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El duelo entre Kaizen y Evan de alguna manera reconfortó los corazones de los espectadores. Y esto no era solo por el gesto de Evan al rendirse de manera amistosa cuando se dio cuenta de que iba a perder, ni solo por el gesto de Kaizen al hacerle saber que la batalla ya estaba ganada, sino también por la sonrisa más amable de Psyker que cualquiera de sus fans hubiera visto jamás.
Sin embargo, mientras que la primera batalla de los cuartos de final terminó pacíficamente, deleitando a los espectadores con juego limpio después de una pelea épica, la segunda batalla era, por decirlo menos, aterradora.
Todos esperaban ansiosos el enfrentamiento entre Ryeis y Qeidurth, pero nadie esperaba que el paladín no tuviera ninguna oportunidad contra el dueño de la Espada de Cristal.
Qeidurth fue literalmente masacrado con golpes tan rápidos que los espectadores normales apenas podían ver, y aun con su magia de sanación y bendición, sus heridas no cerraban rápidamente.