Mientras Sunny caminaba hacia el siguiente recinto, tuvo unos segundos para pensar.
Lo primero que se dio cuenta fue que, a pesar de que el Hechizo permanecía en silencio, de hecho había recibido los fragmentos de sombra de los tres lobos temibles. La sensación de que sus núcleos, y así su cuerpo, se fortalecían un poco estaba ahí, aunque era difícil percibir el minúsculo cambio en todo el caos.
—Extraño… todo esto es tan extraño…
Su conexión con el Hechizo parecía haber desaparecido, cortada por el collar de acero en su cuello, pero no todos sus poderes desaparecieron. Sunny no podía acceder a su Mar de Alma y convocar Memorias o runas, pero aún poseía la habilidad de absorber fragmentos. También podía ordenar a sus sombras que aumentaran su cuerpo, así como usar el Paso de Sombra... aunque su alcance parecía estar limitado por las paredes de la arena.
¿Qué significaba todo eso?