Todos los ataques tenían un efecto aturdidor, pero la duración del aturdimiento era distinta dependiendo del ataque. Por ejemplo, las habilidades como Diente de Dragón tenían un aturdimiento que podía durar segundos y estaba señalado claramente en la descripción de la habilidad. La mayoría de habilidades no mencionaban un efecto de aturdimiento porque el aturdimiento por el impacto era prácticamente instantáneo. Dependía de la experiencia del jugador el aprovecharlo.
La diferencia entre jugadores normales y expertos se reflejaba visiblemente en aspectos como estos.