Después de dejar a Harold y a Alvin, Alicia regresó a unirse a Luciana, quien la esperaba junto a la entrada del jardín real, donde habían acordado encontrarse para almorzar ambas con la Reina. No podía esperar a terminar eso e ir a encontrar a Harold, ya que ambos tenían algo importante de qué hablar. O más bien, ella necesitaba pedirle un favor, y tenía que hacerlo de manera que él no sospechara que era parte de su plan para escapar.
Si tan solo supiera que ya le había divulgado cada detalle de su plan a Harold, no estaría tan confiada.
Miró a los guardias que estaban parados junto a la entrada. Eran los mismos tipos que habían estado allí el día anterior. Pensó brevemente en preguntarles si sabían lo que había ocurrido entre ella y Harold mientras estaba borracha, pero dudaba que le dijeran algo, así que decidió no perder su tiempo.