—Todo el mundo puede ver cuánta paciencia he tenido con la señorita Hua —dijo Lila a los medios mientras estaba sentada en su silla de ruedas—. Ha pasado mucho tiempo desde el momento en que nos vimos por primera vez y estoy segura de que los medios han visto todas las cosas que ella me hizo durante este tiempo. Trató de inculparme por cortarla, afirmó que mi hijo por nacer no estaba bien, apareció en mi casa múltiples veces para insultarme, creó rumores de que Joel y yo estábamos engañando y ayer, drogó mi sopa. Cada incidente me ha helado la espalda.
—Durante mi embarazo, he vivido por el principio de dar un buen ejemplo frente a mi hijo, así que he decidido no manejar los asuntos en público. Pero, a cambio, Wendy lo ha tomado como una oportunidad para seguir probando sus límites.
—Sin embargo, la tolerancia tiene sus límites, especialmente cuando alguien intenta lastimar a mi hijo y al de Mason.