—¡En verdad ha ascendido! —los ojos de Rafiniya se agrandaron un poco.
Obviamente, ella sabía lo que implicaba lanzar el hechizo Fuerza Masiva del Toro. Era un hechizo de rango 6 que sólo los Brujos de rango 13 podían lanzar. Ese tipo de hechizo que podía impulsar a un grupo era muy conocido en el ejército.
Como una noble, Rafiniya sabía más que la gente normal y definitivamente entendía lo aterrador que era eso.
—¡Sólo tiene veinte años! —Rafiniya miró a Leylin, tan joven que era ridículo, y de pronto se sintió abatida. Aunque ella era considerada una genia, no era nada comparada con él...
¡Auuauu!
Sin embargo, distraerse durante la batalla era muy peligroso y ella justamente había cometido ese error. Alec gruñó frente a ella y sus músculos se agrandaron poco a poco. Sus garras lanzaron un golpe que pareció cortar incluso el aire mismo.
¡Era Explosión Salvaje! Claramente había obtenido ese poder de Malar.
¡Bum!