Bosques oscuros bloqueaban el cielo, dificultando toda luz. Todo tipo de ramas retorcidas yacían en el suelo, la vieja y seca corteza negra de los árboles, como si fueran los brazos de los diablos y demonios. Todo esto hacía que el bosque pareciera siniestro y aterrador.
Esta era una zona famosa en el norte, el Bosque Lunar. Después de que se estableció el imperio orco, la Tribu Sangre Negra tomó este lugar. Todos los intrusos fueron asesinados al entrar.
Sin embargo, un brujo vestido de negro, ahora caminaba con indiferencia por el bosque, y ni las semicriaturas ni las bestias mutadas parecían siquiera verlo, mientras caminaban y lo pasaban.
Bosque Lunar, Tribu Sangre Negra... Ha pasado mucho tiempo. Leylin observó el terreno familiar, mientras las escenas de su tiempo en Luna Plateada aparecían vívidamente en su mente. Aun así, era solo una pequeña parte de su larga vida, y recuperó su indiferencia una vez más.