La repentina lluvia dio a todos muy mala espina.
La mujer a la que siempre le gustaba esconderse en la oscuridad y observar podría estar ya observándoles desde algún lugar y ellos no podrían verla.
Park Sora resopló.
—¿La Doncella de la Luna sabe controlar el tiempo? Esta lluvia debe ser obra suya. Me pregunto si será venenosa. Primero sostendré mi pequeño paraguas rojo.
Park Sora levantó un bonito paraguas rojo y no se olvidó de proteger a Jordan de la lluvia.
Sin embargo, Jordan no se tomó en serio la lluvia. A un digno mutante dorado no le importaría semejante veneno.
Jordan miró el pico más oculto de la montaña en la distancia y dijo:
—Ese es el pico más alto de la Montaña Sagrada Sapu, ¿verdad?
Dragón miró la información y dijo:
—Sí, ése es el pico más alto. Está a 6.556 metros sobre el nivel del mar. Se llama el Pico Sapu.
Jordan asintió.
—Debería estar allí. Yo iré. Espérame aquí.