—Amelia vio que eran frutas. Se escapó corriendo y gritó: «¡Abuela, estoy llena! ¡De verdad que estoy llena! Si como más, voy a vomitar». Tan pronto como terminó de hablar, corrió lejos.
—Señora Mayor Walton: «...»
—Alex miró al frente y dijo: «Entonces yo también subiré».
—Señora Mayor Walton: «Detente ahí mismo».
—Alex se detuvo en seco y se dio la vuelta. «¿Qué pasa?»
—La Señora Mayor Walton estaba inexpresiva. «Cómete estas frutas».
—Alex: «...»
—Al día siguiente, bajo la estricta vigilancia de la Señora Mayor Walton, Alex se escapó con Amelia. Su destino era el Centro Comercial Central. Había un camión de helados estacionado en la plaza frente al centro comercial durante todo el año.
—«Papá ha estado comiendo este helado por diez años», Alex dijo mientras conducía el SUV, «Es el mejor helado de la capital».
—Amelia no podía esperar. «¡Helado! ¡A Mia le encanta el helado más que nada!»