—¿Confías en mí? Puedo hacerte hermosa. Puedo ayudarte a deshacerte del flequillo. ¡Puedo hacer que esas caras feas pierdan toda su dignidad! ¡Puedo mostrarle al mundo tu belleza! —Ren Feifan terminó de hablar y lanzó una mirada fría a las llamadas "caras feas".
Todo el mundo instintivamente dio un paso atrás.
—Hermano mayor, creo en ti. —Lin Xiaoxi miró a los ojos de Ren Feifan y asintió con firmeza.
Desde el momento en que lidió con el matón, estaba segura de que Ren Feifan no era una mala persona.
De hecho, parecía leer un cierto significado especial en sus ojos...
Era como si compartieran un entendimiento mutuo...
Una vez que Lin Xiaoxi asintió, Ren Feifan sacó una pequeña botella de Líquido Embellecedor de su bolsa, vertió un poco en sus dedos y lo untó en las cicatrices de su rostro.
El Líquido Embellecedor era versátil: podía ser ingerido o aplicado externamente. Para cicatrices grandes como las suyas, la aplicación externa era definitivamente la mejor elección.