Este capítulo está dedicado a @edi_o. ¡Muchas gracias por el super regalo!
Sus miradas se encontraron y se sostuvieron por lo que pareció un largo rato, hasta que Alicia finalmente extendió la mano y tocó su cara, acariciándola lo más suavemente que pudo—esa cara que parecía volverse más y más querida para ella a medida que pasaban los segundos.
—Estoy tan, tan arrepentida... —susurró con voz quebrada. Sus silenciosas lágrimas seguían rodando por su cara mientras sus hombros se sacudían por la fuerza de sus sollozos.
—¡Maldita sea, no! —él agarró su cara y secó las lágrimas con su pulgar—. ¡No te disculpes! Yo no tenía intención de revelar todo eso a... —sacudió la cabeza, casi abrumado al verla llorar tan desoladamente como si todo su mundo hubiera sido condenado a las llamas del infierno—. No te estoy culpando o algo así. Esto es...