Mo Qiang tenía muchas expectativas de esta misión que le habían encomendado Xiao Jiao y Xiao An. Aunque los demás pensaban que solo lo hacía por los beneficios económicos, lo cual por supuesto hacía, también quería genuinamente tratar las pobres condiciones de esta era y tiempo.
No solo limpiaba el océano porque Mo Qiang quería abrir un negocio de pesca, sino también porque quería mejorar el ciclo del agua de esta región más de lo que estaba antes, lo que era la razón por la cual no solo plantaba árboles en la isla, donde se quedaba con el resto del equipo, sino que también intentaba buscar los árboles más deseables que se suponía que crecieran en la isla.
¡Lo cual no era otro que —COCO!
Así es, quería encontrar una manera de sembrar semillas de coco y hacer crecer sus árboles en la orilla de la isla. Después de todo, ¿cómo puede no haber árboles de coco en una isla? ¡Tenía que haber árboles de coco cuando había una isla! ¡Era una regla no escrita!