Capítulo 36: Voyeur (R-18) (EDITADO)

Veremos un pequeño Timeskip para pasar los tres años hasta la convención de Dios Profundo.

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"¡Me corrooooooo! … ¡Mi Sol!"

"…mi …. Mi esposo~… no siento las piernas ah~"

"…zzzz....no hermano…. que travieso, ahh~…zzzz…"

En una habitación dentro de la cabaña ubicada en el mundo interior de nuestro protagonista, podías ver una serie de hermosos cuerpos femeninos, esparcidos por toda la habitación.

Algunas de estas mujeres dormían por el cansancio extremo, otras estaban consientes, pero no podían mover nada de la cintura para abajo; mientras que algunas estaban retorciéndose de placer.

Todo esto se podía ver mientras que la última de las mujeres caía rendida ante el bestial y sensual choque de caderas al que fue sometida por su hijo.

Yue Wugou cayó sin fuerzas sobre la cama que albergaba a alguna de las valientes mujeres que sufrieron tan 'honorable' pérdida.

Ellas habían ideado un plan para hacerle frente al nuevo nivel de poder que tenía su amado…. ¡Ay! La sorpresa que se llevaron al ver que su derrota estaba definida desde antes de la 'batalla' ya que había subestimado a su amante.

A pesar de haber dado todo lo que tenían, las dos semanas que su 'enfrentamiento' duró, fue el límite para ellas.

Yuanba estaba transpirando mientras veía toda esta hermosa y bizarra escena, ya que todas las mujeres aquí presentes tenían la dicha escrita en su rostro, mientras que de todos sus hoyos se escapaba su 'espeso y blanquecino jugo de amor'.

Él podía admitir que aún tenía energía para ir por más, pero esta escena lo mantenía satisfecho, por el momento.

Era consciente que sus mujeres gozaban con estas sesiones, pero no quería romperlas completamente con tanto placer constante.

Por ello, para cuando tenía necesidad de 'aliviar' estrés, podría ir a ver a cualquiera de las discípulas de esta secta, las cuales aceptarían ayudarlo sin ninguna duda, con fanatismo destellando en sus ojos; también podría ir a jugar con cualquiera de sus 'juguetes' dispersos por todo el universo.

Mientras pensaba en esto, no pudo evitar la idea que había nacido hace mucho tiempo en su mente, la cual era organizar el nivel o estatus que tenía cada una de ellas.

Había comenzado a organizar el 'nivel' de las mujeres con las cuales tenía algún tipo de relación.

Todas las mujeres presentes en esta habitación eran a quien él consideraba sus esposas, a quienes no solamente estaba follando místicamente, sino que, jugarían un papel más importante para sus planes.

Ellas eran las mujeres por las que tiene sentimientos de pareja, formados durante el transcurso de los años.

Si bien el inicio de algunas fue por engaños, todas ellas ahora matarían a quien se atreva a cuestionar sus decisiones.

El amor y respeto que sentían por él era extremadamente elevado, la admiración que le tenían no era superada por nada ante sus ojos.

Él estaba preparando a estas mujeres para que sean elementos activos para cuando lance su ofensiva contra ARKYA o para ir a visitar a otros mundos, dependiendo del desempeño de cada una.

Ellas no solo serían lindos adornos para coleccionar, serían sus 'guerreras' quienes no temerían matar dioses y demonios si les diera la orden.

En el segundo nivel estaban conformado por sus 'sirvientas' quienes no eran tratadas mal, pero no tenían la posición de las primeras.

Aquí podías ver a las miembros de la Nube congelada Asgard, aparte de las siete Hadas y las dos Maestras claro está.

Ellas eran sus mujeres en todo su derecho, jamás pensarían siquiera en otros hombres, siempre se mantendrían fiel a su 'Maestro' y darían la vida por él.

En el tercer nivel tienes a los ´juguetes' quienes eran mujeres rotas mentalmente, estaban totalmente obsesionadas con Yuanba, ya que de tanto sexo salvaje su cabeza solo podía pensar en la gloriosa polla que las hacia gritar de pasión.

Ellas eran elementos activos que servían como espías en todo este mundo, listas para hacer lo que sea por su recompensa.

Luego de que su madre se durmiera con una sonrisa tonta en la cara, acomodó en la cama a todas las mujeres luego de haberlas limpiado, por lo que procedió a salir de la habitación y dirigirse a tomar un poco de agua en la cocina de su pequeña cabaña.

En ese momento apareció una bola blanca metálica que se sentó en la mesa frente a Yuanba, quien estaba bebiendo.

["Sabes, ya me cansé de no poder hacer nada más, la batalla que tuvimos con la consciencia universal me ha dejado picado, ¡quiero golpear a alguien! .... Ah… ¿En verdad ahora esperaremos estos tres putos años hasta que quieras hacer tu espectáculo?"] – Giru preguntó mientras se echaba sobre la mesa por el aburrimiento que lo estaba carcomiendo.

"glup, glup… Ahh…. No hay nada mejor que tomar agua después de cualquier ejercicio exigente" – Nuestro protagonista dejó el vaso a un lado y miró a su amigo quine estaba haciendo un berrinche, lo que le sacó una sonrisa irónica.

"Hombre no seas quejica, el tiempo pasará rápido. Además, no te lo había dicho, pero ya puedo manipular la materia a tal punto que me permite generar un cambio de ETIOS sustancial, ¿sabes lo que eso significa verdad?" – Yuanba ni siquiera había terminado de hablar cuando giru salto rápidamente y cogió por el cuello la bata de su amigo mientras sus brazos temblaban notoriamente.

["¿Estás diciendo la verdad? ¡Porque te daré la paliza de tu vida si me estas mintiendo!"] – Giru estaba hablando mientras la luz de su ojo comenzaba a parpadear intensamente. Sabían que este maldito motherfuck*er podía ser la basura más grande del universo, pero jamás le había mentido sobre cosas serias.

"Jejeje claro que no te estoy mintiendo amigo, no te lo había dicho antes porque estaba ocupado, pero ahora ya podrás tener tu cuerpo para que puedas disfrutar de los tres placeres de la vida, según un gran filósofo de mi antiguo mundo"

Yuanba comenzó a decirle las cosas que el pequeño robot había esperado escuchar, por lo que comenzó a saltar de alegría por todos lados, lo que le sacó una sonrisa a nuestro protagonista.

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Reino de la Canción de Nieve – Secta Fénix Divino de Hielo, un año antes de la Convención

"Mmm…glup …"

"Ahh… ¡Sí! …justo ahí~"

En una habitación blanquecina, podías ver al Rey del Reino Mu Xuanyin, quien en otra oportunidad se presentaría así misma como la cultivadora orgullosa y poderosa que era, ahora estaba arrodillada entre las piernas de Yuanba mientras se tragaba ávidamente su vara, haciendo sonidos obscenos al utilizar su lengua en la cabeza abultada. Su rostro mostraba una lujuria y ansiedad que solo sería vista por su hombre.

Mientras la Maestra de Secta se ocupada de su barra carnosa exclusiva, Yuanba estaba utilizando su hábil lengua para darle placer extremo a otra mujer sentada sobre su rostro, lamiendo todo su coño e introduciendo su lengua para estimular sus partes internas.

Esta no era otra que Mu Bingyun, la hermana menor de Xuanyin, quien estaba apretando con fuerza entre sus muslos el rostro de su hombre, mientras gemía fuertemente a la vez que entrelazaba sus dedos entre el cabello del sujeto.

"¡Ahh me corrooooooo!"

Con un grito apasionado, Bingyun apretó sus muslos mientras de su coño se soltaba un chorro de amor directo a la cara de su amante, quien respondió con más estimulo en su jardín secreto, haciendo que la mujer se contorsione por la sobre estimulación, cayendo haca un lado de la cama mientras seguía con los espasmos en todo su cuerpo.

"Jejeje hermanita, no ha pasado ni diez minutos desde que empezamos y ya estás perdiendo, recuerda que debemos castigar a este chico malo por atormentarnos muchas veces"

Xuanyin dejó de lamer la polla que estaba entre sus celestiales tetas y se subió sobre las caderas de Yuanba, para luego posicionarse sobre ese dragón furioso que estaba erguido listo para la batalla.

Sin ningún aviso, bajó sus caderas y se clavó hasta el fondo de su vientre toda la vara de carne, haciendo que sus ojos se abran de felicidad y su boca se quede con un grito ahogado, el cual fue soltado de manera estrepitosa.

"¡Siiiiiiii! ¡Esto es lo que estaba esperando!"

*Plaff* *Plaff* *Plaff*

La orgullosa Rey del Reino comenzó a cabalgar sobre la polla de Yuanba como una jinete experimentada, haciendo que su glorioso trasero saltar de arriba abajo, generando los sonidos sxuales de choque de carne que le gustaba escuchar a nuestro protagonista.

Todo el glorioso cuerpo de Xuanyin subía y bajaba, haciendo que sus grandes y hermosos pechos se muevan en el mismo sentido.

Yuanba agarró con una mano uno de estos majestuosos senos y comenzó a masajearlo con la maestría que solo él sabía, la otra de sus manos se fue hacia la cadera de la mujer para aumentar la fuerza de las embestidas, haciendo que la hermosa dama aumente sus gritos de placer y lujuria.

Todo este alboroto hizo despertar a Bingyun, que se había recuperado de su orgasmo previo, por lo que se incorporó y vio como su hermana se iba sumergiendo en el acto sexual, con signos evidentes de ir perdiendo este encuentro.

Antes de que piense otra cosa, sintió las manos de su hombre acariciarle sus hermosos pechos, haciendo que se pierda nuevamente en esta sensación placentera.

Pasó un buen tiempo hasta que Xuanyin pegó un grito desenfrenado, anunciado su eminente corrida mientras era rellenada por la semilla de Yuanba, dejando si fuerzas al Rey del Reino, quien cayó sobre el fornido pecho del hombre.

Mientras ella levantaba la mirada vio como el sujeto le daba una cálida sonrisa y procedió a besarla, haciendo que la mujer solo sonriera tontamente por este tierno gesto.

Después, el tipo se levantó cuidadosamente mientras colocaba a un lado a la mujer sobre su pecho, luego, atrajo a una Bingyun muy excitada por el juego previo y la hizo colocarse en la posición de perrito, dejando a su vista su magnífico trasero blanco.

Al coger sus nalgas con las manos y separarlas, pudo ver que ocultaban un hermoso coño rosado, el cual estaba rebosando de jugos amorosos por la expectativa.

"V-Vamos amor…. No hagas esperar a Bingyun... he estado esperando por esto" – Las tiernas palabras de esta mujer, al mismo tiempo que meneaba su trasero, hicieron que la sangre de Yuanba se calentara, clavándole su polla, lenta pero constantemente, hasta que estuvo completamente llena, sacando un grito sensual de esta hermosa mujer.

Luego de un periodo de adaptación, el comenzó con las embestidas, haciendo que su pelvis choque contra en gran trasero de esta Hada, mientras sus bolas estimulaban la perla de su jardín secreto cada que se producía el contacto.

"Ahh~… esposo… te amo…. Te amo~…Mmm~"

La voz de Bingyun estimulaba más a Yuanba, haciendo que la tirara de los brazos y la atrajera hacia él.

Rodeó con sus fuertes manos el cuerpo de la bella dama y comenzó a acariciar sus grandes senos, los cuales solo perdían por un pequeño margen con los de su hermana mayor.

La mujer volteó la mirada para buscar la cara de su amante, el cual se acercó y le dio un apasionante beso, en donde la lucha de lenguas hizo aún más excitante toda esta situación.

Así pasó el tiempo en el cual Bingyun llegó a otro clímax, cayendo sobre la cama con un Ahegao jamás imaginado por cualquiera que la conociera, mientras una copiosa cantidad de esperma brotaba de su coño.

Yuanba vio esta escena y se sintió realizado.

Había pasado casi dos años desde que curó a la menor de este par de hermanas y desde ese entonces había avanzado en formar una relación con ambas mujeres.

Le pareció curiosos que sea Bingyun la más dispuesta, pero el que Xuanyin no esté controlada por la Reina Diablo hizo que no sea muy abierta al inicio, pero ahora era la más proactiva de las dos.

Ambas mujeres habían hablado de muchas cosas con él y había llegado a conocerlas lo suficiente.

La menor de ellas era una mujer que vivía con arrepentimiento y el poder tener otra oportunidad abrió el camino para que cambie su forma de vida.

Ella jamás se hubiera entregado a Yuanba solamente por el hecho de haberla curado, fue la personalidad de este sujeto lo que atrajo a la fundadora de la Nube Congelada Asgard, a tal punto que lograra enamorarla en este periodo.

Por otro lado, la hermana mayor era una mujer orgullosa y sobreprotectora, la cual jamás se le hubiera pasado por la cabeza tener una relación casual con algún hombre.

Si bien ella era muy directa y temperamental, el haber escalado tan rápido en el poder hizo que quemara varias etapas de su vida, por eso Yuanba quiso que su endurecida vida se soltara un poco con la presencia de sus padres, y eso funcionó, por lo que la mujer vio que este hombre no estaba aquí solo por su poder o presencia, si no que estaba aquí para conocerla, cosa que fue abriéndole su corazón.

Mientras nuestro protagonista recordaba todo esto, ambas mujeres se levantaron y se acercaron hacia él, cada una en un costado, abrazándolo y besando su cuello y rostro.

Ellas se habían desinhibido desde que tuvieron su primer encuentro cada una con este hombre. Desde ese entonces, cada vez que han podido, ha tenido encuentros individuales o en tríos, como ahora, en donde han dado rienda suelta la pasión que llevan dentro.

"Esposo, aun no estoy satisfecha… necesito más~" – Bingyun susurró en el oído de Yuanba mientras frotaba suavemente sus pechos en el costado de su cuerpo.

"Ahh~… mi hermanita tiene razón mi amor, necesitamos más de tu afecto dentro de nosotras~" - Xuanyin comenzó a besar el costado de su cara mientras comenzaba a masajear la vara de carne que seguía erguida furiosamente, lista para un próximo asalto.

"Vaya vaya, mis pequeñas niñas están ansiosas por más, creo que se olvidan de todas las veces que han terminado pidiendo perdón…" – Las dos mujeres se sonrojaron ante la declaración ya que Yuanba era una maquina perpetua de sexo que no conoce el concepto de cansancio.

"Jejeje, aunque creo que eso es lo que buscan en realidad ¡Bien! Prepárense señoritas, hoy no saldrán de esta habitación hasta que queden satisfechas"

Al término de su declaración este sujeto abrazó a las dos mujeres y las levantó para seguir una nueva ronda de placer, cosa que hizo gritar de felicidad a ambas hermanas.

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Región Divina del Oeste – Tierra Prohibida del Samsara, dos meses antes de la Convención.

En este lugar podías ver a un hombre que, si te pidieran describir, dirías que es un sujeto sin igual, con dos metros y medio de estatur, con un rostro extremadamente guapo.

Con cejas son como afiladas y cada línea y patrón de su rostro es increíblemente imponente. Sus ojos brillan como el mismo sol; una luz divina que parece haber circulado por una infinidad de tiempo.

O al menos eso era lo que debería decir cualquiera que lo conociera

En cambio, este hombre estaba arrodillado mientras una fuerza invisible lo retenía en su lugar sin poder liberar una onza de su energía profunda.

Estaba atado aquí, fuera de la cabaña donde vivía la mujer de la cual se había enamorado.

En el pasado fue salvado por Shen Xi y desde entonces desarrolló un amor unilateral pero extremadamente fuerte por ella.

Nunca tocó a otra mujer en su vida porque quería que ella le correspondiera sus sentimientos.

En algún momento, decenas de miles de años atrás, hizo de la Tierra Prohibida del Samsara un lugar sagrado para ella y restringió el acceso de cualquier otra persona.

Como ella se liberó de distracciones para cultivarse, estaba lo suficientemente agradecida como para permitirle declararla públicamente como 'Reina Dragón' a pesar de que no tenía ningún sentimiento por él.

Esto lo había llenado de un valor y esperanza de que algún día ella aceptara sus avances, de que abriera su corazón para él y que por fin su amor se consumara.

Pero lo que estaba sucediendo ahora mismo hizo que su mente se partiera en dos mientras un dolor extremadamente amargo surgía desde su pecho, entrecortándole el aire.

Sus ojos estaban abiertos de par en par y su boca no podía emitir sonido alguno mientras todo su rostro era una miríada de emociones negativas y de sufrimiento.

Esto se debía a los sonidos melodiosos que se escuchaban desde dentro de la cabaña.

Él podía reconocer fácilmente que esa voz era de Shen Xi, quien no controlaba el volumen de su gemídos mientras otros sonidos era agudos desde dentro.

*Plaff* *Plaff* *Plaff*

"Ohhh…...Ahhh…. ¡Que rico!"

El hombre postrado fuera de la casa, llamado Long Bai, sentía que se le clavaban estacas en el corazón con cada palabra que escuchaba.

Era algo que jamás se había imaginado vivir hoy cuando vino a este lugar.

Pensaba que podría estar ante la presencia de su amada y poder apreciar su figura… en cambio, el escuchar esos sonidos hizo que su cuerpo temblara de rabia, dolor e impotencia.

"Estás muy emocionada pequeña Xi'er…ahhh… dime ¿te está gustando esto?"

En este momento el tipo atormentado escuchó la voz de un hombre, lo que hizo saborear la sangre en su boca por la rabia extrema que sentía.

Un hombre estaba con la mujer a quien había jurado amor eterno… otro hombre estaba en el lugar que pensaba sería suyo en el futuro….

"Ahhh~…. Es que…. Uff…. Eres así de bueno mi vida…ohhh~"

La sensual voz de Shen Xi volvió a escucharse, seguida del sonido de un apasionado beso.

Esto hizo que el Monarca Dragón apretara las manos haciendo que comenzaran a sangrar. Escuchar esto le arrancaba el alma trozo por trozo.

"Vamos mi dulce niña, descríbeme que es lo que te gusta" – la Voz del hombre volvió a sonar.

"E-Es…ahhh… un poco… vergonzoso" – Shen Xi habló con un tono muy íntimo mientras intentaba contener sus gemidos.

"Umm, sin no lo haces tendré que detenerme~" – El Tipo dijo de una manera divertida mientras cesaba los sonidos de carne chocando con carne.

"¡NO! .... no te detengas por favor… lo diré, así que no te detengas" – La voz desperada de Shen Xi hizo que los ojos de Long Bai se enrojecieran por el dolor que sentía.

"Vamos mi niña, dile a tu hombre que es lo que te gusta~" – La tentadora voz del sujeto volvió a sonar.

'No…. Por favor no lo digas'

La mente del Monarca Dragón rezaba para no escuchar esas palabras… ya había intentado cortar sus sentidos, destruir sus oídos, atacar la casa frente a él… pero nada funcionaba, la fuerza que lo contenía no dejaba que haga algo y solo le permitía escuchar esta horrible charla… pero sus plegarias nunca fueron escuchadas.

"M-Me gusta… ohhh… ¡Me gusta que tu vara me penetre! … ¡Siiiiiiii!"

En el momento en el que ella hablo, el sonido del choque de caderas se reanudó, haciendo que Shen Xi volviera a gritar y gemir en éxtasis mientras relataba lo que sucedía.

"¡Me gusta que me tomes por detrás! …. Ahhh …. M-Me gusta cuando tus brazos me rodean el cuerpo… ohhh… me gusta cuando tus bolas chocan contra mi trasero, haciendo que aumente mi deseo por ti…"

Los sonidos de embestidas aumentaban mientras las palabras de la mujer se hacían cada vez menos entendibles, hasta que ella dio un grito estrepitoso al final de todo.

"¡Sí, sigue! …ahhh… Me gusta… ¡Me gusta cuando liberas tu semilla en mí y me llevas a la gloria! ¡Ahhh me corrooooooo!"

Long Bai estaba arrodillado, con la cabeza agacha mientras lagrimas caían de sus ojos.

El escuchar esto fue el último de los clavos en su ataúd. La vida lo había abandonado junto con sus ganas de vivir.

Mientras estaba postrado, no se dio cuenta que los sonidos dentro de la cabaña habían cesado y un buen tiempo había pasado.

En eso, la puerta de la cabaña se abrió, haciendo que levantara la cabeza y vea a un hombre, que nunca había conocido, mientras salía con solo una bata en su cuerpo.

El sujeto miró por un momento a Monarca Dragón sentado de manera impotente y solo hizo una mueca graciosa mientras cerraba la puerta tras él.

"Creo que esta es la primera vez que nos conocemos Long Bai, déjame decirte que no te tomé por una persona voyeurista eh"

El hombre destrozado mentalmente solo lo miró con una rabia infinita surgiendo desde su corazón ¡Era el sujeto que se había acostado con Shen XI, con la mujer que el amaba desde el fondo de su corazón!

"T-Tú… maldita bestia ¡Que le hiciste a Shen Xi! ¡Ella jamás aceptaría estar con algún hombre! ¡¿Acaso usaste un poder en ella para obligarla a esto?"

Long Bai no contuvo su voz, que ahora podía liberar, y habló estruendosamente, haciendo que el lugar se estremeciera por el poder que llevaba.

Sin embargo, dentro de la cabaña no se escuchó ni un atisbo, por lo que Shen Xi siguió durmiendo con una sonrisa tonta en la cara.

*¡Baaam!*

En el momento en el que Long Bai iba a seguir gritando, un puño golpeó su cara, arrancando parte de su rostro y mandíbula, haciendo que el Monarca dragón casi pierda la vida.

"Shhh, cállate el hocico que mi mujer está durmiendo, estar follando por una semana entera cansa a cualquiera ¿sabes?"

El tipo en bata había aparecido al costado de Long Bai y lo había golpeado brutalmente.

El Monarca Dragón quedó tirado a un lado mientras su conciencia se desvanecía.

"Ahh, pero como soy bueno, te diré lo que quieres escuchar antes de que te mate. Ella es mi esposa por que vio en mi lo que nunca vio en nadie más, incluso en ti. Vio a un hombre de verdad que no iba pisando el suelo por donde caminada, conoció a un sujeto que no iría tras ella si se lo pidiera. Estaba cansada de tipos como tu que solo saben adular estúpidamente todo de ella. Encontró en mí al hombre en el cual podía confiar, por eso es que se enamoró y se me entregó voluntariamente ¿contento?"

Long Bai estaba escuchando esto mientras su mente se apagaba, no entendía las palabras de este hombre, solo sabía que su dolor jamás se iría de su alma.

Había vivido muchos años y esta era la primera vez que lloraba de impotencia como un niño indefenso.

"Al diablo, igual tomaré todo tu reino para el manejo de mis planes, gracias por ser un gran simp, no tanto como el antiguo Xisu, pero ahí ibas peleando por el título con él. Ahora desaparece" – Con un movimiento de su mano, el cuerpo y el alma de Long Bai, el sujeto más poderoso de este universo, se extinguió.

En este momento apareció un sujeto, el cual parecía un muchacho en forma de elfo, quien estuvo flotando en el aire mientras tenía una sonrisa en su rostro.

["Hombre, cuando me mandaste el mensaje para ver un buen espectáculo, ya me había imaginado algo como esto, je"] – este muchacho no era otro que Giru, quien había recuperado el cuerpo de su tercera vida.

"Bueno, diablos, aun no me acostumbro a verte en esa forma, mejor cambia a la adorable pelota metálica cuando estemos juntos. En cuento a esto, se lo merecía por estúpido y por ser una reverenda perra en la historia original"

Respondió Yuanba mientras creaba un par de sillas reclinables para que puedan sentarse.

["Cállate pendejo, me gusta disfrutar de tener un cuello y poder diferenciar mi tórax de mi tronco, así que no lo cambiaré por ti…. Al menos no ahora"] – Giru habló con un tono divertido mientras se recostaba en la silla y se ponía lentes de sol para disfrutar de este momento con su amigo.

"Je, lo que tu digas…Ahhh... que buena vida… Ahora solo faltan dos meses para que empiece la convención de Dios profundo, para que no te estés quejando. Pronto acabaremos los asuntos este mundo y, calculo que, si asimilamos toda la conciencia universal, podremos ir a ARKYA y volar el universo Proto de ATG. Después de eso iremos a los mundos en donde se encuentran los miembros de contrafuerza para que pelees y dejes de joder"- habló nuestro protagonista mientras se recostaba en su silla.

Habían pasado casi tres años desde que se apoderaron del sistema SINÉIDESIS y estaban constantemente absorbiendo ETIOS almacenado el código. Esto hizo que sus poderes se dispararan a escalas no previstas en este mundo.

El ETIOS es un tipo de energía que era recolectada por los exaltados para mantenerse y mantener a los universos Protos.

Al mismo tiempo, era una energía que también nutria a los trascendentes, solo que estos últimos tenían que obtenerla lentamente mientras estaban en un mundo, ya que no podían ir y robarla de la conciencia universal sin matarla, el problrma era que esta lo eliminaba como sistema de emergencia.

["Lo que digas, solo quiero acabar para poder ir a patear el trasero de esos vejestorios"]

Así, estos dos amigos conversaron por un buen tiempo, tan casuales, mientras hablaban de cosas que harían cagarse en los pantalones a los seres más fuertes de este universo.