Arabelle estaba en el séptimo cielo. Miró de reojo a Otoño, que estaba de pie al otro lado de la habitación, y luego a la puerta, esperando que Gab llegara pronto. Esta noche, todos iban a dormir en la misma cama, como cuando todos sus amigos dormían entre sus padres. El picnic de hoy había resultado ser el mejor día de todos. Incluso mejor que su primer día.
Aunque Otoño era su hermana mayor, Tía N había dicho que, puesto que Mamá la había dejado con Otoño antes de ir al cielo, debía tratar a Otoño como a su madre. Y si Otoño era como su madre, entonces Gab era como su padre, ¿verdad? Así que esta noche, podría dormir entre Gab y Otoño y fingir que dormía con sus padres. Podrían acurrucarse y leer historias.