¡Zumbido! Con un sonido suave, Link, Eliard y Dylosen aparecieron a millas de distancia. El bosque del sur los rodeaba. Era extremadamente denso y cubría casi todo el espacio. Había una zona pantanosa debajo con hierba creciendo en ella. Los tres aparecieron a pocos metros del suelo.
Cuando aparecieron, Link y Eliard ajustaron la forma en que se levantaron y aterrizaron constantemente. Dylosen tuvo más problemas. Su cuerpo era negro y humeante. Cuando apareció, cayó como un peso muerto.
El corazón de Link saltó. Sabía que la situación era mala y que Dylosen probablemente moriría esta vez. Usando su mente, lanzó un campo de fuerza de bajo nivel y atrapó al hombre que caía.
Él y Eliard rápidamente se estabilizaron. Eliard subió para ver el estado de Dylosen.
—Es malo —murmuró—. ¡Está prácticamente cocido!