บท 263: Capítulo 240: Híbrido
"Te has hecho mucho más fuerte de lo que pensaba, Sakura" - murmuró Kurama mientras se sobaba el estómago para poder aplacar el dolor del impacto - "Ahora solo quiero saber una cosa... ¿Como fue que tu golpe me dolió cuando mi cuerpo es prácticamente tan duro como el diamante más duro del mundo?"
"¿El poder de una mujer enojada?" - respondió Sakura mientras ladeaba la cabeza porque sinceramente también tenía curiosidad por el motivo - "Como sea, mejor dejemos eso para otro momento... Ahora lo que yo deseo es saber sobre cómo está Tsunade-sama"
"Ella está bien, de hecho, está perfecta" - respondió Kurama mientras sacudía la cabeza - "Los bebés también están en perfecto estado, incluso la menor, Kazumi-chan"
"Así que la niña se llama Kazumi-chan..." - murmuró Sakura con una sonrisa mientras sentía con sorpresa como su hija empezaba a moverse en sus brazos - "¿Sarada-chan?"
La pequeña niña de mechones negros lentamente abrió los ojos y observó los alrededores en confusión, solo para empezar a llorar al notar que había muchas personas que eran desconocidas para ella - "¡BUAAAAAAAAAAAAA!"
"Ok, esos son buenos pulmones" - siseó Kurama mientras se tapaba las orejas. Él tenía que admitir que Sarada parecía haber heredado las cuerdas vocales de su madre - "Solo espero que no sea como tú cuando eras una niña"
"Ok, admito que esos no fueron mis mejores años, pero tampoco era tan mala" - respondió Sakura con vergüenza.
"Hija... permíteme discrepar" - respondió Mebuki mientras negaba con la cabeza - "Como tu madre, te amo en cada una de tus fases, pero cuando eras una niña, tus gritos eran tan fuertes que podrías cantar Opera y te escucharían hasta en Kumo"
"¡Ok, eso es una exageración en todas sus reglas" - gritó Sakura con irritación, solo para avergonzarse al notar como sus gritos habían asustado a su hija quien ahora estaba llorando con mayor intensidad - "¡Lo siento!"
Mikoto solo sacudió la cabeza mientras una pequeña sonrisa aparecía en su rostro.
"Kaasan, tienes que saber cómo detener los llantos de mi hija" - dijo Sakura mientras miraba a Mikoto.
"Por lo que veo, ella no tiene hambre" - dijo Mikoto mientras miraba a su nieta.
"Y aunque tuviera, no hay mucho que pueda comer" - respondió Kurama, solo para sentir como la boca de su estómago parecía como si estuviera a punto de explotar por el impacto del golpe de la chica de cabello rosado - "Ugh..."
"Esta vez te lo ganaste" - dijo Mikoto mientras negaba con la cabeza - "Deberías de tratar mejor a las damas, Kurama-kun"
"¡Tousan!" - exclamó Naruto mientras corría en su dirección.
"¿Naruto? ¿Qué haces aquí?" - preguntó Kurama con sorpresa porque sabía que Naruto estaba todavía en Uzu.
"¡Kaasan me trajo!" - exclamó Naruto con una enorme sonrisa.
"¿Eh? Sarada se calmó" - dijo Sakura con sorpresa mientras miraba a su pequeña niña, solo para notar un detalle que la dejó en una situación un tanto incómoda.
"¡Gya~!" - la pequeña Sarada estaba observando detenidamente al joven Uzumaki que acababa de llegar.
". . ." - un profundo silencio invadió el lugar mientras todos miraban a Sarada y luego a Naruto.
"?" - Naruto observó alrededor en confusión porque notó como todos lo estaban mirando - "¿Qué pasó? ¿A caso hice algo malo?"
"Naruto..." - dijo Kurama mientras miraba a su primogénito - "¿Podrías esconderte unos segundos?"
"?" - Naruto miró en confusión a su padre, pero aun así siguió sus instrucciones. Con un movimiento rápido, él desapareció del lugar.
"¡BUAAAAAAAAAAAAA!" - solo para que los llantos de Sarada nuevamente resonaran en la mansión Uchiha.
"Puedes volver, hijo" - dijo Kurama mientras sacudía la cabeza porque sabía que las cosas se iban a volver incómodas para el clan Uchiha y Uzumaki en el futuro, al menos mucho más incómodo de lo que ya era.
"Oh, chico, Sasuke-kun no estará contento con esto..." - murmuró Sakura con una sonrisa forzada en su rostro.
"¿A caso hay algo malo con mis hijos?" - preguntó Kurama con el ceño fruncido cuando escuchó esto.
"Sabes muy bien que no era eso a lo que me refería" - respondió Sakura mientras Sarada seguía con la mirada al joven pelirrojo.
"¡Esto es divertido, Tousan!" - exclamó Naruto con una enorme sonrisa al notar como Sarada lo estaba siguiendo con la mirada.
". . ." - Kurama y Sakura solo suspiraron mientras veían como la pequeña niña extendía sus manos como si estuviera diciendo que él la cargara.
"Tranquilos, esto no puede ser tan malo" - dijo Mebuki mientras miraba al hombre pelirrojo y a su hija - "Sarada-chan es solo una niña... estoy segura de que las cosas se calmarán cuando ella crezca"
"¡Abu~!" - sonrió Sarada mientras agarraba al niño pelirrojo de las mejillas.
* * * * *
"Siento que me perdí de un evento importante..." - murmuró Kushina mientras suspiraba con pesar.
"Tranquila, solo un poco más y terminaremos con el último clan" - respondió Tsume mientras entraba a la Residencia del clan Inuzuka.
"¿Estás segura de que esta es una buena idea?" - preguntó Kushina mientras miraba a su amiga.
"Tranquila, no planeo debilitar a mi clan a pesar de que ya no soy parte de este" - respondió Tsume con calma mientras le indicaba a una de las sirvientas que llamara al consejo para una reunión - "Lo que yo busco, es que el clan Inuzuka florezca, de hecho, estoy pensando usar esta oportunidad para poder crear una segunda Rama Principal, una que usará otro tipo de raza de cánidos y así tener una especialización diferente"
"¿Otra raza?" - preguntó Kushina con sorpresa porque nunca pensó escuchar que Tsume quería revolucionar a su clan.
"Exacto" - respondió mientras le indicaba a otro sirviente que fuera al criadero y que trajera al perrito que estaba en el hogar 8B - "Normalmente usamos Ninken con sangre de lobo porque no solo son mucho más salvajes y fuertes, sino que también tienen unos sentidos mucho más agudos... pero el perro que quiero llevarme a Uzu a criar es un poco diferente"
"¿Diferente? ¿En qué sentido?" - preguntó Kushina con curiosidad, solo para abrir los ojos al notar las peculiaridades del perro que el sirviente había traído - "Tsume..."
"Lo sé..." - sonrió Tsume mientras tomaba al perro y al cachorro - "¿No crees que es una raza que se acomoda bien con la nueva dirección que Uzu está tomando?"
"Es imposible que estos nuevos Ninken no encajen en Uzu" - respondió Kushina mientras negaba con la cabeza al tomar el cachorro y notar como este no solo tenía las orejas paradas como si estuviera siempre atento, sino que tenía una larga cola esponjada - "¿Cómo lograste esto?"
"Si te soy sincera, fue un accidente" - respondió Tsume mientras acariciaba el cabello del perro adulto - "Ni siquiera sabía que los zorros fueran cánidos"
". . ." - Kushina solo guardó silencio porque el nuevo Ninken era la mezcla perfecta entre un Ninken normal y un zorro. No solo tenía el poder y capacidades de un Ninken normal, sino que también tenía la astucia y velocidad de un zorro.
El perro adulto era un poco más pequeño que un Ninken normal, pero a diferencia de su variante original, estos híbridos tenían piernas mucho más largas y estructura corporal mucho más delgada y aerodinámica. Adicional a esas características, el pelaje del Ninken híbrido era de un color anaranjado mientras que el cachorro era de color plateado.
"Tsume-sama... el conejo está listo para hablar con usted y Kushina-sama" - dijo la sirvienta mientras las dos mujeres asentían.
"Ok, quiero que cuiden a estos dos por ahora" - dijo Tsume mientras asentía y caminaba junto a Kushina hacia la habitación donde estaban reunidos los ancianos.
* * * * *
"Muy bien, Hinata..." - dijo Hiashi mientras le daba una sonrisa a su hija - "Nunca pensé que vería el día en que tomarías control del clan"
Neji asintió ante las palabras del actual líder del clan Hyuga porque él también pensaba lo mismo.
"Técnicamente no lo estoy haciendo porque solo me llevaré a unos pocos Hyuga" - respondió Hinata mientras les daba una sonrisa un poco incómoda.
"Eso no cambia el hecho de que tú serás su líder" - respondió Hiashi con una sonrisa - "Y sinceramente no suena como un mal plan, ¿No lo crees, Hanabi?"
"¡¿Por qué yo no puedo ir con Onee-chan?!" - exclamó Hanabi con molestia al escuchar a su padre decir que ella se quedaría en Konoha.
"Lamento decirte que es imposible que vayas" - respondió Hiashi mientras negaba con la cabeza - "Primero que nada, eres muy joven para irte de casa, segundo, tu entrenamiento todavía no termina"
"¡Pero!" - exclamó Hanabi con molestia. Ella realmente no quería separarse de su Onee-chan, tampoco quería dejar de ver a Kurama ahora que él se mudaría junto a los demás del clan Uzumaki.
"Lo siento princesa, pero esta es una decisión definitiva" - respondió Hiashi.
"¡Te odio, Tousan!" - exclamo Hanabi mientras corría hacia su cuarto.
"Estoy seguro de que me entenderás dentro de unos años" - dijo Hiashi mientras negaba con la cabeza cuando vio la reacción de su hija menor, para luego mirar a su sobrino y finalmente a su hija - "Estoy seguro de que ustedes dos también comprenderán mis sentimientos cuando tengan sus propias familias"
". . ." - Hinata se sonrojó como un tomate cuando escuchó esto porque la imagen de un futuro no muy lejano aparecía en su mente, mientras que Neji solo negó con la cabeza, aunque si uno observaba lo suficiente, notaría como el chico estaba con sus mejillas ligeramente sonrojadas.
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