"Cristóbal retiró rápidamente sus manos de sus bolsillos, sus dedos se curvaron en puños apretados mientras se acercaba más a Jasper. La amenaza en su postura era palpable; su expresión era asesina mientras agarraba los cuellos de Jasper, su ira a punto de desbordarse.
—Te mataré si intentas cruzar tu límite.
Pero Jasper no se echó atrás, enfrentando la agresión de Cristóbal con su propia ferocidad. Apartó las manos de Cristóbal, su voz inquebrantable mientras entregaba una respuesta desafiante.
—No temo a tu amenaza vacía.
—No me consideres un hombre indefenso al que puedes intimidar —dijo, extendiendo su dedo índice—. Ya no soy el Jasper que recuerdas.
—Sí —Cristóbal se mofó, su postura burlona era evidente—. Te has vuelto poderoso. ¿Pero a qué precio? Te vendiste al Sr. Hubbard.