```
Aunque al principio Seren estaba renuente a tenerlo cerca, a medida que seguían visitando nuevos lugares y encontrándose con extraños a lo largo de su viaje, la presencia de él le resultó reconfortante. Durante años, siempre había estado sola en su torre y, aunque estaba curiosa por lo desconocido y absorbía silenciosamente la experiencia, no podía deshacerse de su cautela y malestar al estar alrededor de personas. Con ese hombre de ojos rojos, sentía que al menos él no le haría daño.