"Ninguna discusión sobre el crucero de batalla terran está completa sin mencionar el legendario cañón Yamato, un arma de plasma devastadora con suficiente potencia de fuego para diezmar ciudades. Montado en la proa del barco, el gran cañón extrae su intenso poder del núcleo de energía del barco y luego usa un intenso campo magnético para enfocar una explosión nuclear controlada en un haz cohesivo de energía. El cañón es tan masivo que requiere su propio generador de conversión y una estación de control de fuego dedicada tripulada por casi 100 especialistas en artillería".
Extracto del Manual de Combate Naval de la Federación Terran.
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Sistema Britania
Oxford IX.
Órbita alta.
Nave Nodriza Vanguardia del Amanecer.
Año 585 M68
2 de Noviembre
"¡Lanza de Plasma J sobrecalentada!. Escudos de estribor al 15%" gritó uno de los tripulantes del puente de mando de la Nave Nodriza de la Armada Dorada de la Guardia del Solsticio, nave personal del Pretoriano Draconus Abyss: Lord Kamier Akimara Draconus.
"Redirigir energía de los generadores de inercia secundarios al armamento de estribor" ordenó Kamier desde su trono de mando en el puente de mando, una pantalla de luz dura se mostraba frente a él y usaba su cordón neuronal para revisar los daños que su nave personal recibía del armamento Covenant a la vez que movía sus fuerzas de la Armada Dorada para contrarrestar a las fuerzas enemigas.
Gaia obedeció la orden de su hermano Pretoriano, redirigiendo energía de los generadores de inercia secundarios de la mothership a las armas en el lado de estribor. La potencia de fuego aumentó tres veces en forma de lanzas de plasma y lanzas solares que desataron sobre un acorazado Covenant cercano.
Los escudos del navío brillaban ante el incesante bombardeo de la enorme nave dorada. Devolvió el fuego en forma de dos haces de plasma pesados y torpedos super pesados que impactaron en gran medida a los escudos de energía hiperavanzados de la nave Templaria.
Luego de unos minutos de intercambiar fuego, el acorazado sería destruido por un disparo certero del Haz Purificador de la mothership de Kamier. El Acorazado explotaría en una enorme bola de fuego, matando a millones de Covenant más al fuego de los Templarios en esta guerra genocida.
Kamier observo como la situación de la batalla estaba del lado de los Terranos mientras que el resto de las fuerzas Covenant se estaban perdiendo antes las fuerzas combinadas del Draconus Abyss, los Blood Angels y los Salamanders que defendían este mundo de las fuerzas Covenant.
Equipos de Pretorianos y otros Terranos se formaron como forma de Filos precisos en contra de ralentizar el avance del enemigo por la Franja Sur de la galaxia en el Segmentum Pegasus donde estaba ubicado muchos mundos de diferentes poderes. Como el Imperio Britanico, el Imperio Francés, la Gran República Estadounidense y la Federación Rusa.
Los Filos Solares de los Pretorianos se dividieron por diferentes Sectores(200 años luz) y enfrentaron a las flotas del Covenant que avanzaban quemando cualquier mundo a su paso que tuviera vida humana, los cuales eran todos en el Segmentum Pegasus.
Kamier tuvo la suerte de que le tocara con su hermano Cadmon Sanguinius y Tiberius Vulkan. Ambos eran conocidos por su amabilidad hacia con las personas, su trabajo en conjunto les ha permitido salvar incontables millones de los proyectores de plasma del Covenant desde el inicio de la guerra hace 37 años atrás.
En el año 548 del 68 Milenio Terrano la paz que tanto había durado en el espacio Terran durante más de diez mil años desde el final de la guerra de Exterminio contra los Aschen, se había llegado a su fin.
Harvest, ese nombre quedaría grabado en las mentes de todos los Terranos cuando las fuerzas del Covenant daban inicio a la actual guerra y más grande que los Terran que han enfrentado hasta el momento en su historia.
Los Jiralhanae siguiendo su fanatismo religioso y salvaje atacaron aquel mundo de 3000 mil millones de personas en la periferia del espacio humano al borde de la galaxia.
En respuesta al ataque, el Alto Mando militar mandó una fuerza expedicionaria dirigida por un Crucero Super Pesado de la clase Valiant por el mismo Almirante de Flota Preston J. Cole hizo retroceder a las fuerzas enemigas dos veces en Harvest.
Durante las cinco años la campaña de Cole en Harvest en contra de los alienígenas provocó bajas altas, haciendo que un Inquisidor Sangheili fuera enviado a hacerle frente pero incluso él no pudo contra el genio táctico del Almirante humano que enfrentó a los Aschen durante las Guerras Biológicas.
Kamier recordó su primer despliegue como parte del Programa Pretoriano en Harvest para enfrentar a las fuerzas del Covenant, cada guerrero humano con sus guerreros personales y sus fuerzas Astartes que habían iniciado su primer despliegue con sus Padres Genéticos.
Esa campaña fue el conflicto que daría inicio a la leyenda de los Pretorianos como parte de los "Guardianes" de parte del Covenant. Y su temor en el campo de batalla por las fuerzas enemigas cuando descienden como los protectores de la humanidad en los planetas atacados por el enemigo.
"Señor, tenemos una transmisión entrante desde la Lágrima Roja, es Lord Cadmon" dijo un tripulante que manejaba el conjunto de comunicaciones cuánticas avanzadas de la Mothership.
"Pasala a mi pantalla" ordenó Kamier mientras un Transportistas de Asalto enemigo explotaba por una combinaciòn de Nova Canons y Torpedos de parte de fuerzas de la Armada Terrana que estaban en el Filo que componía Kamier con sus dos hermanos Pretorianos.
La imagen de la pantalla cambiará para mostrar el rostro angelical de su hermano Pretoriano, el Lord de Baal y la hueste de sangre de las Alas Carmesis. Sus ojos cafés y su pelo rubio lo habían vuelto muy famoso entre la gente de Baal, su mundo natal; así como de cualquiera que se salvase en esta larga campaña de desgaste y prevención en contra del Covenant en el Segmentum Pegaso.
"Kamier, hemos terminado en la superficie. El enemigo ha sido derrotado y lo último de la población está en nuestras naves. Solo queda la flota enemiga en órbita" informó el Arcángel Pretoriano a su hermano mientras el puente detrás suyo se tambaleaba por el armamento enemigo.
"Comprendo. La última de las fuerzas enemigas en mi sector está por ser eliminada" respondió Kamier a su hermano.
La Armada Dorada y parte de la Sexta Flota Astarte Draconus Abyss se enfrentaban a las naves Covenant que estaban comandadas por dos Cruceros de Batalla pero el resto de la flota enemiga estaba siendo exterminada por los Terranos en conjunto.
Estrategias de Kamier y Argyc hicieron a los Covenant acorralados en una parte de la órbita alta de la colonia inglesa mientras la fuerza en la superficie fue aniquilada por completo por los Adeptus Astartes y el Ejército Terrano.
Luego de unos minutos, los restos chipostoreantes de las carcasas destrozadas de las naves enemigas eran todo lo que quedaba de toda la flota enemiga. La mothership de Kamier había recibido daño en múltiples partes, expulsando la atmósfera mientras los nanitos comenzaban a reparar el daño causado.
Revisando el daño de su nave personal, Kamier nota un bajado de potencia de los repulsores plasma en un cuatro por ciento de potencia de salida pero nada que los Huragok no pudieran reparar en poco tiempo.
Algunos emisores de escudos estaban sobrecargados y sus componentes cristalinos debían ser reemplazados, reduciendo la eficiencia del escudo al sesenta por ciento de su fuerza total, cosa que no le animaba mucho al Pretoriano pero se necesitaba mucho para que una sola mothership de la Armada Dorada cayera.
"¡Estaremos saltando una vez que las reparaciones estén completadas en mis naves!" explicó Kamier a su hermano mientras más informes de daños le eran pasados por Gaia.
Muchos de los navíos poseían daños graves en sus macroestructuras internas y algunos tubos de potencia estaban con fuga. Los equipos DC estaban parcheando las fugas mientras que reparaciones más extensas se llevarán durante el viaje de regreso a territorio controlado por los Terran.
"Veo en tus ojos que no te gusta abandonar este mundo al enemigo hermano. A mi tampoco me agrada pero tenemos que formar líneas de defensa más estables para repeler al enemigo y proteger a nuestra gente" explicó Sanguinius al ver la molestia de Kamier.
"Lo se bien Cadmon, y no discuto el plan de nuestro Maestro sobre la línea de defensa más estable. Es solo que ya llevamos casi cuatro décadas de guerra y aunque hemos infligido bajas inmensas al enemigo no parece que se terminara jamás de llegar a nuestra galaxia como hormigas" dijo su molestia Kamier a su hermano angelical.
Desde la llegada del Covenant a gran escala a la Vía Láctea. Se hizo del plan de anillos de defensa en todos los Segmentos, especialmente el Segmentum Solar que era donde estaban los sistemas centrales humanos y la misma Terra.
Ya por si el Segmentum Pegaso estaba bajo ataque constante de las fuerzas lideradas por los Fleet Masters Sangheili que arrasaban los mundos fortalezas Terranos por todo el Segmento por miles de años luz de distancias mientras flotas más pequeñas se encargaban acechar a los mundos entre los anillos de defensa.
Por eso los Filos fueron desplegados para luchar en contra de esas fuerzas más pequeñas mientras que más refuerzos llegaban desde el Segmentum Solar para apoyar las evacuaciones de cuatrillones de personas lejos del frente de batalla.
"Yo también siento lo que tu hermano, pero debemos ser fuertes para vencer al enemigo. Los enemigos genocidas que enfrentamos no se cansarán hasta que el último muro de Terra caiga, hasta que el último niño de su aliento de vida, solo hasta entonces su cruzada terminará. Nuestro propósito de supervivencia es un acto noble por nuestra raza mientras encabezamos el frente de la guerra" dijo Cadmon con su voz angelical.
Una sonrisa se formó en sus labios, siempre había oído que su hermano tenía el don para animar a las masas y no era para nada falso como lo acababa de presenciar ante sus ojos.
Ambos Pretorianos notaron como el buque insignia de los Salamandras y el buque personal de su hermano Tiberius Vulkan, el Flamewrought, aparecía desde la superficie del mundo que estaban por dejar atrás.
A cada Pretoriano se le dio la opción de escoger su buque insignia. Cadmon tomó como suyo un Acorazado de veinte y cuatro kilómetros de largo de la clase Amatus. Tiberius tomó el mando de un Acorazado de la clase Spirit of Fire de veinte y seis kilómetros de largo. Kamier en cambio fue una Mothership de la Armada Dorada Patrón Hércules, que tenía unos treinta y dos kilómetros de largo.
La Mothership podía llevar a los Portadores de doce kilómetros de largo que podían llevar a miles de Templarios y Avalonienses en su interior. Además de ser solo un punto cinco kilómetros más corto que un buque pesado Astarte de la Armada Draconus Abyss.
"Ordenar a las naves volver al Amanecer cuanto antes. Debemos partir cuando el último lote de tropas esté a bordo de la flota" dio sus órdenes a sus subordinados mientras oía por la pantalla como Cadmon daba órdenes similares a las suyas.
El Flamewrought se emparejó junto a los dos buques de los demás Pretorianos. Los tres hermanos más amables de entre los guardianes de la humanidad se alistaron con sus fuerzas correspondientes para dar el salto conjunto.
Unas horas después, todas las tropas y heridos estaban a bordo de las naves de la flota conjunta Pretoriana. En conjunto, los Drive Slipspace comenzaron a emanar energía para luego generar las grietas de once dimensiones familiares para los terranos y estos ingresar en ellas.
Mientras iban en ruta a la base más cercana del T.G.A, los tres Pretorianos charlaban amenamente entre ellos por un canal privado y altamente cifrado con los mejores encriptadores que la humanidad podía desarrollar en su historia. Solo pocos canales tenían las mismas medidas de seguridad y eran altas esferas militares y políticas en Terra, Marte o un mundo feudal.
Solo que en el transcurso de su partida hacia el territorio Terran más cercano, uno de los oficiales que maneja los sistemas de detección subespaciales para detectar perturbaciones que hiciera el viaje por el Slipspace difícil por algun fenomeno Disforme y ajustar en consecuencia con ayuda de la IA, detectó una transmisión que no coincide con nada de las transmisiones terranas en los canales de comunicaciones registrados.
Se parecían a históricas transmisiones de antigua tecnología que fue usada durante el 3M al 10M de la exploración espacial humana hace milenios atrás. Cuando el Sistema Sol había sido completamente colonizado, su expansión a los sistemas que forman el centro del corazón humano en el Segmentum Solar.
"Avisad al Pretoriano" ordenó un capitán a un subordinado, el cual asintió y se dirigió directamente hacia la sala de comunicaciones centrales de la Mothership.
Recorrió por los largos pasillos y cogió algunos ascensores para pasar por varias cubiertas hasta llegar a la respectiva sala que tenía a dos de los Templarios haciendo guardia en la puerta.
"Tengo que ver a Lord Kamier, ha sucedido algo que requiere su atención" apresuró el tripulante.
Ambos Templarios escanearon sus pensamientos y se dieron cuenta que en verdad decía la verdad. Le permitieron el acceso y al entrar pudo ver a Kamier en toda su gloria con su armadura y las representaciones de luz dura de sus dos hermanos Pretorianos. Ante la presencia de tres Guardianes de la humanidad, el hombre se arrodilló y habló en voz alta.
"Lamento interrumpirlo mi señor, pero hemos interceptado una llamada de socorro que no coincide con ninguna de nuestras actuales comunicaciones pero sí con antiguos canales que usamos hace milenios".
Al oír eso, los tres Pretorianos se preguntaban qué podría ser para que alguien usara tal antigua tecnología hoy en día en la galaxia. Las actuales comunicaciones eran capaces de llegar de un extremo al otro de la galaxia, incluso de otra galaxia si se lo proponen con la actual capacidad energética que los Terran poseen.
"Gaia, pasa la transmisión" ordenó a su hermana y esta obedeció la orden dada.
Una voz desconocida pero a la vez humana resonó por la sala de comunicaciones.
"Aquí la Comandante Eleonora Viltaria, estamos bajo ataque de una facción desconocida. Hemos perdido la mayoría de nuestras naves y estamos siendo abordados mientras hablo.¡Requerimos apoyo inmediato!".
Cadmon y Tiberius miraron a Kamier que este los miró de igual forma, los tres compartieron lo que necesitaban con la mirada. Kamier miró al tripulante arrodillado y le habló;" Levantado amigo mio, necesito que le digas a Artanis que cambie de rumbo. Iremos hacia el origen de esa señal de auxilio. Cualquier enemigo que está amenazando a esos humanos será convertido en cenizas".
El tripulante se había levantado y asintió a la orden de su líder, se fue corriendo de nueva cuenta esta vez al puente de mando en el centro de la estructura de la inmensa mothership donde estaba el Patriarca de los Templarios.
"Prepararemos a nuestras fuerzas para el ataque Kamier, que nuestros enemigos aprendan a no desafiar a los Terran" dijo Cadmon y cortó la comunicación seguido de Tiberius .
El Lord Draconus salió de la sala, tenía mucho que hacer para la siguiente pelea que se avecinaba en contra de las fuerzas enemigas que se encontraran.
*****
Eleonora se sujeto de su apoya brazos mientras su nave se tambaleaba ferozmente por los impactos de armamento energético altamente poderoso de las naves Ha'taks de la Alianza Luciana que se había topado.
Había estado en una misión de explorar esta galaxia desde su galaxia natal que era la Gran Nube de Magallanes. Le tomó semanas cruzar la distancia del Vacío Intergaláctico y llegar hasta esta nueva galaxia en busca de nuevos mundos que colonizar para la Triple Alianza Imperial( Imperio Balor, Imperio Rovia y el Imperio Salum) o más bien conocida como el Colectivo de Orión, donde seis mil sistemas eran unidos bajo la bandera de los tres grandes Imperios de la galaxia de Magallanes.
Cuando se topó con esta banda de piratas y mercenarios con tecnología Goa'uld mejorada, que tal vez para los Terranos era inferior pero para estos nuevos llegados era más avanzada y difícil de manejar. Ya la mitad de la flota que comandaba la hija de la Casa Viltaria estaba destruida o inutilizada, además que su nave insignia estaba siendo abordada por algunas naves que lograron adentrarse en los hangares del Acorazado de nueve kilómetros de largo.
Los defensores de la nave estaban luchando y logrando detener hasta cierto punto a los intrusos pero a un enorme precio en vidas se refería.
"¡Escudos de babor al 13 por ciento de fuerza!. Múltiples brechas en las secciones 14F a 18H" grito Limalisha sobre el humo del puente mientras los sistemas de depuración estaban a su máxima capacidad para retirarlo del lugar.
"El reactor de plasma tres está desconectado, hay una fuga de refrigerante. El Jefe dice que no podrá ponerlo en línea a menos que nos retiremos de la batalla" dijo un segundo oficial del puente.
"Dile que haga lo que pueda con los demás, no podemos retirarnos ahora" gritó Eleonora mientras su Acorazado de la clase Hammond se tambaleaba por los múltiples impactos.
"Apuntad el Cañón principal a la nave enemiga más cercana" ordenó Eleonora mirando la pantalla frente a ella mientras las fuerzas rojas continuaban eliminando sus destrozadas fuerzas en verde.
El enorme navío para los estándares del Colectivo se alineó con un Ha'tak y comenzó a reunir energía azul en la punta de proa. Usando el uso de la más avanzada tecnología disponible, el Cañón Yamato de clase Apocalypse fue desarrollado como la clase más nueva del cañón de plasma principal del Colectivo como tal.
Un rayo azul salió disparado a gran velocidad hacia el Ha'tak, donde al impactar con el escudo este parpadeo por unos momentos antes de dejarse atravesar por el ataque de plasma que lo hizo estallar en miles de trozos al espacio.
Al ver el éxito de su mejor arma destruir a una de las naves enemigas, el resto de naves capitales usaron sus cañones Yamato para destruir un buen número de buques enemigos pero lamentablemente aún quedaban más naves enemigas que los superan e impedían su paso para dar un salto lejos de allí.
La flota de Eleonora contaba con cuatrocientos ochenta navíos originalmente pero ese número se fue reduciendo cada vez más mientras las horas de combate intenso contra la Alianza Luciana fueron pasando factura a sus fuerzas.
Ahora solo con menos de la mitad de ese número a su disposición, Eleonora esperaba que con los Acorazados y Cruceros de Batalla que aún le quedaban fueran suficientes para poder abrir una brecha en las líneas enemigas y poder huir de vuelta.
'¿Qué podemos hacer para sobrevivir un día más?' pensó en su corazón Eleonora mientras veía mas y mas de sus camaradas morir por este cruel enemigo.
Pero no tuvo que esperar más un milagro porque este había llegado en forma de los Reclamadores de la Quinta Raza.
Grieta desliespaciales gigantescas aparecieron detrás de la flota Luciana, saliendo los navíos líderes de cada Ejército Clon respectivo y desataron su armamento en contra de las fuerzas enemigas.
La mothership Avaloniense atacó a la mothership clase Apophis con sus lanzas solares que hicieron mella en el escudo principal y atravesaron al escudo secundario que funcionaba a paralelo del principal. Causando tensión por la potencia del reactor solar que alimentaba la enorme nave dorada.
Los dos navíos de los Pretorianos enfocaron su fuego en los navíos mejorados por Anubis,Ha'taks superiores a lo normal pero no eran mucho problema para la actual tecnología Terrana. Como se demostraba por las explosiones consecutivas de numerosos buques de guerra enemigos ante los proyectiles y armas energéticas superiores de los Reclamadores del Manto de Responsabilidad.
Todos los miembros del Colectivo miraban conmocionados como las naves Terranas se fumaban a las naves enemigas como si fueran meras moscas. Los Ha'taks fueron destruidos por los avanzados armamentos de los Terran, Eleonora ordenó una andada Yamato, que destruyó un tercio del resto de naves enemigas. Permitiendo una línea de escape que no fue desaprovechada por Eleonora que dirigió la carga con su nave insignia que tiene mejor blindaje y escudos más poderosos, cosa que fue aprovechada para evitar más daño al resto de la flota.
Mientras su nave recibe una gran cantidad de daño por las armas de plasma de los navíos Ha'taks Anubis impactaron en el escudo pero aún se mantenía firme aún con todo el castigo que estaba recibiendo.
Pero no tuvo que soportar más cuando un agujero negro fue desatado en medio de la formación enemiga, la fuerte gravedad desgarro la estructura de los navios enemigos y comenzo a succionarlos hacia su interior.
La Mothership había desatado su ayuda con los hermanos humanos de otra galaxia, Kamier noto como el "Acorazado" cubría la retirada de sus demás naves restantes. Había ordenado usar la tecnología de teletransporte de su nave para salvar a los sobrevivientes entre el campo de escombros. Mientras que las fuerzas Terranas se encargaban del resto de la fuerza de la Alianza Luciana, el T.G.A no tenía piedad con las fuerzas que han causado tanto dolor y sufrimiento a incontables mundos por todo el Segmentum Pegaso y el Segmentum Atlantia.
Aun con la guerra en curso en contra del Covenant proveniente de Andrómeda, los grupos de Inquisidores y otras organizaciones se encargaron de eliminar a los remanentes de la Alianza Luciana, sistema por sistema para evitar que fuera una espina mientras los Terran se ocupaban de enfrentar al enemigo mayor con toda su atención.
"Inhabilitar a la mothership enemiga, quiero a su líder capturado y en el calabozo para ayer" ordenó Kamier a sus subalternos.
Su ahijado Samuel que era el lider de la Novena Cohorte de su Legión personal, asintió y se fue a cumplir con la orden de su padrino, siendo apoyado con algunos miembros de los Marines con una servoarmadura CMC de Segunda Generación MK II a bordo de las naves de apoyo a la mothership de Kamier.
Un Alto Templario se preparó con sus subordinados para ayudar en caso de que los piratas tuvieran algún sorpresa desagradable para los Terranos, Kamier había hecho una promesa para su hermano que estaba en otro lugar de la galaxia de cuidar a su hijo y así lo haría.
En solo media hora el líder enemigo estaba bajo custodia de los Terran y en el calabozo del Vanguardia del Amanecer. Una vez las fuerzas enemigas fueron destruidas por las fuerzas del Filo Solar, se le permitió al Acorazado desconocido atracar en la Mothership, su enorme tamaño permite el atraque fácil de la nave de otra galaxia en una de sus alas, tenían que discutir un primer encuentro entre ambas civilizaciones humanas en estos tiempos caóticos.
Eleonora se movió por los pasillos de la enorme nave dorada, se sorprendió por el tamaño del buque de uno de sus salvadores, obviamente su tecnología era mucho más avanzada que la suya y poseían la capacidad de construir buques más grandes que incluso de los Acorazados del Colectivo podían construir y mantener. Sus recursos debían ser inmensos y además mantener una flota enorme debía significar su economía y dar un poco de contexto de su territorio.
Limalisha y unos pocos guardias de honor estaban escoltandola hacia una sala donde estaban sus anfitriones que la convocaron para el Primer Contacto entre ambas civilizaciones humanas.
Al llegar a la sala en concreto, notaron a los diversos guardias de diferentes diseños de sus armaduras y logos que los representaban. Sus auras irradian experiencia y poder, haciéndole saber que las personas eran bastante importantes para tener semejantes guardias como sus escoltas.
Al acercarse con su uniforme de gala puesto, noto las miradas de los guardias sobre su persona y los demás que la acompañaban. Trago en seco y las puertas fueron abiertas para dejarla pasar a la sala de adentro.
Al entrar noto en seguida a los tres humanos con armaduras parecidas pero de diferente contextura y diseño, cada uno tenia un esquema de color diferente. Además que el neutronio/trinium que estaban hechas brillaba ante las luces, los tres Pretorianos dejaron su amena charla para ver a Eleonora y su séquito entrar en la sala de reuniones personal de Kamier.
"Bienvenidos al Vanguardia del Amanecer. Soy Kamier Akimara Draconus, ellos son mis hermanos Cadmon Sanguinius y Tiberius Vulkan. Somos Pretorianos de la Gran Alianza Terrana" habló primero Kamier a modo de presentación.
Ambos Pretorianos dieron sonrisas conformes a los invitados de otra galaxia, los cuales sintieron parte de su estrés y angustia al irse por las sonrisas de ambos Guardianes de la Humanidad.
"Es un placer Sir Kamier, soy Eleonora Viltaria. Comandante de los Guerreros del Huracán y jefa de la 29th flota expedicionaria del Colectivo de Orión" saludo Eleonora presentándose a los tres Lords de la Humanidad.
Todos se sentaron en sus sillas, Cadmon fue el primer en hablar mirando a la Viltaria;"No es que no nos sorprenda ver a otros humanos en esta galaxia Señorita Eleonora pero,¿como se encontraron con la Alianza Luciana?".
Eleonora sabía que preguntarían eso así que respondió con la verdad." Fuimos mandados a esta galaxia para establecer colonias en un principio, en una de nuestras patrullas en busca de nuevos sistemas nos topamos con esa flota que destruyeron".
Intercambiando información por su enlace neuronal en solo milisegundos, los tres Pretorianos se dieron cuenta del alcance del poder de este nuevo conglomerado humano procedente de otra galaxia. Hasta ahora se creía que solo la Vía Láctea era donde los humanos podían habitar, pero he aquí enfrente suyo a otros humanos de otra galaxia.
"¡Puedo suponer que su Conglomerado es una unión de varios poderes o no!" intuyo Kamier mirando a Eleonora, a la vez que esta asintió en confirmación a las palabras del Próximo Lord Akimara.
Mientras Kamier reflexionaba acerca de las consecuencias políticas Vulkan miraba las armas y armaduras de los Guardias de Eleonora detrás suyo. Dándose cuenta rápidamente de los materiales usados para su fabricación, asintió para sí mismo el Pretoriano y Lord de Nocturne, hogar de los Salamandras, al darse cuenta que esta joven humanidad separada de ellos los Terranos, estaban en el Segundo nivel de la escala tecnológica usada por los Terran para medir el alcance tecnológico.
"Están en el segundo nivel, yo diría que en 2.6 o 2.5 a variar un poco pero están bastante avanzados para una civilización humana relativamente joven" dijo Vulkan en el cordón neuronal.
"Estoy de acuerdo contigo hermano. Esta joven tribu no ha visto aún la amenaza de una raza Xeno hostil, pero si siguen explorando se encontraran contra el Covenant tarde o temprano" Sanguinius dio sus preocupaciones a los dos hermanos a su lado.
"Será necesario avisar de esto al Sumo Canciller. Nuestro regreso a la hora acordada ya pasó, llevar a estos nuevos humanos a conocer uno de nuestros mundos debe decidirse por el alto mando" Kamier replicó de la verdad que sus hermanos no conciben en el momento.
Como hijo de dos de las hechiceras más poderosas de todo el vasto territorio Terrano, Kamier era muy afinado con la política por sus dos madres y su abuela Gabriel. Quien le educó para ser el próximo Lord Akimara, su Casa de origen que era un alto noble en la política terrana.
"Como siempre hablas con la verdad hermano. Ya envié un comunicado al Gran Mariscal sobre nuestro retraso. Aun espero respuesta, supongo que debe estar discutiendo las cosas con el Sumo Canciller" admitió Cadmon algo avergonzado a su hermano dracónico.
"Solo esperemos por los Precursores que los fuegos de la guerra que libramos no se extiendan a nuestros nuevos conocidos. El Covenant no se conformará hasta que el último humano sea exterminado de la faz del Universo mismo"sombríamente dijo Vulkan por el enlace.
Los otros dos asintieron en el enlace, sabían bien de esa verdad cruel desde los primeros años de la guerra que han librado desde hace casi cuatro décadas.
Ajena a todo eso, Eleonora se quedó mirando furtivamente a los guardias de los Pretorianos, más a los Templarios que eran los más llamativos por sus armaduras de exterminador doradas y yelmos que escondidas sus ojos dorados con un brillo antinatural que poseían en su mirada hacia todos ellos.
Eso le parecía fascinante, cómo lograron eso en un humano normal a un soldado excepcional a los ojos de Eleonora. Los poderes psíquicos no eran extraños en su galaxia natal, pero eran los psíquicos eran muy controlados por el Colectivo y entrenados para diferentes roles, incluyendo ser navegantes para corregir las corrientes con ayuda de la IA.
Ayudando en detectar las rutas cambiantes de la disformidad mientras el campo Geller ayudaban en evitar a las energía caóticas del Inmaterium. La ayuda de IA había sido fundamental para mantener los motores Warp de sus naves en evitar que la disformidad los sacara del hiperespacio.
Terminando su charla mental, los tres Pretorianos miraron a Eleonora que los miró atentamente, esperando sus palabras.
"Hemos hablado, y le ofrecemos seguirnos para encontrarnos con nuestro maestro para mejores relaciones entre nuestros dos pueblos" dijo Cadmon Sanguinius mirando a Eleonora.
Eleonora miró a Limalisha, que compartió su angustia por conocer al líder mayor en la escala de mando de los Terran.
"Deberé hablar con mis superiores para aceptar antes su oferta de conocer a su maestro" admitió Eleonora a modo de disculpa a los Tres Pretorianos.
Los tres comprendían las cosas, sabiendo bien cómo era la cadena de mando militar y primero su invitada necesitaría hablar con su superior en la galaxia.
Mientras Eleonora salió para hablar con su superior, Kamier recibe un mensaje urgente desde el Comando del Segmento Pegaso que indicaba que era del mismísimo Maestro de los Pretorianos desde el Segmentum Solar.
++ 2 de Noviembre, 585.M68.
Pretoriano Kamier Akimara Draconus
Autorización de traslado; Solicitud aprobada de visita al mundo capital.
Escolta de la Comandante Eleonora Viltaria aprobada.
INC: 108-O
Gran Mariscal del Ejército Terrano ++.
Kamier miró varias veces el mensaje, Sanguinius fue quien pidió una escolta no el. Además que en su llevar a la recién conocida señorita Viltaria a Terra misma le parecía algo exagerado pero era una orden de su mismo maestro y demás hermanos así que lo único que podía hacer era resignarse.
"Acabo de recibir un mensaje de nuestro Maestro,nos ha ordenado llevar a Eleonora a Terra. Y antes que pregunten su identificación ha sido confirmada por Gaia varias veces" dijo Kamier a sus dos hermanos mientras compartía sus expresiones de desconcierto.
Ir al mundo Capital de los Terran ahora en esta guerra en curso para los Pretorianos no era menos que una inmensa sorpresa, solamente una convocatoria del Gran Mariscal, el Señor de los Almirantes o del Sumo Canciller. Que ahora su maestro los llamara a ellos tres para escoltar a la Comandante era obra de que un nuevo futuro podría ser para su gente.
Eleonora regresó a la sala cuando terminó de hablar con sus superiores en Magallanes."Mis superiores me han dado permiso para ir con ustedes".
Al escuchar esas palabras, los tres Pretorianos se miraron antes de que Vulkan fuera quien hablara a la joven y hermosa comandante." Es bueno escuchar eso Comandante, por eso quisiéramos ofrecerle de escoltarla a nuestra capital".
Eleonora asintió algo sorprendida de que esto ocurriera tan pronto, pero suponía que el alto mando de los Terran quería hablar acerca tan pronto de las relaciones entre ambos pueblos humanos perdidos.
"Antes de partir, una compañera y amiga mía viene hacia aquí. Quisiera que ella nos acompañara a su mundo capital" pidió Eleonora a los Pretorianos.
Los tres hermanos se vieron y asintieron entre ellos, eras una solicitud simple y no tenía ninguna implicación que otra representante los acompañara. Aceptando su solicitud, Eleonora sonrió y se retiró a su nave seguida de sus escoltas.
Cadmon y Tiberius se retiraron a sus respectivos buques de mando. Una hora después llegó otra flota dirigida por un Acorazado del mismo diseño que el buque de mando de Eleonora, un buque acorazado de la subclase Trident.
El buque era comandado por Asuna Yuuki, una Caballera Imperial de la Casa Yuuki, quien era una buena amiga de Eleonora desde sus tiempos como cadetes en la Academia Imperial del Balor Imperium. Se atraco en la mothership y todos dieron juntos el salto al Slipspace conjuntamente con las fuerzas Terran hacia Terra misma.
El salto conjunto de Slipspace permite llevar a más de una nave mientras más grande sea una nave en el tránsito hacia el Segmentum Solar, y al mismo sistema Solar en solo unas pocas horas por los avanzados motores de deformación de los Terran.
Basados de un Guardián Forerunner recuperado de una colonia humana antigua, sus motores fueron sometidos a ingeniería inversa y permite una velocidad mucho mayor que los antiguos motores desliespaciales que podrían cruzar decenas de miles de años por dia.
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El viaje hacia el Sistema Solar fue tranquilo por la ruta trazada desde Terra hacia el borde la galaxia, cosa que había servido para el despliegue rápido de fuerzas de socorro contra las incursiones del Covenant en contra del sur galáctico.
Una vez pasado el sistema de entrada de Beta-Garmon que era una de las puertas de acceso a Sol, con Epsilon Eridani, Alpha Centauri, Próxima Centauri y otros cuantos sistemas para proteger el sistema natal de los Terranos en su conjunto.
Al llegar al punto de entrada al sistema solar, las fuerzas Terranas les pidieron sus identificaciones y fueron enviados.Una vez confirmados ser quienes eran, el Filo Solar se movió directamente por las defensas del Battlefleet Solar hacia el interior del sistema.
Pasando por las lunas de Saturno y sus numerosos astilleros dieron vista a los humanos del Colectivo la muestra de la construcción de los Terranos mientras que numerosos buques de guerra eran construidos en los mega astilleros en órbita del gigante gaseoso.
Siguiendo a Júpiter donde había plataformas de defensa inmensas de 60km de largo que tenían numerosas armas y defensas que dejarían pálidos al Almirante más brillante del Colectivo de Orión.
El campo de asteroides vio numerosas fortalezas estelares que dejaron conmocionados a todos los humanos de otra galaxia.
Al pasar al centro del sistema natal de la humanidad se vio al mundo de Marte que poseía al anillo de hierro que flotaba alrededor del mundo gemelo de Terra y donde se produce la mayoría de la Battlefleet Solar y donde era el centro de la construcción de numerosos y poderosos buques de guerra humanos.
También los sensores de las naves de la otra humanidad habían registrado los agujeros negros alrededor del sistema solar, los anillos y esferas de Dyson, asi como otros habitats artificiales construidos. Así como los otros sistemas cercanos a Sol.
"Impresionante" dijo Asuna al contemplar el alcance de la tecnología terrana en todo su esplendor al ver por los escaneos de todas las naves que habían venido con ellas dos a Sol.
"No podría estar más de acuerdo contigo Asuna" dijo Eleonora mirando a un anillo orbitando una estrella de clase G.
Sus primos humanos en verdad estaban mucho más allá de su actual alcance tecnológico, con la capacidad de construir megaestructuras como anillos o esferas de Dyson que se creían actualmente fuera del alcance de las capacidades del Colectivo de Orión.
Al acercarse al perímetro lunar,notaron al inmenso anillo de defensa y las innumerables estaciones de defensa en órbita de Terra, así como a la enorme Phalanx que era el buque insignia del Pretoriano Lord Helios Dorn de los Puños Imperiales y los Templarios Negros.
El enorme buque que media 900km de largo flotaba sobre Terra como un guardián silencioso en el frío espacio. Los tres Pretorianos contemplaron a la inmensa nave de su hermano predilecto, sabían que su hermano casi siempre permanecía en Sol para la defensa del sistema por orden del Gran Mariscal mismo en defensa del eje de todo el espacio Terrano.
Pero con la actual guerra siendo librada en la galaxia, estaba siendo desplegado en múltiples campañas para defender mundos por todo el Segmentum Atlantia donde el Covenant poseía sus inmensos Superportaaviones de 270km de largo y asaltaba a numerosos mundos fortalezas establecidos desde los primeros años del dominio humano sobre la galaxia.
"Señor, tenemos un permiso para la teletransportación al puerto espacial del Sanctum Imperialis" dijo un oficial del puente de la mothership a Kamier que solo abrió los ojos al contemplar una vez mas la belleza de la Ecumeonopolis que era Terra pero aun contando con algunos de sus océanos y verdes prados por la superficie.
Podía sentir la presencia psiónica del Canciller en la superficie junto a su hermano Helios. Suspiro de melancolía, cuando fue la última vez que todos los Pretorianos se habían visto desde la Liberación de Harvest y su separación para defender las fronteras de la humanidad de las fuerzas Xeno Genocidas contra su gente.
Se levanta de su trono y sale del puente de mando para irse al lugar de transporte de la nave que estaba cerca del puente a solo un kilómetro de camino.
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Sistema Solar
Terra
Puerto espacial del Sanctum Imperialis.
Año 585 M68
3 de Noviembre
En la plataforma designada,los rayos de teletransporte mostraron a las míticas figuras de los Tres Pretorianos con sus guardias de honor respectivos, seguidos por las dos damas de otra galaxia que bajaron de la mothership de donde vinieron en todo el viaje hacia Terra.
Una guardia de soldados de la Guardia Real, soldados similares a los Astartes pero más fuertes y poderosos que ellos pero aun debajo de los Pretorianos saludaron al grupo, guiandolos dentro de la residencia personal del mismo Canciller Terrano.
En el camino hacia la residencia de su Excelencia, las dos jóvenes no pudieron evitar notar las estatuas y pinturas de guerras y héroes pasados de los Terranos. Todas daban un toque de magnificencia a los pasillos del interior del Sanctum Imperialis que estaban vacíos como de costumbre, solo el personal de más alto cargo del gobierno podía pasar por estos pasillos además del personal que servía al mismo Canciller para mantenerlo actualizado de todo lo correspondiente con referente a la actual guerra en toda la galaxia.
"Son los héroes de antaño que lucharon por la muestra humanidad" dijo la voz melodiosa de Sanguinius a las dos jóvenes mientras siguen sus caminos por la residencia real.
"¿Han librado tantas guerras?" preguntó curiosa Asuna a los tres Pretorianos.
"Nosotros los Terranos nos caracterizamos por avanzar gracias al conflicto, pero no significa que nos guste. Esa es la lección que se le predica a cada futura generación sobre nuestra herencia de nuestros antepasados" dijo Kamier sin ver a la pelicastaña y Vulkan solo asiente en apoyo de su hermano.
Las dos jóvenes se miraron algo inquietas, que los Terran sean un pueblo tan disciplinado en el arte de la guerra significaba que la guerra corría por su sangre. Y no se equivocaban, aunque ahora estuviesen perdiendo en contra del Covenant, le estaban haciendo luchar por cada centímetro de suelo de cada planeta en que se han asentado o cada megaestructura que invaden con sus viles presencias.
Al acercarse a la recamara del Canciller, los Guardias Reales se formaron fueran mirando peligrosamente a los Pretorianos que solo los miraban con indiferencia, sabian que cumplian un deber hacia con su majestad y lo aceptaban, pero amenazarlos en cada visita ya cansaba en verdad.
En cambio para las dos jóvenes y sus escoltas, fueron protegidas por escudos psicológicos erigidos por los tres Pretorianos delante suyo. Sabiendo bien de antemano la intimidación de los Guardias hacia los recién llegados.
Una vez pasaron por las puertas y entraron a la cámara más protegida del Sanctum Imperialis. Los visitantes pudieron denotar a las decoraciones simples que adornaban el sitio a diferencia de todo el recorrido que habían hecho hasta aquí dentro, al avanzar más adentro pudieron ver sentado en un trono al Canciller con un Pretoriano parado a su lado.
Los tres Pretorianos se arrodillaron a pocos metros del trono y dijeron al unísono:"For Terra in Excelsior!".
El Canciller sonrió cansadamente pero recibió a los guerreros epítomes de la humanidad con las palabras de un abuelo para sus nietos."Bienvenidos otra vez a Terra, pueden levantarse".
Los tres lo hicieron y se pararon firmes frente al líder supremo de la humanidad de los Terran en todo su conjunto. El Canciller miró más allá de los tres Pretorianos y sus guardias para ver a las dos jóvenes que estaban expectantes, con un gesto se acercaron y los Pretorianos les dejaron pasar entre ellos hasta quedar cerca al trono.
"Lamento por no haberlas recibido más cómodamente jovencitas pero liderar a todo rincón de la galaxia me consume mucho de mi tiempo- Dio una cálida sonrisa que hizo relajar a las dos jóvenes de otra galaxia- Soy el Canciller, dirigente de toda la Gran Alianza Terrana, el que está a mi lado es el Pretoriano Helios Dorn" se presentó el hombre mayor y la joven al lado de él.
Helios dio una leve reverencia en forma de saludo a las dos que solo asintieron de vuelta. Luego fijaron sus miradas ante el Canciller que aunque tuviera la apariencia de un anciano cansado, su aura exudaba un poder mayor que cualquier psíquico que ambas hubieran conocido. Solo una presencia se le podía igualar en sus mentes pero eso se lo reservarán por el momento.
"Un placer conocerlo su Excelencia. Soy Eleonora Viltaria y ella es Asuna Yuuki, ambas somos parte del Colectivo de Orión procedente Path Ketona" se presentó Eleonora por ambas.
Al oír el nombre de la galaxia en especial, los ojos del Canciller así como de los Pretorianos brillaron al pensar en algo que muy pocos individuos, incluidos ellos, conocían acerca de la historia antigua de esta galaxia ocurrida hacía muchos años atrás o más bien milenios atrás.
"Veo" fue lo único dicho por el Canciller mientras su mente se sumerge en recuerdos de su pasado como Precursor.
"Les doy la bienvenida a Terra, mundo capital de los Terranos y sobre todo mundo natal de la humanidad, o al menos de esta galaxia" dijo con media verdad a las dos jóvenes.
Era muy temprano en las relaciones entres ambos gobiernos para contar la verdad detrás de lo que los Terranos sabían detrás del origen de los humanos en Path Ketona o la Gran Nube de Magallanes como ellos la llamaban en la actualidad.
"Es un planeta hermoso su Excelencia" Dijo Asuna halagando al segundo mundo natal de la humanidad en su totalidad.
Los Pretorianos sonrieron ante el halago, aunque fuesen de diferentes mundos; Terra siempre sería el mundo natal de donde nació su especie y donde reside el centro de todo el eje de la enorme maquinaria que era el T.G.A en su totalidad.
Cosa por lo que tenía acerca de la Battlefleet-Solar, además de fuerzas de diferentes Ejércitos Clon de los Pretorianos para reforzar su seguridad. Evitar que la cuna cayera era una tarea que los Pretorianos aceptaron con sumo gusto para con su lealtad a la humanidad.
La mayoría de las Legiones de Clones proceden de los primeros Pretorianos entrenados de los Sesenta primeros. Que incluían a Kamier como el onceavo o XI Lord Pretoriano en ser entrenado por el Gran Mariscal y además de ser uno de los más hábiles entre sus hermanos primerizos.
Aunque el actual mano derecha del Gran Mariscal, el Señor de la Guerra de la Gran Alianza en su conjunto Horus Lupercali, Pretoriano de los Templarios Lunares y que actualmente estaba defendiendo el Segmentum Atlantia de la amenaza restante de la Alianza Luciana, para dar un Exterminatus Extremis por completo a los mundos que daban cobijo a sus enemigos humanos.
Luego de la segunda expansión del Programa Pretoriano, los números aumentaron aún más para cubrir el territorio humano por completo en la segunda generación del programa.
"Pueden retirarse Cadmon, Tiberius, Helios y Kamier. Hablaré con nuestras dos invitadas mientras toman un breve descanso bien merecido de sus campañas" ordenó el Canciller a los Cuatro Pretorianos presentes quienes asintieron ante la orden y se retiraron de la sala del trono.
Los cuatro se pusieron al día de sus actos en la actual guerra de supervivencia mientras que las dos líderes humanas hablaban con el Canciller de acuerdos preliminares que duraron algunas horas a puerta cerrada entre los dos lados.
Al terminar, ambas jóvenes fueron invitadas a quedarse unos días en la capital por las molestias, cosa que aceptaron algo reacias. Ver el mundo capital de su posible nuevo socio comercial sería de mucha ayuda.
Se les asignó un guía del Ministerio de Relaciones Exteriores para guiarlas por la vasta ciudad-planeta que era Terra en su conjunto. De cerca un Templario les seguía de cerca por órdenes de su Lord Draconus, que aunque no desconfiara de sus camaradas, a veces era mejor ser precavido.
Las naves de los tres Pretorianos recién llegados fueron sometidos en los astilleros lunares a extensas reparaciones por muchos de sus sistemas que fallaban y por el daño recibido en anteriores batallas. En unos días más deberían estar en pleno funcionamiento a su completo uso.
Mientras recibían al mismo tiempo unas cuantiosas actualizaciones acorde a la última tecnología desarrollada por los laboratorios de I+D de la Gran Alianza Terran en Marte.
Eleonora y Asuna contemplaron lo que la capital tenía para ofrecer con sus cuatrillones de habitantes en su superficie. Además que por parte de los Pretorianos, Kamier tuvo que separarse de sus hermanos cuando fue llamado a la residencia de su familia en la capital por parte de cierta persona que conoce bien, después de todo ayudó a criarlo en Avalon hace muchos milenios atrás.
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Kamier se quedó parado justamente en la sala de recepción de la mansión perteneciente a su familia en Terra. Los pasos se escucharon desde el enorme corredor frente a él y se arrodilló al ver a la figura que se acercaba.
Su largo y hermoso cabello dorado se movía con cada paso que daba mientras sus ojos azules se movían al ritmo de su caminata observando en silencioso análisis al joven que tenía arrodillado delante suyo.
"Ha pasado un tiempo mi pequeño dragón. Cuántas veces te he dicho que no necesitas arrodillarte cuando estamos entre familia" dijo la voz suave y amable de la ex Matriarca y Lady de la Casa Akimara, Gabriel Akimara.
"Lo siento abuela, pero es la costumbre" dijo Kamier mientras se levantaba y tomaba una postura menos rígida de lo usual, sabía que su abuela no disfrutaba de ese protocolo ancestral de las casas nobles.
"Tsk,Tsk. Mi pequeño dragón aun no aprende,eh" dijo Gabriel moviendo su dedo de un lado a otro antes de darle un pequeño golpe en la frente a su nieto amado.
Kamier solo se sobo el lugar, aun con su armadura su abuela era increíblemente hábil para algunas cosas cuando no parecía una niña pequeña en la mayoría del tiempo que tenía libre.
"Vamos, comamos algo y cuentame como te ha ido" dijo Gabriel entrelazando sus brazos con el brazo derecho de su nieto y llevarlo arrastras hacia la sección de uno de los jardines de la mansión tenía para ofrecer.
Los Interludios contaran sobre una historia alternativa aparte de la historia principal durante la Guerra Terran-Covenant cuando las dos fuerzas humanas de dos galaxias se unen por la supervivencia de su especie en conjunto.