Capítulo 248: 124.2: Tengo que poder arreglarmelas sin ayuda
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Hace ya cinco horas que estamos en el laberinto y estamos buscando una sala segura para que Kaelion pueda salir, ya que quiere retirarse antes para ir a comprar los materiales necesarios para hacerme un tatuaje, e ir a investigar sobre los precios de los alojamientos disponibles cerca del laberinto, ya que nos resultaría incómodo seguir hospedandonos en un lugar que está en el área periférica de la capital.
Esa fueron las razones que me dio, pero también me doy cuenta de que quiere salir para descansar.
Sorprendentemente, sus capacidades e instintos de lucha no son malos en absoluto, y van mejorando cuanto más tiempo pasamos en el laberinto. Por eso me da la impresión de que antiguamente era un guerrero, o soldado de alguna clase.
Explorador del laberinto es seguro que no era, ya que antes me dijo que en el pasado venía muy poco, así que lo más probable es que fuera un soldado del imperio, o alguna clase de mercenario. De todas maneras, da la impresión de que hace muchos años desde esos días en que el anciano se dedicaba a luchar, y ahora está bastante fuera de forma.
El problema de nuestro objetivo actual es que hay realmente muy pocas salas seguras o de desafío, y aunque preguntarle a la gente por indicaciones puede ayudar, también puede ser peligroso.
Hasta ahora ya nos han engañado una vez, y desde entonces somos bastante cautelosos sobre a quién le pedimos información.
La trampa fue una indicación de un grupo pequeño de 5 personas, que nos llevó a una emboscada de 30 personas, de la que salimos con vida gracias a que Kaelion lanzó unas bombas que emitieron una luz cegadora que incapacito momentáneamente a nuestros atacantes, momento que aproveché para masacrarlos a toda velocidad con mi espada y mi magia.
Sus números podrían haber sido un problema para nosotros, pero eran débiles justamente debido a eso. Probablemente ninguno de ellos tenía la fuerza para estar en estos pisos, pero al estar en un grupo tan numeroso la cosa cambia. Lo bueno es que de poco servían sus números si todos eran cegados al mismo tiempo.
Creía que sería imposible el encontrar grupos tan grandes en el laberinto, ya que el límite al que se puede entrar en grupo es de 10 personas, pero supongo que siempre es posible el reunirse después de entrar. Probablemente tienen algún método para eso, porque sino lo veo bastante difícil de realizar, dada la inmensidad del laberinto.
"¡Bien! Parece que esta vez la indicación era fiable, aunque es una pena que sea una sala de desafío y no una sala segura..." dice el anciano, acercándose al umbral adornado con caracteres rojizos brillantes.
"Da igual. Puedo arreglármelas solo de ser necesario, aunque estaría bien que tuvieras algún juguete más como ese brillante que usaste hace un rato, por las dudas..." digo, comenzando a analizar el patrón del umbral para ver si la dificultad de la sala puede llegar a cambiar al entrar en grupo.
"Eso quisiera yo también, pero esas fueron mis últimas bombas cegadoras... Y los materiales para construirlas no son baratos... Cuando salga voy a ver si puedo comprar los materiales para crear un par más, pero no debería ser un recurso del que abusemos" dice el anciano, apoyándose contra la pared del pasillo y dejándose caer hasta terminar sentado.
"Esta bien, viejo. No serán necesarias. Todavía no has visto todo de lo que soy capaz..." digo, con una sonrisa "Hmm, creo que podemos entrar los dos sin temor a ser divididos, o que la dificultad del desafío incremente"
"Haa... Me gustaría que tuvieras la certeza de que es así, pero supongo que no puedo quejarme ya que yo no sé interpretar esos patrones. Podría haberlo aprendido, pero nunca me interesó este lugar" dice el anciano, poniéndose de pie a regañadientes, "y francamente no se que mas podrias mostrarme hasta ahora. Ya he visto tu gran habilidad con la espada, como puedes prender fuego tu arma, y como puedes disparar proyectiles de magia que son tan letales como las balas de mi rifle... Y eso sin mencionar tu absurda velocidad y fuerza"
"Todavía no has visto las bombas de mana..." digo, sonriendo más ampliamente.
'Ni a Azur... Pero a él no creo ni él viejo ni yo lo veamos durante un buen tiempo'
Desde ayer, cuando le dije que era mejor que no se interpusiera en mi camino si es que no quería que muriera por su culpa, mi compañero se ha mantenido en un silencio absoluto, y solo concentrándome durante varios minutos puedo sentir un leve rastro de su conciencia.
...
"¡Mierda! Me están haciendo retroceder porque estoy cansado. ¡Kaelion! dame otra poción de mana. Ya estoy volviendo a quedarme seco" digo, y el anciano se apresura a darme de beber una poción de mana, ya que yo tengo las dos manos ocupadas desde hace mas o menos media hora, emitiendo ráfagas ininterrumpidas de fuego mágico contra la absurda horda de goblins y hog-goblins que no paran de llegar hacia la entrada de nuestro refugio.
El ambiente de esta sala de desafío es el de una inmensa caverna, con la forma típica de las guaridas de los duendes. Normalmente este tipo de desafío sería fácil de vencer para mi, pero el número de los enemigos es absurdo a niveles que nunca había visto hasta ahora.
A los pocos segundos de que aparecimos en el lugar, fuimos vistos por un goblin que rápidamente dio la señal de alarma antes de que yo pudiera deshacerme de él. Y ahí dio inicio nuestro dilema actual, ya que miles y miles de enemigos comenzaron a llegar por todos lados, con lo que apenas tuvimos tiempo para encontrar una sala con una sola entrada donde poder atrincherarnos.
Tan pronto como los enemigos llegaron al umbral de nuestro refugio, yo comencé a lanzar mana puro y sin refinar en forma de llamarada desde mis manos para detenerlos. El problema es que, si bien esta técnica requiere muy poca concentración ya que no es realmente un hechizo, consume considerablemente más mana que cualquiera de mis hechizos, y su daño y alcance son bastante mediocres, llegando solo a unos 10 metros de distancia y haciendo poco más de un tercio de el daño que podría hacer con una bala de mana, por lo que ya llevo seis pociones de mana consumidas hasta ahora.
'Es una pena que no pueda realizar la llamarada focalizada desde mi boca, ya que es algo que solo he logrado realizar al estar fusionado con Azur. Ese tipo de ataque hace una mayor cantidad de daño, tiene mayor alcance, y no consumiría tanto mana como esto que estoy haciendo ahora... Pero tengo que poder arreglarmelas sin ayuda.'
Por suerte, el daño y alcance de mi mana lanzado a chorro desde mis manos da igual contra enemigos del nivel de los goblins, y solo tengo que observar mientras la interminable horda verde corre hacia mi buscando una muerte instantánea al llegar hacia mis llamas, que los calcinan hasta el punto de volverlos cenizas en cuestión de segundos.
...
Unos minutos después de haber consumido la séptima poción de mana, la horda de enemigos finalmente llega a su fin, con lo que caigo al suelo de rodillas y me saco la máscara, almacenándola en el inventario para poder respirar mejor, mientras me apoyo contra la pared de la cueva para descansar de cualquier manera, ya que las pulsaciones que siento en mi cabeza por el uso excesivo de mana me hacen sentirme mareado y con náuseas.
"Estás seguro que no quieres salir conmigo, chico. Tienes mala cara... Parece como si pudieras desmayarte en cualquier momento" dice Kaelion, acercándose con preocupación al ver mi cara, después de salir a ver el gran cúmulo de ceniza que quedó como única evidencia de la horda de enemigos, ya que el botín que podrían haber soltado seguramente fue incinerado y destruido como resultado de haber estado expuesto a mis llamas durante tanto tiempo.
"Nah... S-solo n-necesito unos minutos..." digo, haciendo un esfuerzo para que no me tiemble la voz e intentando relajar mi mente "Pero el haberme enfrentado a tantos enemigos me ha hecho pensar en una cosa.... ¿porque no vimos ningún monstruo durante nuestro viaje? ¿es.... normal que no haya monstruos fuera del laberinto en este continente?"
"Si, pero eso es solo actualmente. Antiguamente el continente estaba plagado de monstruos en las áreas no habitadas, ya que se reproducian a una gran velocidad." dice, mirándome con el ceño fruncido "Pero nuestra raza también puede desarrollarse muy rápido, a diferencia de las otras tres. Ese fue el principal factor que nos permitió tomar control de todo el continente, y prácticamente erradicar los monstruos en la mayor parte de este. Las únicas excepciones son algunas áreas muy complicadas de explorar, cómo la selva de Krag-an, que era el antiguo país de los reptilianos, y el gran bosque verde, actual territorio de los avian."
"Ahh" digo en respuesta, combinando la respuesta con la exclamación de dolor involuntaria que se me escapa debido a otra punzada en la cabeza.
'Así se debe de sentir Sofía en todo momento ahora que no estamos Lilian o yo para ayudarle con el suministro de mana a las academias de magia... ¿Cómo puede nadie soportar una cosa así de forma continua? No me extraña que fuera tan generosa conmigo cuando me conoció'
"¿Seguro que no quieres salir conmigo? Estás demasiado pálido" dice, arrodillándose a mi lado mientras hace el amago de tocarme la frente, pero yo le desvío el brazo de un manotazo.
'Lo último que necesito en este momento es tener que preocuparme por mi maldición... Tengo que hacer que se vaya'
"¡No! Vete, eres una molestia. Ve a comprar lo que necesitas para mi tatuaje. Yo me quedaré aquí un tiempo descansando, y veré de seguir explorando un par de horas más cuando pueda." digo, intentando que mi voz suene lo más firme posible.
"Haa... Me gustaría poder hacerte cambiar de opinión, pero ya te conozco bastante para darme cuenta de que eso no va a pasar. Y tampoco tengo la fuerza para protegerte si decidiera quedarme, así que supongo que lo mejor será que me vaya... es malo ser viejo y débil..." dice con voz sombría, poniéndose de pie con un quejido pero sin dejar de mirarme fijamente "Solo no hagas que te maten, chico. Sería muy triste si el personaje principal de la historia que pienso escribir se muere antes de hacer algo realmente épico... Además, todavía no decido qué podría ser más épico para una historia como esta..."
"Si, descuida" digo, reprimiendo un gruñido al sentir una punzada en la parte posterior de mi cabeza. "no está en mis planes el morir en el laberinto"
'Al menos por ahora...'
Y con esa respuesta, la figura del orco desaparece súbitamente de la sala, dejándome solo en la ahora sala segura.
"Haa... No podía ser una sala como en la que descansamos ayer... No. Tenía que ser una maldita cueva. Bueno, al menos esta caverna tiene antorchas en las paredes... Muchas madrigueras goblins no tienen ni eso" digo, cerrando los ojos e intentando relajar la mente sin dormirme, ya que sino quedaría a merced de cualquier otra persona que entrará en la sala.
"Azur. ¿No quieres ayudarme vigilando durante unos cuantos minutos? Así duermo algo, al menos" digo al aire, esperando a ver si hay alguna clase de respuesta por mi compañero, pero solo percibo el silencio de la caverna.
'Eso imagine... Pero no estaba de más hacer el intento'
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