—Bajo la persuasión de unas cuantas chicas —Kiara Rees echó un vistazo a Greg Jensen antes de moverse al asiento adyacente y colocar su pequeña mochila en el compartimento.
—El rostro de Ashley Dean mostró un atisbo de triunfo mientras le decía a la espalda retirándose de Kiara —¿Qué estás esperando ahí parada? Ayúdame a subir mi maleta.
—Kiara Rees estaba obviamente descontenta y vaciló por un momento sin moverse.
—Ashley Dean dijo con sarcasmo —Kiara Rees, ¿todavía quieres que tu papá encuentre trabajo? Si no es así, solo tengo que hablar con mi papá.
—¡Sí quiero!
—Sin otra opción, Kiara Rees se levantó y arrastró la enorme maleta de Ashley Dean hacia el portaequipajes.
—Sin embargo, el portaequipajes estaba muy alto y la maleta era demasiado pesada, por lo que el frágil cuerpo de Kiara no pudo levantarla a mitad de camino.
—Greg Jensen frunció el ceño, se levantó, apoyó la maleta por detrás y dijo suavemente —Déjame hacerlo.