Kerry echó un vistazo. —¿No lo puedes ver? ¿No es esto una pintura?
Francis suspiró. —Es tan pequeña y harapienta; no creo que valga mucho. ¡La familia Harris es demasiado tacaña!
—No digas tonterías. Es importante regalarse cosas entre sí —Kerry suspiró.
Francis era el socio arreglado por su familia. No tenía otras habilidades, pero era bastante esnob.
—Kerry, no estoy tratando de darte lecciones, pero en el futuro no interactúes demasiado con personas como ellas. Los dos solo nos dieron esta pequeña pintura, y él es incluso el joven maestro de alguna corporación ...
Kerry tomó una respiración profunda. —Francis, este es mi hotel. Es mi libertad invitar a quien yo quiera!
Cuando Francis escuchó sus palabras, su expresión se volvió fea en un instante. —Kerry, ¿qué quieres decir? No olvides que cuando nos comprometimos, tu familia ya estaba en bancarrota. ¡Gran parte de la razón por la que pudiste abrir este hotel se debió a mi padre!