Dentro del apartamento de Kelly...
—¡No puedo creer que estés haciendo este tipo de tonterías, Kelly! —Una voz furiosa tronó y resonó dentro del apartamento lujoso mientras Kelly miraba a su padre con una absoluta conmoción grabada en su cara. Su padre nunca había gritado tan furiosamente como en ese momento. Siempre había sido ese padre estricto e inaccesible para ella desde que era joven, pero no era de los que gritaban tan fuerte al enfadarse. Esta era la primera vez que Kelly lo veía tan furioso, por lo que no pudo evitar sentirse nerviosa.
—P-papá
—¡Cállate! ¿Creíste que no lo descubriría? —él temblaba de ira y Kelly se obligó a presionar sus labios con fuerza. No quería enfadarlo aún más por el temor de que pudiera colapsar.
—¿Cómo te atreves a hacer esto? Estabas de acuerdo con el contrato. Te di todo lo que querías y necesitabas... todo... ¿y así es como me lo agradeces?! —Continuó, aún temblando de ira, agarrándose del brazo de su guardaespaldas para sostenerse.