho que se fuera" - dijo Meroune con vergüenza.
"Tranquila, esto pasa más veces de lo que piensas" - respondió Urt con una pequeña sonrisa - "Él siempre desaparece cuando nosotras hablamos cosas de mujeres"
* * * * *
Luego de separarse de las chicas, Kurama estaba sentado en un rincón alejado de la granja, un pequeño prado abierto lleno de flores.
"¿Qué haces aquí, Kurama-san?" - preguntó Kii con sorpresa, después de todo, ella pensaba que el albino estaría junto a las demás.
"Eso podría estar preguntándotelo yo a ti" - respondió Kurama mientras levantaba una ceja - "Este es el lugar al que vengo para despejar la mente"
"Eso explica por qué el aura es tan relajante en este lugar, y por qué las flores estaban tan felices" - murmuró Kii mientras miraba como el viento movía a las alegres flores.
Las plantas eran seres simples, ellas solo experimentaban las emociones básicas, felicidad, tristeza y odio, así como dolor.
"En fin, eso no explica por qué no estás con las demás" - dijo Kii mientras se cruzaba de brazos, y en el proceso, resaltando su prominente delantera que poco a poco crecía gracias a la enorme vitalidad de la tierra del lugar.
"Digamos que no soy bueno con las conversaciones entre mujeres" - respondió Kurama mientras negaba con la cabeza.
¿Él las encontraba aburridas?
Por supuesto, pero eso no era el problema real de la situación, sino que él ganó un pequeño trauma mental durante unas de las conversaciones de Kushina y las demás.
"No comprendo" - murmuró Kii mientras negaba con la cabeza - "Como sea, no es como si fuera problema mío, no cuando ni siquiera sé como hablar con otras personas"
"Lo estás haciendo bien conmigo" - respondió Kurama mientras levantaba una ceja.
"Es porque tu aura es prácticamente una con la naturaleza, así que lejos de hablarte como si fueras una persona, te registro más como una planta, o una [Dryad]" - respondió Kii con calma.
"Eso tiene sentido" - asintió Kurama mientras caminaba hacia el lado del río cercano y se sentaba en posición de loto.
Kii se le quedó observando unos segundos mientras sentía como el aura del albino cambiaba ligeramente.
Ella se sintió atraída a la extraña energía que rodeaba el cuerpo del [Kitsune] de cabello blanco, pero ahora sentía como su intimidad empezaba a liberar néctar con solo estar cerca de él.
Kurama no estaba registrando lo que sucedía en el exterior, él estaba concentrado en reunir una cantidad de [Energía de la Naturaleza] lo suficientemente grande para poder activar el [Sennin Modo], y tal vez así, poder contactar con Kaguya, aunque como las últimas veces, esto estaba siendo difícil, no solo por su poca cantidad de Chakra, sino también porque el mundo estaba tan lastimado que reunir [Energía de la Naturaleza] era un trabajo difícil.
Él estaba a punto de rendirse, cuando sintió un ligero cambio en el ambiente, como si la energía empezara a concentrarse en el lugar.
Kurama no comprendía que era lo que sucedía, pero no había tiempo que perder, ahora que por fin estaba acumulando [Energía de la Naturaleza], no había nada que lo detuviera.
Lo que él no sabía, era que el cambio en la situación se debía a que Kii estaba peligrosamente cerca de él con una mirada llena de locura.
Si hubiera alguna forma de describir a la Kii actual, era que parecía que le hubieran inyectado un litro de afrodisíaco.
La [Dryad] estaba respirando con dificultad mientras se lamía los labios, sin notar como toda la zona a su alrededor, estaba floreciendo a gran velocidad.
Cuando Kurama se percató de la situación y abrió los ojos, ya era tarde, Kii estaba al borde de la locura, situación que solo podía terminar de una forma.
"¡Hyaaaaaaaaaaaan ~!"
* * * * *
2 horas después, Kii estaba con sus manos cubriendo su rostro para intentar ocultar su vergüenza.
Las hojas que cubrían su cuerpo como si fuera ropa, estaban esparcidas en el suelo, mostrando toda su desnuda gloria.
Kurama solo podía mirar sus manos y notar como lentamente su [Chakra Senjutsu] estaba regresando luego de tener relaciones con Kii, aunque esto lo hacía sentir un poco incómodo porque no quería usar a la [Dryad] como herramienta a pesar de que esta era la opción óptima.
"Lo siento" - murmuró Kii mientras hacía que las hojas cubrieran nuevamente sus partes íntimas.
"No tienes que disculparte, yo tampoco hice nada para detenerte" - respondió Kurama mientras negaba con la cabeza - "Sin contar que sabía que tú eras susceptible a mi energía"
Kii se sonrojó nuevamente cuando recordó la cálida y exuberante energía que Kurama había concentrado en su interior antes de perder el control de sus emociones- "¿Eh? ¿Qué es esto?"
La [Dryad] rápidamente abrió los ojos en sorpresa al sentir como su cuerpo se calentaba ligeramente.
"?" - Kurama le dio una mirada llena de sorpresa cuando notó esto, solo para fruncir el ceño cuando sintió algo familiar dentro de la mujer.
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[Origen] Cap 528 <--- Disponible en Pa treon.
[La Leyenda del Kyubi: Vol 4] Extra 15(15) <--- Disponible en Pa treon.
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