Nico estaba sentada en el comedor, desnuda excepto por el séptimo abrigo que se había probado esa mañana.
—Entonces, ¿vamos a ir a Absolución, o debería abrir un portal con precisión allí y pilotarlo hacia el planeta de reclutamiento sincronizada con tu llegada? Creo que la otra manera sería mucho más divertida y dramática ya que veremos en tiempo real cómo la Alianza y el resto de la humanidad descubren lo que estábamos tramando —sugirió.
—Primero, ponte pantalones. Segundo, creo que tienes razón. Que la nave aparezca a través de un portal causaría una gran impresión. Hablando de eso, ¿tiene incluso la energía para abrir un portal de ese tamaño? —preguntó Max.
—Por supuesto. Es larga, y solo las alas traseras son particularmente anchas, así que puedo crear un portal ovalado muy eficiente y traerla a través. Será menos de la mitad de la energía necesaria para que la esfera de la Alianza nos siga.