Capítulo 35: 35. Duda

"Cuando Noah se despertó la mañana siguiente, sintió claramente el aumento de la fuerza en su cuerpo.

Se había bañado antes de ir a dormir para lavarse la suciedad que su cuerpo secretaba durante el avance de rango, y ahora estaba de pie en su habitación, percibiendo atentamente cualquier cambio que pudiera sentir.

Lo más inmediato fue que sus músculos aumentaron de tamaño y estaban más definidos, no había una pulgada de grasa en ellos, lo que daba a la figura de Noah una apariencia esbelta y robusta a pesar de que todavía era bastante bajo.

Sin embargo, los cambios más significativos ocurrieron dentro de su cuerpo.

Los siete puntos de acupuntura en su espalda estaban absorbiendo «aliento» a una velocidad al menos dos veces mayor que la que tenían en el ciclo anterior.

La cantidad que su cuerpo estaba reteniendo ya había aumentado tres veces, ¡y su calidad parecía mayor!

—Con este monto, puedo lanzar ataques a plena fuerza al menos seis veces antes de quedarme sin "Aliento"... y eso sin contar con la nueva velocidad en la que estoy recuperándolo, ¡puede que hasta tenga energía para otro ataque cuando se usen los otros seis y todavía no ha terminado el cuarto ciclo!

El recién descubierto poder estaba haciendo que Noah se sintiera ansioso por entrenar con su Maestro, así que se apresuró a ponerse una túnica blanca y se preparó para salir de la habitación antes de que un pensamiento detuviera sus pasos.

—Tengo que limpiar la sala de torturas primero.

...

¡CLANG!

—El sonido de las espadas chocando resonó en una habitación del edificio de guardias.

Noah estaba luchando contra Guillermo con decisión y resolución mientras se acostumbraba a su cuerpo.

Hacía tiempo que a Guillermo tuvo que dejar el palo de madera y usar una espada real para bloquear los ataques de Noah.

Sin embargo, Noah nunca pudo superar la defensa de su Maestro, Guillermo simplemente bloquearía cualquier ataque dirigido hacia él mientras comentaba sobre su ejecución.

Pero la felicidad por la mejora de su cuerpo no se encontraba en la expresión de Noah, que solo exudaba frialdad y concentración.

Se había encontrado con su madre antes de ir a la sesión de entrenamiento y se sintió desolado al ver un gran moretón en su cara, justo debajo del ojo izquierdo.

Una especie de presión se había formado en su mente, apurándolo a mejorar más rápido antes de que sucediera algo irreversible.

Guillermo notó el estado mental de su discípulo y aumentó las apuestas del entrenamiento como una forma de respeto a su determinación.

Solo cuando Noah estaba respirando pesadamente y sudando profusamente su Maestro decidió detener el entrenamiento y sentarse en el suelo para discutir con él.

Noah se sentó de rodillas frente a él y organizó las preguntas que quería hacer.

—Entonces, ¿cómo es un cuerpo de rango 2? —Guillermo inició la conversación.

—¡Es realmente sorprendente! Mi fuerza y velocidad aumentaron a un nivel absurdo. Creo que ahora he cruzado completamente los límites de una bestia mágica de rango 3.

Guillermo asintió. Sabía que cada avance en rango comportaba un aumento repentino de fuerza y que cuanto mayor era el nivel del rango, mayor sería la diferencia con el nivel anterior.

—Maestro, ¿todos los cultivadores son idiotas? —Noah eligió su primera pregunta."

Guillermo se sorprendió por la pregunta y no pudo evitar preguntar por su significado.

—¿Qué quieres decir?

—Bueno, en la misión contra Orson, me di cuenta de que los cultivadores tienen... bueno... características peculiares en su personalidad.

Guillermo al principio estaba confundido, pero luego se dio cuenta de algo al mirar la compleja expresión de su discípulo y se irritó.

—¿Tú, el chico que a la edad de ocho años estafó a los guardias a cambio de técnicas, el chico que en cuatro años no hizo nada más que entrenar y pelear, el chico que no puede pensar en nada más que en el cultivo todo el día, estás diciendo que los cultivadores son peculiares?

Noah pareció desconcertado por estas palabras, pero solo puso una ligera sonrisa en su cara como respuesta.

Guillermo sacudió la cabeza y continuó.

—No es el proceso de cultivo lo que causa estas peculiaridades. Más bien, una persona necesita esas peculiaridades para seguir buscando poder. Solo una personalidad fuerte puede continuar en este largo camino sin ser conmovida por las muchas dificultades que encontrará.

Noah se iluminó.

Los métodos de nutrición corporal requerían una constante meditación y una gran paciencia para ser entrenados, y esas eran las técnicas más sencillas para practicar.

La mayoría de las personas simplemente se aburrirían o se cansarían de esos métodos, no es de extrañar que no pudieran buscar poderes superiores.

¿Quién estaría dispuesto a practicar todos los días en un arte marcial hasta que su cuerpo estuviera agotado? ¿Quién podría pasar horas mirando una runa que causaría dolor y agotamiento?

¡Solo la gente de fuerte voluntad! Y generalmente tenían algunas peculiaridades en ellos que no estaban dispuestos a abandonar, como la terquedad de Noah en su búsqueda de poder o la actitud despreocupada de Sandy.

—Creo que ahora entiendo. Hay otra cosa, sin embargo.

Noah estaba a punto de preguntar sobre la academia en la ciudad Real, pero luego una duda cruzó su mente.

Se contuvo de pronunciar la última parte de la frase y cambió su tema en el último momento.

—¿Puedo... puedo echar un vistazo a la información sobre los cultivadores en este país? Ya sabes, el conocimiento sobre este tema está bastante oculto, y ni siquiera sabría dónde buscarlo.

Guillermo estaba asombrado, pero luego asintió varias veces con una sonrisa radiante en su rostro.

—¡Finalmente quieres saber más sobre la historia de este país! No te preocupes, traeré un libro del círculo interior en nuestra próxima cita. ¡Pensar que viviría hasta que me preguntaras algo que no tiene que ver con el entrenamiento!

Noah tenía una sonrisa culpable en su rostro, y solo después de dejar la habitación pudo relajarse finalmente.

«Casi cometo un error. Sé que el Maestro se preocupa por mí, pero ¿qué pasaría si entendiera que quiero dejar la familia? ¿Me ayudaría o me castigaría? Para estar seguro, es mejor no revelar nada con él hasta que se complete la Forja de los Siete Infiernos. Además, realmente no sé cómo llegar a la ciudad Real».

Noah regresó a su habitación mientras meditaba profundamente.

No le gustaba realmente ocultar cosas a Guillermo ya que él le había ayudado tanto, pero su futuro venía primero.

No podía aceptar ser un simple guardia en su vida.

Quería ser libre de surcar el cielo sin que nadie tuviera el poder de obstruirlo, y para hacer eso, necesitaba un poder que no podía encontrar quedándose en la mansión.

—Parece que está en mi naturaleza decepcionar a los que me aman. Lo siento, Maestro, pero no hay ninguna posibilidad de que simplemente acepte mi estatus como mi destino. Espero que puedas entenderlo.

Por costumbre, cogió sus sables y practicó.

El «Aliento» en su cuerpo se había reabastecido en un cuarto desde que había terminado la pelea.

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