Capítulo 83: CAPÍTULO 76- Inicio del torneo. Parte 2.
CAPÍTULO 76- Inicio del torneo. Parte 2.
(Pov- Saik.)
... Pues... ¿Cómo decirlo sin asustar a Iris ni enojar a Yuki? Debería decirlo de una manera educada, pero agresiva, lo suficiente como para que él deje de decir estupideces.
Algo como...
—¿Podrías dejar de acariciarme la cabeza, por favor?
—¡Hahahahahaha! "Que lindo". Sigues igual de tímido. No tengas miedo de mostrar tus sentimientos, "chico emo". Sé que me quieres, no lo niegues.
Suspiré, algo irritado, pues mi poca reputación se está manchando. Ahora Yuki tiene nuevo material para burlarse de mí e Iris... Bueno, por ella no me preocupo, ella es una mujer bastante amable conmigo, no me la imagino burlándose de mí (aunque me trató muy mal cuando nos conocimos, pues ella estaba ebria).
Lalo, Iris, Yuki (que está sentada en mis piernas) y yo, estamos en la sala de descanso de los empleados de la tienda. Lalo se las arregló para convencer al jefe de Iris para que nos permitiera reunirnos en este lugar. ¿Por qué? Al principio sospeché que lo hizo porque le gustó Iris y quería conocerla, pero ahora sospecho que sus motivos son más... estúpidos.
—¿Solo viniste a burlarte de mí?
—Ouch. ¿En serio crees que sería capaz de hacer semejante acto de maldad?
—Sí.
—¡Pues tienes toda la razón! "El idiota se volvió un genio, ¿eh?"
Se siguió riendo, mientras yo intento controlar mis ganas de irme. Lalo es Lalo. Actúa como un idiota, pero es el hombre más inteligente que he conocido. Sé que hay otro motivo por el cual está aquí, un motivo que no logro encontrar... Ay. ¿Tú también, Yuki?
Hasta ella se ríe de mí. Admito que me siento algo raro al respecto. ¿Vergüenza, timidez, pena? Algo así siento en mi corazón. Es una sensación que no me gusta.
—¡Perdón, Saik, pero su risa es contagiosa! Y admito que me da risa que se burle tan fácil de ti. Creo que me acostumbré a que todos te traten con seriedad.
... Sí, me largo. Odio sentirme tan incómodo.
—Iris, te invito a cenar o lo que sea. Mientras más lejos esté de él, mejor.
Sé que mi repentina propuesta te pone muy tímida y nerviosa, pero no saques tu lado Sylphie en este momento. Me quiero ir ya.
—Y-yo...
—Te gustan mayores, ¿eh? "Nada mal, Saik, nada mal". Team Milf, ¿eh?
—Me largo.
Estás exagerando en tu comportamiento, me das muchísima pena ajena. Iré a casa a estudiar como el buen estudiante que soy.
—La risa es una excelente herramienta para relajarnos. Solo trataba de poner una sonrisa en ese rostro inexpresivo tuyo. Y no te preocupes, apoyo tu relación con esta mujer.
—¡¿Eh?!
—Es más, hasta me ofrezco para ser el padrino de tu primer hijo, y hasta les pagaré la boda. Oh, que buena persona soy, ¿verdad? No es necesario que me lo agradezcas, con una sonrisa me conformo.
—¡N-n-no t-tenemos esa c-clase de relación!- Dijo Iris, con su rostro tan rojo y caliente, que hasta puedo sentir su calor corporal, incluso estando en un lugar con aire acondicionado.
Me pregunto si es posible sufrir un infarto por estar tan nervioso. ¿Es posible? Recuerdo que maté a un anciano de un susto una vez, pero estaba muy viejo y lo asusté tanto, que hasta número 4 me tuvo miedo. Si ese anciano murió de un infarto por asustarse muchísimo, ¿es posible morir por un gran ataque de nervios o ansiedad?
Nota mental: investigar acerca de eso, para saber cómo reaccionar por si a Sylphie o su madre le pasa eso. Ah, más trabajo.
—¡Hahahahahaha! ¡Me encantan las reacciones de Iris...! Aunque es un poco triste que tenga esa personalidad a su edad.- Dijo Yuki, sintiendo pena por ella.
Sí, te comprendo. Es como un chico comportándose tímido solo porque una chica le habla o está cerca de él. Es patético. ¿Por qué los chicos así son populares? En varias escuelas a las que asistí, había varios chicos con esa personalidad débil (tímidos, miedosos, llorones, inmaduros), y siempre había chicas cerca de ellos. Incluso varios de ellos consiguieron que las chicas más hermosas y populares se convirtieran en sus novias. No tiene sentido.
¿Por qué las chicas se enamoran de personas así? Mmm... Ah, los chicos consideran adorables a las chicas tímidas como Sylphie, creo que es algo parecido... Sí, definitivamente la normalidad es más complicada de lo que pensé.
Ah, me pregunto cuántas veces me he dicho eso.
Como sea. Sylphie tiene justificación porque sufría de acoso escolar y se burlaban de ella por ser hija de una alcohólica, lo que la convirtió en alguien solitaria y callada. Socializar es algo nuevo para ella, incluso confundió la amistad que siente por mí con el amor. Su timidez está justificada, pero Iris ya es una mujer mayor. Que se siga comportando tímida es... Ah, bastante triste, sinceramente.
Vaya. La cabeza de Iris se está moviendo de un lado a otro, lentamente. Su cabeza se calentó tanto que se mareó. Sí, definitivamente es posible sufrir un infarto por eso.
Abro mi mochila y saco una botella de agua. Está caliente, pero servirá para tranquilizarla.
—Toma, bebe un poco, te ayudará a sentirte mejor.
—G-gracias.- Dijo Iris, tomando la botella.
—Te diste cuenta que se estaba mareando, ¿eh? Definitivamente serías un gran novio. Es una lástima que no tenga hijas, porque desearía que fueras parte de mi familia. ¿Te sirve una prima mía?
No tienes más familia, lo dices de broma, lo que confirma que solo estás aquí para humillarme.
—Deja de decir estupideces, por favor. No tengo tanta paciencia.
—Oh, sí, es cierto, tú ya tienes una Milf. "Que buen gusto, compa".- Dijo, levantando su pulgar y guiñando un ojo, poniendo muchísimo más apenada a Iris, que casi se ahoga con el agua.
Ah... Lalo, en serio, ¿qué planeas con todo esto?
—Iris y yo solo somos buenos amigos, es todo. Por favor, no digas cosas que ponen incómodas a las personas.
—Sí, sí, lo siento, "señorita Iris". Mi querido ahijado...
—Saik.
—Mi ahijado...
—Saik.
—... Ahi...
—Saik.
—"Que frío eres, carnal".- Dijo, sonriendo.
Cruzó los brazos y chasqueó la lengua, al ritmo de su dedo índice, que ladea de un lado a otro. Ah, presiento que viene otra estupidez mayor.
—Mal, mal, mal. Muy mal, Saik. Vamos, no seas tan frío conmigo. ¿Por qué no dejas atrás tu etapa emo y sonríes? Ya madura de una buena vez. Das pena con tu comportamiento de chico sin sentimientos. Deja de dar lástima, pequeño.
¿Qué? Espera, él no es así. Sabe que mis padres están muertos, los perdí recientemente. Pedirle a alguien deprimido que sonría, es como pedirle a una mujer violada que olvide lo que pasó y que tenga sexo de nuevo... Creo que ese ejemplo no le queda tanto.
Ah... Él nunca diría algo tan horrible para herirme, principalmente porque Lalo García es genuinamente una buena persona, la más buena que he conocido (porque la mayoría de mis conocidos son asesinos o malvados, hasta Yuki dice cosas algo indebidas y de humor negro algunas veces). ¿Qué es lo que trata de hacer?
—¡I-idiota! ¡Saik, golpea a ese "pendejo" insensible!
¿"Pendejo"? ¿Qué es eso? Suena terrible. Yuki, no digas eso.
—Por favor, le pido que deje de molestarlo.- Dijo Iris, sin levantar la mirada de la mesa.
Sin tartamudear. Vaya, se atrevió a hablarle a alguien como Lalo de una manera tan directa... Tengo que admitir que me sorprende mucho. Lalo es el hombre más rico del mundo, y logró eso en tan solo dos años. Hablarle así a un pez tan gordo como lo es él, se requiere de mucho, mucho valor, pues los hombres con dinero siempre darán miedo, por tener el poder para desaparecer del mapa a cualquier persona que les resulte molesta, y sin consecuencias legales. Las personas como Nergio y yo, podemos hablar con él sin miedo, porque tenemos poderes espirituales, lo que nos vuelven cercanos, pero las personas comunes y corrientes como Iris, que es una humilde madre soltera... ¿Madre viuda? Bueno, que es una humilde madre, que debe mantener a su hija con un trabajo de cajera en una tienda de conveniencia... Alguien como Iris, que tiene mucho que perder (su hija), se atrevió a pedirle a Lalo que deje de molestarme.
En su punto de vista, está arriesgando su vida con tal de que él deje de molestarme. Vaya... ¿Así se sienten las personas al ser protegidas? Con razón Sylphie se enamoró de mí. Estoy sintiendo agradecimiento, y es bastante parecido al amor. Si no estuviera enamorado de Naima, diría que me enamoré de Iris.
—Uy. ¿Qué? ¿Acaso eres su nueva mami? ¿Vas a defender al bebecito?
—¡Hmmmh! Ya no me agrada, ¡ahora lo odio!- Gritó Yuki, abalanzándose hacia él y comenzó a "golpearlo". Quiero activar su cuerpo, pero lo haré cuando estemos a solas.
Lalo, antes de suicidarme, le pediré a Sumi que te rompa el culo.
—Déjalo en paz.
Ese tono de voz... ¿Iris? Está... No, no está temblando, al contrario, está mirando a los ojos a Lalo, con una mirada llena de... odio puro. Es la primera vez que la veo actuando así. ¿No está exagerando?
Yo estaría furioso si no conociera a Lalo, él dijo eso por algún motivo, pero ¿por qué te enojas tanto por alguien como yo? Solo somos amigos, no soy tu familia.
—Iris, no te preocupes por mí, no me afecta.
—¡Sabes que sus padres murieron, ¿no?! ¡No te quejes de su forma de ser sin saber cómo se siente! ¡No te metas en la vida de los demás, idiota!
...
...
...
Ella... acaba de...
—Wow. Que gran cachetada le dio. Ay, hasta a mí me dolió.- Dijo Yuki, acariciándose la mejilla.
Sí, estoy de acuerdo. Iris explotó de ira y le dio una cachetada a Lalo, que hasta su sombrero salió volando (pero porque él mismo lo lanzó, para darle más drama a la escena).
¿Qué logras haciéndola enojar...? No... Espera... Ah, olvidé que este idiota robotfilico siempre ha querido sacarme una emoción, y sospecho que quiere verme "enamorado". Si eso es lo que quieres, te lo daré para que no estés molestando, pero no con Iris, ella solo es una amiga. No malinterpretes mi relación con ella.
—Fufu... Haha...
Ah, aquí vamos.
—¡Hahahahahaha! ¡Una mujer que protege a las personas importantes para ella sin miedo en su ser! ¡Y además, tienes un "culazo" y "pechos muy sabrosos"!
¿Qué?
—Asqueroso.- Dijo Yuki, pues lamentablemente entendió lo que él dijo.
—¡Pasaste la prueba!
—¿Prueba?- Dijo Iris.
—¡Eres perfecta para mi ahijado! ¡Definitivamente tienes mi aprobación, señorita!
—¿Eh...? ¡¿Eh?!
—Espero mínimo 4 sobrinos.
—¡¿C-c-cuatro?!
No le sigas la corriente.
Ah, a veces olvido que Lalo es algo machista porque viene de una familia de narcos, en donde usaban a las mujeres como simples objetos sexuales para tener hijos. Afortunadamente Iris no entendió lo que él dijo en español, pero se está poniendo roja por lo demás.
—¡¿Q-q-q-qué?!
—¡¿Q-q-q-qué?! ¡Hahahahahaha! ¡"Tan adorable"! Una mujer madura y tímida. Que gustos tan excéntricos tienes, ahijado.
El corazón de Iris está latiendo de una manera peligrosa. Lo mejor será llevarme a este idiota para evitar que mate de un infarto a Iris, o en el peor de los casos, le siga dando nuevo material de burla a Yuki.
—Con permiso, nos retiramos. Nos vemos después, Iris.
Ella sigue congelada, sin saber cómo reaccionar ante la actuación falsa de hombre malo de Lalo. Tiembla tanto, que podría... No, no se me ocurrió ningún chiste para eso. No estoy de humor.
—¿Ya nos vamos? Justo cuando comenzaba lo bueno.
Salí de la sala de empleados, sin esperarlo. Si lo espero, se seguirá haciendo el idiota.
—Madre e hija son iguales. No sabía que la personalidad también se podía heredar.- Dijo Yuki, acariciando su barbilla y la mía, por alguna razón.
Yuki no está acostumbrada a la personalidad tímida de Iris. Casi siempre Iris se comporta bastante... normal, cuando estoy con Yuki, principalmente porque evito cualquier escenario que podría malinterpretar mi relación con ella, o al menos eso intento. Mi experiencia con mujeres sigue siendo baja, por lo que no sé tanto. Iris ayuda mucho, pues como siempre hablamos en su trabajo, se comporta muy educada y madura, casi no se pone tímida.
Salí de la tienda y suspiré.
—Mi padre era bastante extrovertido, y mi madre... Pues... Ella era muy buena persona, demasiado a mi parecer, pero también era muy agresiva y violenta con las personas malas. No creo que haya heredado algo de ellos. Solo heredé el cabello negro de mi madre.
—Y sus ojos.- Dijo Yuki, acariciando mis lentes.
Sí, sus ojos... Ah, desearía haber heredado más cosas de ella.
—Pensando en el pasado, ¿eh? "Sí, eres todo un emo".- Dijo Lalo, acariciando mi cabeza.
—¡Vete de aquí, ya no me agradas!- Dijo Yuki, que está a punto de darle un golpe a Lalo.
Veamos. Hay unas cuantas personas viéndonos, pues Lalo resalta demasiado. Ah, debo controlar mis ganas de activar el cuerpo de Yuki para que lo golpeé.
Ella comenzó a "golpearlo" con su intangible cuerpo.
—¡Muere, muere, muere, muere, muere!
—¿Muere? Que jovencita tan violenta. ¡Hahahahahaha!
—... ¿Eh?
Ah...
Un largo suspiro salió de mí.
Star con su torneo. Extraterrestres. Y ahora Lalo.
Yuki, tarde o temprano te enterarías de esto, pero no esperaba que tan pronto. Maldita sea.
Lalo, en serio espero que tengas buenos motivos para hacer esto.
—¡¡¿P-puede verme?!!
No hablé y seguí caminando, mientras Lalo me da palmadas en la espalda.
—Oye, en serio, ¿qué haces aquí? Eras amigo de mi padre solamente, no somos familia ni amigos.- Dije, siguiendo la actuación.
Es muy posible que nadie indeseado nos estuviera vigilando, pero prefiero no arriesgarme.
—Tan frío como siempre, ¿eh? Solo quiero socializar un poco con el hijo de mi difunto amigo, ¿qué tiene de malo?
—Prefiero la soledad.
—Sí, sí, "definitivamente eres un emo". ¡Hahahahahaha!
Ouch. Me dio una palmada tan fuerte, que incluso me tumbó al suelo.
Ah, me encanta sentirme tan débil como un humano, pero eso no significa que no me molestó.
—Uy. ¿"Lo siento"?
—No sabes cuanto te odio en este momento.
—¡Ahhhhhhhh! ¡Dejen de ignorarme! ¡Saik, Saik, ¿él puede verme?!
Me levanté del suelo y me sacudí el polvo. Lo siento, Yuki, no puedo hablar de eso en este lu... gar... Ah, esa chica.
Se supone que estoy enamorado de ella, así que debo seguir con la actuación. Sayu, en serio, ya me arruinaste la vida dos veces. La primera fue al mantenerme vigilado y matarme, y la segunda al aprovecharte de mi supuesto borrado de memoria para decirme que te dije que estoy enamorado de Hanako.
Bueno, al menos servirá para quitarme de encima a este idiota. Tengo que calmar a Yuki.
Levanté mi mano y saludé a Hanako, que está caminando hacia nosotros.
Ella me devolvió el saludo, con una gran sonrisa en su rostro. Ah, aprovecharte de mi supuesto borrado de memoria. Sé que no es tu culpa, pero no veo que te desagrade la idea.
—Hanako resultó ser la prima de tu asesina. ¡Ya no sé en quién confiar!- Gritó Yuki, abrazándome por la espalda.
—Confía en mí, "pequeña".- Susurró Lalo.
—¡Ahhhhhhhh! ¡Ya no entiendo nada! ¡¿Por qué él también puede verme?!
Todo a su tiempo. Primero debo quitarme de encima a Hanako y después a Lalo.
Me duele la cabeza. Necesito pastel.
—Hola, Hanako. No te había visto en todo el día.
—¡Perdón por eso, no pude quitarme de encima a Cristal! Insistió mucho en ir a celebrar nuestra victoria en la isla. Quería invitarte, pero Cristal solo quería estar con chicas. Supongo que me entiendes.
—Una celebración entre amigas mujeres, sí, lo entiendo.
Posiblemente sigue traumada por mi acoso sexual. Espero no quedarme sin una compañera de videojuegos. Creo que debí actuar de otra manera para asegurarme de que borre ese video, pero la adrenalina que sentía después de derrotar a todos esos idiotas no me permitió pensar con claridad y me fui por lo fácil: amenazarla.
Me siento asqueroso al recordar que acaricié sus muslos y trasero. Me pregunto si me afectó eso del instinto de supervivencia. Cuando una criatura siente que va a morir, su instinto le ordena reproducirse, para mantener viva su descendencia o algo así. Recibí mucho daño esa vez, así que es posible.
—Ejem, ejem. ¿No nos vas a presentar?
—Por cierto, ¿tienes algún plan el sábado?- Dije, ignorando por completo al idiota que pone su cabeza sobre mi hombro.
—¿M-me estás invitando a una cita?- Dijo Hanako... sonrojada y sonriéndome, mientras su fantasma me hace un gesto con sus dedos detrás de ella. Un gesto de "mete y saca".
Ah, extraño a la inocente Hanako. Me pregunto que tan corrompida estará. ¿Ya habrá tenido sexo? Los fantasmas corrompen mucho a las personas, tanto que hasta sus personalidades cambian. Los fantasmas pervertidos como el que tiene Hanako, volverían ninfómanas a cualquier monja. ¿Que tan corrompida estás, Hanako?
—Solo quiero celebrar nuestra victoria contra la presidenta, pero si lo quieres ver de esa manera, por mí está bien. Pero te advierto que no tengo nada de experiencia con esa clase de cosas, por lo que podría ser algo aburrido.
—¡E-es una cita entonces!
...
—Que directa.- Dijo Yuki.
—"Todo un donjuán".
Me... dio un beso en la boca. Sin lengua, solo labios, pero sigue siendo un beso.
Se levantó con las puntas de sus pies para alcanzar mis labios. Algo adorable, pero... no sentí nada... Nada.
... Me duele el corazón. Estoy traicionando a Naima... Sayu, Sumi te partirá el culo a ti también.
En el pasado estaría saltando de felicidad, pero ahora solo siento dolor. Me siento miserable. Ah, supongo que es el karma. En el pasado yo le robé un beso a la pequeña Hanako, y ahora ella me roba un beso. Ya estamos a mano... Supongo.
Naima, por favor, no te enteres de esto.
—¡N-nos vemos mañana!
Se fue corriendo.
... Yo... Ah, como te odio, Sayu.
—"Vaya, vaya, vaya". Una Milf y una cazadora de fantasmas. Nada mal, Saik. Nada mal.
—¿No te gustaba Naima? Como sea, ¡no importa! ¡Hanako me agra...! No, espera, ella es prima de la chica que te mató. ¡Ya no me agrada! ¡Sigo siendo team Sylphie!
Suspiré y seguí mi camino.
Realmente necesito algo de pastel en estos momentos.
—La tensión me mata. ¿A quién elegirá? La ruta harem está prohibida en este país, así que la descarto. Apuesto por el team milf, "esa señora tiene grandes los ovarios".
—Yo voy por el team Sylphie, ¡ella es muchísimo mejor que la loca de Naima y la posible asesina de fantasmas llamada Hanako!
—Prefiero el team Naima, y como yo soy el que escoge, gana Naima. Punto final.
—"Gracias por el spoiler".
—¡¿Por qué siempre los protagonistas escogen la peor opción...?! Espera, ¡no es momento de decir estupideces! ¡¿Lalo puede verme?! ¡Exijo explicaciones!
Ya casi llegamos a casa, no te desesperes.
—Te gusta alguien, pero le das esperanza a Hanako. Tú no eres así, por lo que... Fufu. ¿Sayu se aprovechó del supuesto borrado de memoria?
—Adivinaste.
—Siguen pensando que eres ese tal Shadow. Que estupidez.
—¿Shadow...? Oh, es cierto, ellos mencionaron a un tal Shadow cuando mataron a Saik. ¿Quién es?- Dijo Yuki.
... Las personas cruzan la calle para no estar cerca de nosotros. Lalo nunca hablaría si no estuviera 100% seguro de que nadie más nos escucha. Bueno, es seguro hablar, al menos en voz baja. Posiblemente Lalo tenga algún dispositivo que oculta nuestras voces o algo así.
—Ni idea.
—Creo que era un enemigo de los cazadores de fantasmas.- Dijo Lalo.
—Ya veo. ¿Y por qué sospechan de Saik? ¿Cómo saben que puede ver fantasmas?
—Por su edad y, por supuesto, por su extraño historial académico. Cualquiera con fantasmas podría lograr una calificación perfecta.
—¡Ya sabía que hacer trampa no era algo bueno!- Gritó Yuki, rascándose la cabeza rápidamente, como si eso le ayudara a tranquilizarse.
—Mmm... Te veo en tu casa, "debo resolver algo, ahijado".
—Saik.
¿Alguien nos estará siguiendo? Como sea, que él se encargue.
Él dio vuelta en una esquina y yo seguí recto.
—¿A dónde irá?
No lo sé, pero yo iré por pastel.
•
•
Llegué a casa y quería ir directo a la cocina por el pastel, pero como activé el cuerpo de Yuki, ella aprovechó para comenzar a sacudirme la cabeza de un lado a otro. Sí, sí, lo sé. Lalo, en serio espero que tengas buenos motivos para hacerme esto.
—¡Exijo una explicación!
—...
—¡No te quedes callado! ¡Dime lo que quiero saber!
—...
—¡Por favor, di...!
—Te lo diré, solo estaba esperando que dijeras "por favor". ¿No es bonita la educación?
—¡Ahhhhhhhh! ¡Deja las tonterías para otro día! ¡¿Por qué puede verme?!
Ah, necesito azúcar.
Seguí mi camino, mientras Yuki me jala del cabello.
—Hablemos con pastel en nuestros estómagos, eso nos ayudará a relajar nuestros cuerpos.
—Hmmmh. Está bien.
Saqué el pastel de fresa y lo repartí entre Yuki y yo. Ya quedaba poco, un pedazo grande para cada uno.
Ah, esto era lo que necesitaba. Delicioso.
—Bien, ya estamos comiendo. ¡Cuéntamelo todo!
—En resumen, es solo una coincidencia que Lalo haya sido amigo de mi padre y que también pueda ver fantasmas. Él es como yo. Lo descubrí cuando estábamos en una fiesta y él le contestó a una mujer fantasma, tapándose la boca. Me paré al lado de él y repetí lo que la mujer fantasma dijo, para que se diera cuenta de que teníamos la misma habilidad.
—¿Eh? ¿Le revelaste tu habilidad? ¿Por qué?
—Mi padre y él eran muy buenos amigos, podía confiar en él, y como él tiene un gran poder sobre el mundo, pensé que podría conseguir información sobre el mundo espiritual y, tal vez, encontrar alguna manera de quitarme mi habilidad, para ser una persona normal. La mayoría de cosas que sé sobre mi habilidad y el mundo espiritual, es gracias a él.
—Y-ya veo. Supongo que alguien tan rico como él, podría conseguir toda clase de información sin dificultad.
—Lalo García logró convertirse en el hombre más rico del mundo en tan solo dos años. ¿En serio crees que lo logró sin hacer trampa? Tiene contactos que lo ayudaron a expandirse en poco tiempo.
—¿M-me estás diciendo que existen las organizaciones secretas que controlan el mundo? ¡¿Los illuminati existen?!
Pues... 50/50.
Existieron, pero fueron eliminados. Volvieron a aparecer y los maté. No existen, al menos por ahora.
—Algo así. Pero no te preocupes, tienes mi protección. No tengas miedo de cosas como esa.
—... ¿Podrías contarme todo lo que sepas del mundo espiritual?
Creo que es tiempo de que Yuki aprenda más sobre su nuevo mundo. Ya no puedo mantenerla ignorante sobre eso por más tiempo.
—Sí, está bien.
•
•
(Pov- Kaeyko.)
—¡Guau, guau!
Sí, sí, Kaey, lo sé. Estoy aburrido.
La pelea, lo único interesante que había, terminó. El hielo dependía de la energía del participante, y como sus monstruos también gastaban energía, se quedó sin energía después de que número 1 derrotó a unos 53 monstruos, al menos los que alcancé a contar.
El hielo, su única protección, se derritió, y aunque él le rogó que no lo mate y que termine la pelea en empate, ella se negó y lo mató, cortándole la cabeza con una espada.
Es una psicópata, no dudó en hacerlo, ¿o su fusión le dio esa personalidad? Creo que todos tienen a alguien como Kaey, aunque no lo he confirmado. Tal vez en el folleto que apareció frente a mí me confirme lo que quiero saber. Kaey lo tiene en la boca, lo leeré en casa.
El hombre de hielo se llamaba "Raúl Ramírez", un extranjero. Al morir, toda su información privada se volvió pública, como en dónde vivía, a qué se dedicaba, su familia y familiares.
[Habilidades únicas.]
[Amo del hielo.]
[Monstruos de hielo.]
Y las habilidades pasivas son las mismas para todos.
Pero, ¿por qué apareció información tan privada? ¿P-por qué se filtró todo eso? ¿Acaso es necesario? ¿Qué gana la organizadora de esto al poner en peligro a la familia del hombre?
La pantalla que tenía Kaey sobre su cabeza desapareció, dándole fin a la pelea. Gracias por la ayuda, Kaey, puedes descansar. Gracias a ti, pude ver la pelea sin que se dieran cuenta.
—¡Listo, terminé mi parte! ¿Y mis felicitaciones?- Dijo Ether, inflando el pecho con orgullo.
—¡Hasta que terminas! ¡Déjame leer eso!- Dijo Agnes, quitándole su laptop.
Él era el último, ya terminamos nuestra investigación. Solo nos faltaría estudiar para exponer la información mañana. Profesor flojo.
Número 1, estamos empatados. ¿Qué debo hacer? No quiero morir, pero tampoco quiero ser un asesino. ¿Me uno a un equipo? ¿Qué hago exactamente?
Necesito tranquilizarme. Evelyn, espero que estés despierta, hablar contigo me ayudará a sentirme mejor.
—¡Idiota, te faltaron las fuentes bibliográficas!
—Pffff. ¿Quién le presta atención a las fuentes? No son necesarias. Y como ya terminamos, este príncipe se va a la ver...
—¡No te irás hasta que termines to...!
—Yo lo hago por él, no me importa. Ya me voy.
—¡Oh, mi héroe!
—¡Deja de abrazarme!
—Uy, que amargado.
—Me envían la información. Adiós.
Guardé mis cosas y me levanté de la mesa.
—Nos vemos mañana, Kaeyko.- Dijo Agnes.
—Por dos.
—Entonces, lindas, ¿desde hace cuánto tiempo se conocen?
—Nos largamos.- Dijeron ambas, siguiéndome el paso.
—¡Solo trataba de ser amable!
Tomamos rumbos distintos.
Ah, por fin terminó este sufrimiento.
Okey, repasemos la información de número 1.
Ella puede teletransportarse usando sombras, así como también puede meter partes de su cuerpo en ellas para atacar. Y también puede crear armas.
Sus mayores debilidades serían que, al teletransportarse, la sombra debe mantenerse rígida y no moverse, y solo puede crear un arma a la vez.
Se veía muy cansada al final. Si el del hielo hubiera atacado con una mejor estrategia y no hubiera creado monstruos a lo idiota, sin pensar en el desperdicio de energía, tal vez hubiera ganado. Su falta de experiencia terminó por sellar su fatal destino.
Definitivamente debo entrenar, para poder conocer mi límite y saber cómo pelear de la manera que más me beneficie... ¿Qué?
Alguien me tomó de la mano. ¿Un asaltante? ¿En esta zona? Lo dudo, nadie es tan idiota.
—Oye, guapo, ¿quieres divertirte un rato?
¿Eh? Una chica usando una minifalda tan corta, que hasta puedo ver su ropa interior, y está usando un sostén tan diminuto, que apenas cubre sus pezones. ¿Una prostituta? Se supone que eliminé a los criminales que las tenían bajo su control. ¿Una independiente? Bueno, es un trabajo, debo respetar su decisión, pero no estoy interesado en sus servicios... Espera... Parece menor de edad. ¿Debería llamar a la policía? Mejor no me involucro con ella.
—No, gracias.
Intenté seguir mi camino, pero esta idiota no sabe aceptar un no.
Me abrazó por la espalda y puso sus asquerosas manos en mi pecho, mientras lo masajea.
Que asco. Desearía golpearla, pero tal vez solo esté desesperada por dinero. Lo siento, no tengo dinero en este momento, además sospecho que lo usarás para comprar drogas, hueles a hierba ilegal.
—Vamos, vamos, te lo pasarás muy bien.
—Ya te dije que no.
Pellizqué su mano y me empujó con fuerza... Vaya.
Esas marcas en sus brazos. Drogas... Ah, las adicciones tienen graves consecuencias, llevaron por el camino de la prostitución a esta pobre chica. ¿Eh? Él es...
—Tsk. Tú te lo pierdes... ¡Ay, ay, ay!
—¡Te encontré!- Dijo él, jalando de la oreja a la chica.
Ese cabello rosa... ¿Cómo se llamaba...? Saoto. Sí, Saoto.
Y esa chica también lo tiene rosa. ¿Su hermana? Pero, ¿qué? ¿Por qué ella vende su cuerpo? ¿Cómo permitieron sus padres que esto pase? Pensé que alguien con tan buena reputación como Saoto sería parte de una familia igual que él, pero su hermana es... una drogadicta... ¿Cómo permitieron que llegue hasta este punto?
—¡Déjame en paz, idiotaaaaaa!
—Por favor, Kaeyko, disculpa el comportamiento de mi hermana. Y, por favor, olvida esto.
Se ve tan triste...
—Sí, no te preocupes.
Me alejé sin decir nada más.
...
...
...
—Pobre chico, me da lástima.
—Guau.- Ladró Kaey, acariciando mi mejilla con su cabeza.
No le importa arriesgar su reputación, la llamó hermana frente a mí. Tiene la esperanza de lograr salvar a su hermana y sacarla de esa vida, sin importarle que pone en riesgo su vida social, pues si es tachado como el hermano de una drogadicta, se convertirá en la burla de la escuela. Después de todo, la humanidad es así, cruel.
Un admirable hermano mayor... Me hace sentir una mierda por tratar tan mal a mi hermana menor, pero no tanto como para querer regresar a casa.
Pero, lo repito, ¿cómo llegó tan lejos con su adicción? ¿Por qué no la detuvieron a tiempo?
... No debería meterme en asuntos ajenos. Lo mejor será no pensar en eso.
•
•
Las luces de Evelyn están apagadas. ¿Estará dormida? ¿Qué hora es...? Son las 9 de la noche. Es temprano todavía.
Necesito hablar con ella, para tranquilizarme. Esto del torneo me tiene muy estresado.
—B-b-buenas n-noches, K-Kaeyko.
Reconozco esa tenebrosa voz.
Volteé hacia atrás y saludé a Sylvie.
—Buenas noches, Sylvie... ¿Te sientes mal?
Tiembla muchísimo, más que de costumbre, y está sudando bastante. ¿Estará enferma?
—N-no te p-preocupes. ¿Eh? ¡¿Eh?!
Perdón por tocarte la cabeza de repente, pero no te ves nada bien, y ya confirmé lo que sospechaba.
—Tienes calentura, tu cabeza está hirviendo. ¿Ya fuiste al médico?
—Y-ya fui. G-gracias p-por preguntar. S-solo necesito d-descansar.
—Mmm. Esto no es normal. Estás demasiado caliente.
¿Eh? ¿Alguien puso una mano en mi hombro?
—Creo que el caliente es otro.
¿Evelyn?
Volteé a verla. Se ve enojada... ¿Enojada? Vaya, vaya. Un ataque de celos. ¿Qué debería hacer en esta clase de situaciones?
—Para aclarar la situación y evitar cualquier malentendido...
Tomé la mano de Evelyn y la puse en la frente de Sylvie, y por su expresión, sus celos se fueron y ahora se siente aliviada.
—Con esto me refiero a que está caliente. Por cierto, ella es Sylvie, nuestra vecina. Sylvie, ella es Evelyn.
—Soy su novia, es un placer.- Dijo Evelyn, estrechando la mano de Sylvie.
No es necesario que estés marcando territorio, Sylvie y yo solo somos amigos, y ella solo me ve como amigo, ya lo confirmé. Incluso en este momento, ella está sonriendo, pues tiene la oportunidad de hacer una nueva amiga y no le toma importancia al hecho de que yo tenga novia (aunque oficialmente sigo soltero).
—¡E-es un p-placer c-c-conocerte!
—Ve a descansar, lo necesitas. No te esfuerces demasiado. Llámame si necesitas ayuda.
—G-gracias.
—Nos vemos mañana.
—H-hasta m-mañana.
Se despidió de nosotros, con una sonrisa.
Se fue a su departamento y nosotros entramos al mío.
Gracias por no... Ah, creo que sí le tuvo miedo. Evelyn está temblando de miedo y parece pálida. ¿En serio te dio tanto miedo Sylvie? Admito que da muchísimo miedo, y más de noche, pero ¿no estás exagerando un poco?
—Ella es una buena persona, no la juzgues por la apariencia, por favor.
—P-perdón, lindo, mi cuerpo reacciona por cuenta propia.
—Es una buena persona, no te preocupes. ¿Ya cenaste?
—¡Te estaba esperando! ¡Hagamos la cena juntos!- Dijo, abrazándome.
Le sonreí y acaricié su cabeza.
—Por supuesto.
Dejando de lado que podría morir en cualquier momento, sí, soy muy feliz en estos momentos. Kaey, ¿eres de buena o mala suerte? Creo que buena suerte.
Ether es un idiota, pero al menos puedo confiar en él, hasta a Kaey le agrada.
Evelyn es una persona que me da felicidad con su sola presencia.
Mi gris vida ahora tiene color. Un "casi" amigo y una "casi" novia.
Sí... Por fin soy feliz.
•
•
Mientras Kaeyko y Evelyn hacían juntos la cena, malas noticias se acercaban. Noticias que podrían arruinar todo.
En un bosque gobernado por Slimes, está Star, sentada sobre un gran Slime azul, mirando una gran pantalla, en donde están apareciendo las fotografías de 34 mujeres. 35, pues una acaba de aparecer.
Los miles de Slimes que habitan el bosque, están quietos, no se mueven ni un centímetro, y no es que no puedan, sino que tienen miedo de moverse sin permiso.
Una pequeña risa sale de Star y sonríe, llena de satisfacción.
—La verdadera ruta dará inicio.
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