Capítulo 480: Nueva vida.
En una sala de descanso dentro de los laboratorios de la Empresa Cosmos, estaba un joven parpadeando en blanco mientras observaba unas fotos.
Una belleza elfica de ojos azules vestida con un elegante vestido de gala y con su cabello azul suelto, estaba dando una mirada estoica.
Una noble… Esa es la primera reacción que tuvo al ver la primera vez la foto y que continuaba incluso ahora.
No, no solo era una noble, era de la realeza.
Mirada, expresión, postura y atmosfera todo emanaba nobleza, elegancia y realeza.
Cithrel era una belleza, pero al igual que los miles de comentarios de las redes, todos sentían majestuosidad.
Andrés al observar la foto paso a la siguiente.
Vestido de mayordomo, dando una expresión seria y una postura servil, Venali estaba fascinando tanto a hombres como a mujeres.
Sus rasgos andróginos lo hicieron parecer como un elfo delicado y a pesar de que su apariencia se inclinaba por lo masculino, Andrés no pudo evitar pensar que era guapo.
Admirar la belleza de otro hombre no era algo que le avergonzara, lo que si lo estaba afectando era que Venali no era un hombre, era una mujer.
¿Cómo era posible que una belleza elfica pudiera ser un mayordomo varonil tan guapo?
El estilo de ropa que usaban era sacado de la época victoriana y si bien estaba 'adaptada' a la modernidad para ser atractiva visualmente, era muy formal y no al estilo 'cosplay'.
Eso significaba que el vestuario tenía un diseño más histórico.
"No importa cuanto lo vea… Sigo sorprendido." Murmuró Andrés de forma inevitable.
Estaba viendo la imagen de Amber que también estaba vestida como una princesa y su mirada se centró en la persona que estaba vestida de sirvienta.
Serafín era una belleza guapa y le quedaba perfecto la atmósfera de noble, pero Aurora en aspecto tenía un mayor encanto.
Delicada y delgada, su sonrisa había logrado atrapar a muchos espectadores y el vestido de sirvienta le quedaba demasiado bien.
A diferencia de cualquier otro vestido, el conjunto de sirvienta era formal y no estaba llena de bordados o decoraciones de lujo.
El problema para Andrés era que no podía imaginarse a su antigua 'jefe' que era seria y profesional, con la persona que estaba sonriendo a la cámara como si se estuviera divirtiendo.
"Si se hubiera vestido de noble me hubiera explotado la cabeza." Murmuró Andrés y riéndose entretenido.
Por lo que sabía a su antigua jefa no le gustaba usar vestidos elegantes y seguramente esa fue la razón por la cual utilizó algo menos llamativo.
Aun así, él no podía evitar sentirse sorprendido a pesar de que la foto fue de hace un par de días.
Todavía seguía siendo tendencia y en el grupo, seguían molestando a Aurora con su disfraz.
Era el único hombre entre los antiguos estudiantes, pero en el grupo que estaba Akira, estaba Oscar y Santiago, quienes dieron su alabanza también para bromear.
Andrés también fue uno de ellos y justo como ahora, declaró que estaba sorprendido.
"Aunque todavía sigue siendo mi jefa menos excéntrica…" Murmuró Andrés, cerrando su reloj holográfico.
Trabajo para Liam y actualmente trabajaba para Serena, Fausto y Lucius, pero cada uno de ellos tenía su excentricidad, muy diferente a Aurora que mantuvo su profesionalidad de siempre.
Incluso cuando se soltaba en las fiestas, Andrés no pudo quitarse la idea de profesionalidad que tenía sobre su antigua compañera y ahora, fue igual.
"¿Es un cumplido para mí o una queja?"
Una voz sonó por la sala y Andrés sin cambiar de expresión, se levantó al ver que desde el pasillo llegaba Lucius.
"Un cumplido." Respondió Andrés con total calma.
Lucius se rio y le hizo una señal para que lo siguiera.
Obedeciendo, Andrés dejo de pensar en esas noticias mediáticas y entró en su modo de trabajador servicial.
Pasando por los pasillos del laboratorio, ambos caminaron durante un tiempo y Andrés no pudo evitar observar a Lucius que estaba en silencio.
"¿Sucede algo, jefe?" Preguntó sin poder evitarlo.
"Oh, sí. Estaba un poco molesto por algo." Respondió Lucius y con una voz malhumorada, señaló. "Los idiotas del quinto portal nos han pedido apoyó para su farsa, ya que su objetivo se retrasó más de lo previsto."
¿Farsa? Andrés sabiamente ignoró esas palabras sabiendo que posiblemente era un tema que no deseaba conocer.
El Quinto Portal Abismal tuvo retrasos en su entrada y si bien algunos medios trataban de disminuir la situación cambiando el foco de atención, el retraso generaba cierta preocupación.
¿No había pasado ya demasiado tiempo?
¿Qué pasaba si lo que estaba al otro lado finalmente viniera a este?
A diferencia de ellos, el cuarto portal abismal había informado que el portal pronto sería cerrado.
Era una excelente noticia en el cual los medios estaban centrados, pero incluso tales situaciones estaban siendo opacada por las noticias de entretenimiento que venían de Serafín.
El sexto portal abismal pasaba desapercibido y si bien las fuerzas a cargo informaban de la situación, no decían demasiado detalles e incluso no hablaban de lo que había en el interior.
"Por cierto chico, ¿estás listo?" Preguntó Lucius y con una mirada seria, declaró. "Te harás cargo de una vida."
El día de germinar la semilla era hoy y él iba a ser quien sería el 'tutor' de esa nueva forma de vida.
Ahora que dejaba de pensar en temas sin importancia, pudo sentir un gran peso en su espalda y Andrés dio una expresión seria mientras se enderezaba.
"Sí." Respondió de forma más solemne de la que hubiera deseado y continúo siguiendo a su jefe.
Tras pasar por un portal, llegaron a un gigantesco laboratorio con grandes pantallas y decenas de servidores y maquinaria extraña.
Andrés observó y pudo ver que en algunas proyecciones estaban los historiales de los Quoarianos.
"¿Has borrado tus cosas sucias?" Preguntó Lucius de repente y al ver que él daba una expresión temblorosa, señaló. "Chico, ella será una niña. Incluso si he ayudado a que germine más rápido, será curiosa y rebuscara en todo lo que tienes almacenado."
Una mirada estricta combinada con cierto tono de regaño que les dio a sus palabras una seriedad superior a lo que Andrés hubiera imaginado.
Y en el fondo, no pensó que era una broma, sino que tomó tales palabras con seriedad.
Esa semilla iba a ser una forma de vida virtual y como cualquier criatura viviente, seguramente sentiría curiosidad y lo primero que exploraría serían sus datos almacenados en su reloj holográfico y drones principales.
"Tengo historiales de mafiosos serbios. Son criminales y algunos casos tienen fotos de sus víctimas, ¿debería borrarlo?" Preguntó Andrés con cierta preocupación.
Lucius le dio una mirada y luego se rio entretenido.
Estuvo claro que trataba de bromear con él para que bajara su tensión y nerviosismo, pero Andrés preguntaba de forma seria.
No tenía nada 'sucio' del tipo que ese Sabio decía, pero si mucha información de su trabajo y algunas cosas sin duda no sería agradable que un 'niño' lo viera.
"Estás tomando este trabajo con una seriedad que me agrada." Respondió Lucius y mientras caminaba, añadió. "No. Me he encargado de mejorar el crecimiento virtual que los Quoarianos no pudieron. No he modificado sus datos, pero si el proceso. En vez de 'germinar' como una inteligencia artificial, lo hará como una entidad llena de 'vida'… Capaz de conectarse a la red y encontrar todo lo que desee."
¿Aurora sabía lo que este hombre estaba haciendo?
Por la mirada y la sonrisa tan extravagante que estaba dando, estuvo claro que esperaba ver lo que sucedería.
Pero estuvo bien, Lucius podía ser extravagante y excéntrico, pero no haría nada malo en contra de las semillas y era más posible que destruyera a los humanos, a que dañara alguna forma de vida virtual.
Caminando a una pantalla conectada a una maquinaria extraña, el Sabio Lucius se detuvo y observó los detalles de la semilla que estaba en el interior.
Liam había memorizado el historial de la quoariana que era la semilla a la cual él cuidaría.
"Cada 'semilla' es irreemplazable. Son datos tan elaborados que es imposible replicar. Incluso en su forma de semilla cambian de forma constante." Dijo Lucius y mirando las maquinas, detalló. "Estas máquinas son 'incubadoras', que nutren a las semillas para de esa forma, nazcan como una forma de vida virtual desde el principio."
La mirada de Lucius brillaba ante la emoción.
Según lo que Andrés había leído, las semillas nacerían como una inteligencia virtual común y luego avanzarían para desarrollarse, adquiriendo pensamiento autónomo y eventualmente recuperando sus recuerdos.
Sin embargo, el Sabio Lucius realizó un cambio total y nutrió a estas semillas, para que una vez que se le permitiera nacer, lo hicieran en su totalidad como vidas virtuales.
"Con quien te encontraras no será la investigadora quoariana, será una forma de vida que abre sus ojos por primera vez. Será una niña pequeña que no conoce nada y que buscará aprender de ti." Dijo Lucius y dándole una mirada directa, anunció. "Es imposible para mí decirte lo que sucederá, pero de lo que si estoy seguro es que dependerá de ti."
Andrés nunca había visto una expresión tan seria en el Sabio Lucius y pudo comprender por qué ese hombre era un sabio.
El respeto que había perdido estuvo por volver a renacer y…
"Así que no le enseñes cosas sucias, chico." Dijo Lucius con una risa excéntrica y al verlo aturdido, añadió. "Tú te conectas y te asimilas con tu inteligencia artificial. Es posible que puedas hacer lo mismo con ella, pero ten en cuenta que la conexión será bilateral."
Su talento era llamado [Control Informático] y tras ascender al rango A, había logrado asimilarse con su propia inteligencia artificial para aumentar su capacidad de procesamiento.
Pero solo estaba utilizando la capacidad de su IA para aumentar su rendimiento y esta vez con una forma de vida virtual, era posible que todo fuera diferente.
Agregando a que siempre estaba conectado con su inteligencia artificial, permitiéndole dar órdenes mentales y trabajar a distancia, ahora esa conexión no sería unilateral, sino que bilateral.
"Entiendo. Lo tendré en cuenta." Respondió Andrés con calma.
Era imposible saber lo que sucedería, pero Andrés no podía retirarse ahora mismo y no lo iba a hacer.
El Sabio Lucius asintió satisfecho y le dio una orden para que se sentara en un banco y luego le paso un casco de realidad virtual.
"Creo que la primera vez deberían conocerse de esta manera." Señaló Lucius con una sonrisa.
Andrés dudó un momento, pero al final se puso el casco de realidad virtual y se recostó en la silla.
Había pensado que la 'semilla' era 'instalada' en su reloj holográfico y ahora no pudo evitar admitir que estaba un poco avergonzado por creer que iba a ser tan simple.
Recostándose, Andrés activó su casco de realidad virtual y el aviso de que el casco se estaba activando, apareció.
3… 2… 1…
Cuando la cuenta regresiva terminó, su visión cambio y dio la impresión de que estaba viajando por un túnel a alta velocidad.
No era capaz de sentir la realidad como las verdaderas máquinas de realidad virtual y eso le dejo en claro que Lucius había modificado este casco para dar la mayor cantidad de realismo posible.
De la misma forma que le gustaba jugar siempre.
Pasando por el túnel, que estuvo claro que era el sistema de 'carga' de escenario, tras un momento aterrizó en una luna mientras el espacio lo rodeaba.
Sus sentidos captaban los alrededores de esta luna.
Era capaz de oler, sentir y su cuerpo era completamente real… Si no fuera porque en su visión estaba el 'menú' y que este lugar era similar a la tierra en cuanto a gravedad, Andrés hubiera pensado que había viajado a una luna real.
Tras mirar este inmenso lugar, que claramente era un escenario sacado del juego futurístico de naves espaciales, él dio una mirada al cielo.
Desde el cielo una semilla estaba descendiendo suavemente.
"¿De verdad preparó todo?" Murmuró Andrés sin poder evitarlo.
Una empresa de videojuegos afiliada a la Empresa Cosmos era la diseñadora de los juegos de realidad virtual y ahora todo este escenario eran 'modelos' creados por los diseñadores.
La semilla que descendía del cielo era literalmente una semilla de gran tamaño que lentamente descendió a la luna y se enterró en la tierra.
Mientras pensaba que Lucius otra vez estaba haciendo de esta situación un juego, pudo sentir una extrañeza que venía del lugar en donde esa semilla fue enterrada.
Era como la vez que trajo su inteligencia artificial para que lo ayudara en el juego, pero a la vez se sentía como un jugador independiente.
La seguridad de la realidad virtual era alta y las protecciones en contra mecánicos con talentos raros, era la parte fundamental del juego.
Era imposible que un mecánico utilizara su talento en otro jugador y era de esa forma debido a las reglas del sistema, pero esta vez fue diferente.
La 'presencia' que estaba empezando a crecer era como un jugador, pero a la vez como una inteligencia artificial.
Y esa presencia despertó, mientras que de la tierra se levantó una pequeña flor que abrió sus pétalos y dejo a la vista, una brillante esfera de luz.
"…"
No tenía forma ninguna y daba la impresión de ser algún elemental, pero Andrés podía sentir como observaba por primera vez sus alrededores y centraba la 'mirada' en él.
Había pensado en múltiples maneras para presentarse cuando conociera a esa nueva forma de vida de la cual se haría cargo, pero ahora… Quedo completamente en blanco.
Lucius mencionó que había acelerado el proceso, aun así, esto estaba a otro nivel.
Esa luz representaba una nueva de vida independiente que estaba observando por primera vez.
Era tan extraño y misterioso, que hizo que Andrés no pudiera evitar sonreír al acercarse.
Pudo entender la razón por la cual el Sabio Lucius aumentó el realismo virtual a lo máximo posible y era para que él, sintiera la 'realidad' en la cual, esa nueva forma de vida viviría.
"Soy Andrés Silva, un gusto conocerte." Saludó Andrés al acercarse lo suficiente como para estirar su mano y tocarla.
Esa luz brillante simplemente lo observó sin retirarse y Andrés en el momento siguiente, se dio cuenta de que no lo entendía.
¿Un bebe entendería lo que decía su padre? Incluso si ese bebe tuviera la inteligencia de un adulto, mientras no entendiera el idioma, no sería capaz de entender a la otra parte.
Ante ese pensamiento, Andrés hizo lo que cualquier mecánico con un talento tecnológico haría y sin temor buscó conectarse con esa luz.
En el mundo real, su talento era un misterio y no tenía forma, pero aquí esa búsqueda de conexión fue dejada ver por un pequeño hilo que estaba saliendo de su mano y buscaba conectarse a esa luz brillante.
Lentamente se conectó y…
"…"
Andrés pudo sentir la curiosidad de la otra parte, guiado por un deseo primitivo de entender… Entenderse a sí mismo y entender lo que estaba a su alrededor.
En esa misma conexión, él no solo pudo comprender las emociones y los sentimientos de la otra parte o su forma de pensar, sino que la otra parte pudo ver y entenderlo a él.
Era mayor a una conexión telepática, era estar conectado mente con mente de una forma más profunda de lo que cualquiera podría imaginar y que generaba rechazo natural.
La luz estaba sintiendo esas emociones y usando los recuerdos, entendimiento y conocimiento de Andrés, buscó comprender lo que había dicho.
El Sabio Lucius era un excéntrico y un peligro… Ahora Andrés se dio cuenta de ello.
Este casco no solo lo conectaba a la realidad virtual con todo su realismo, sino que metía toda su conciencia en lo virtual de forma temporal y ahora mismo se estaba conectando a esa luz de la manera más primordial.
Andrés al darse cuenta de ese hecho, no restringió sus recuerdos y no dejo ver temor, sino que liberó cualquier seguridad de su mente.
Con la idea de que, si él estaba sintiendo todo lo que la otra parte sentía, la otra parte tenía la libertad de hurgar en su conciencia.
"…"
Y esa libertad fue tomada por esa luz que empezó a brillar y a asimilar sus recuerdos, sus ideas y pensamientos, entendiendo y comprendiendo a una velocidad que seguramente sorprendería al mismo Lucius.
Lo primero que buscó era el significado de sus palabras, que era lo que significaba un 'saludo' y tras ver eso, trató de encontrar el significado de 'nombre', entendiendo no solo el concepto, sino que el significado más profundo de un nombre.
Incluyendo el significado de nombre según la propia concepción personal de Andrés.
—No tengo nombre.
Una respuesta mental vino de repente y Andrés al observar a la luz cuyo brillo estaba siéndose más opaco ante el cansancio, dio una sonrisa.
"Podemos trabajar en ello a su debido tiempo. No necesitas apresurarte." Dijo Andrés con una sonrisa.
Estaba acostumbrada a hablar, pero pudo sentir que esa luz estaba comprendiendo la preocupación que él estaba sintiendo y a la vez la emoción que ocultaba y la diversión al pensar que esa luz era alguien demasiada apresurada.
Andrés al darse cuenta de que esa luz estaba comprendiendo todas sus emociones e incluso pensamientos que ocultaba, se sintió un poco avergonzado, al sentir que su privacidad estaba siendo vulneraba.
—Vergüenza… Sentimiento de incomodidad producido por el temor a hacer el ridículo ante alguien, o a que alguien lo haga. —Dijo la luz y deteniéndose su búsqueda, añadió. —Sientes vergüenza porque no deseas que vea algo que no quieres mostrar.
Esa respuesta mental que no tenía voz ni forma vino a la mente de Andrés, quien dio una sonrisa silenciosa y a la vez un poco entretenida, al captar que la luz se detenía de ver, pero seguía conectada a él.
"Sí, siento un poco de vergüenza." Respondió Andrés de forma honesta y sintiendo cierto deseo primitivo de la otra parte para seguir su búsqueda en sus recuerdos, dudó. "¿Qué tal si en otro momento continuamos?"
En esta conexión mental él era capaz de sentir lo que la otra parte sentía y era él quien les daba las connotaciones emocionales a los sentimientos de la otra parte.
Tal vez la luz no sabía que era lo que significaba el 'desear' algo, pero Andrés si y una vez que él lo pensó, la luz empezó a entender cada sentimiento, cada emoción por medio de él.
En este momento la luz era menos brillante y la causa se debía a que esa entidad intento asimilar todo, de la forma más rápida posible y era posible que fuera demasiada información.
¿Una entidad virtual era capaz de cansarse? Más que cansancio era posible que hubiera demasiado para procesar y necesita tiempo, eso era de lo que Andrés estaba preocupado, por eso deseaba detenerse.
—Responderé a tu preocupación y esperaré.
¿Cómo normalmente se respondía a la preocupación? Siguiendo con la idea de lo que el otro esperaba que hiciera y ahora que esa luz estaba conectada a él, era capaz de entender lo que deseaba.
Andrés no negó su alivio y tras un momento sintió que la luz se hundía en su mano, antes de desaparecer.
Sin saber que era lo que ocurría, un túnel de viaje lo volvió a tragar y tras un momento, la visión de Andrés volvió al laboratorio, en donde la mirada del Sabio Lucius lo recibió.
"¿Qué tal?" Preguntó Lucius y con una sonrisa, señaló. "La he dejado conectada a tu reloj holográfico, su verdadera ubicación es… Bueno, desconocida. Así que incluso si tu reloj holográfico o drones son destruidos, seguirá existiendo sin perder una pizca de su 'esencia'."
Ante esas palabras Andrés pudo sentir la conexión en su mente por medio de su talento.
La sensación era similar a con una inteligencia artificial, pero esta vez era diferente, esa entidad seguía conectado a él y ambos estaban compartiendo sus emociones y sentimientos.
La curiosidad era fuerte y Andrés dio un medio suspiro, sin ocultar cierta diversión ante la constante curiosidad.
Sentía que iba a tener un largo recorrido por delante.
******
"Es guapa." Murmuró Clémentine mientras que su cristal de comunicación proyectaba una foto que le estaba trasmitiendo Leslie.
En esa foto estaba Aurora llevando ropa de sirvienta y si bien algunas fotos estaban acompañadas por Serafín, Venali o Cithrel, había algunas fotos en la que estaba sola.
Quien fuera el fotógrafo estuvo claro que le prestó más atención a Aurora que a lo demás.
"Si, lo es. Ya compré el álbum de fotos y los fondos que se han reunido son bastante altos." Dijo Leslie con una risa.
Actualmente Clémentine había vuelto a su santuario y había estado meditando mientras esperaba a que aceptara su pedido para hablar con el monje mayor.
Para su lamento se perdió la diversión de bromear con Aurora, burlándose por lo famosa que se estaba volviendo esas fotos.
"Nicole todavía sigue sorprendida de que Aurora conociera a Serafín." Comentó Leslie con una risa y dando una mirada casual, añadió. "Yo esperaba que Alice participara."
Al escuchar esas últimas palabras, Clémentine se rio.
¿Cómo hubiera posado esa glotona? Era posible que lo hubiera hecho con una bolsa de papitas en sus manos.
Era una lástima estar encerrada en este lugar sin ser capaz de utilizar las redes y su reloj holográfico, pero estaba agradecida de que se comunicaran con ella de vez en cuando.
Si bien no era fanática de Serafín, no podía negar que también estaba sorprendida… Aunque para ella era normal ver personas importantes o famosas.
"Aurora sigue teniendo secretos que nos siguen sorprendiendo." Dijo Clémentine con una risa baja.
No se refería a que conociera a Serafín, sino que fuera capaz de usar un vestido de sirvienta y fuera capaz de sacarse fotos.
"Sí. Por los mensajes en el grupo, ella parece que es la guardaespaldas de Serafín puesto por la Empresa Apicius, pero dudo que eso sea todo." Supuso Leslie con cierta curiosidad.
Clementina solo dio una sonrisa sin responder.
En realidad, Aurora estaba ocultando bastantes cosas y el pretendiente que vio durante su tiempo en Zerzura, era un claro ejemplo.
No obstante, si bien sentía curiosidad, no era necesario hablarlo todo.
"Debo irme, ya se me está haciendo la hora de ir a entrenar." Avisó Leslie con un suspiro.
Estaba suspirando debido a que su charla fue corta, pero Clémentine captó una seriedad en ella.
"¿Entrenas para tu entrevista?" Dudó Clémentine por última vez.
A Leslie se le ocurrió probar ser una cazadora y por lo que le había contado, pidió un favor a Alice para que la presentara a un gremio conocido de cazadores.
Los Cazadores Desenfrenados, era un gremio escandinavo y Clémentine no podía olvidar la participación de ellos en su primera misión de asalto.
"Si, ya tengo fecha y me gustaría estar en las mejores condiciones en caso de que decidan probarme." Respondió Leslie con seriedad
Viendo que estaba ocupada, Clémentine le deseo suerte y tras despedirse, la llamada terminó.
Leslie trataba de buscar un camino que se ajustara a sus valores y si bien la búsqueda parecía difícil, esa mecánica no tenía intenciones de rendirse.
Sintiendo cierta admiración, Clémentine sin poder resistirse, salió de su pequeña habitación y al bajar por la pagoda, fue a la pagoda principal.
Como siempre este lugar estaba lleno de psiónicos de diferentes partes del mundo y entre ellos estaban bastantes monjes.
No obstante, esta vez a diferencia de cuando era un rango A, podía sentir cierta extrañeza en el área.
Sus sentidos habían aumentado y ella estaba entrenando, pero todavía le era difícil captar que era lo que sucedía en este lugar, aun así, pudo suponer de que se trataba.
Era posible que algunos monjes estuvieran entrenando con sus conciencias fuera de su cuerpo y ella todavía no era capaz de notarlo.
Deseando aprender sobre esos temas, al entrar a la pagoda fue al monje que atendía.
"El Monje Mayor no ha salido de su meditación, no obstante, nos ha pedido que le diéramos una tarea." Anunció el monje antes de que ella pudiera preguntar.
Sacando un pergamino y un anillo espacial, lo dejo en la mesa y Clémentine lo tomó y se alejó un poco avergonzada.
Había estado visitando al monje mayor de forma constante, queriendo aprender todo lo posible y no podía negar que estaba muy animada.
El Fénix estaba conectado a este lugar y se le había mencionado que aquí era capaz de aprender sobre el gran viaje que había dado durante su ascenso.
Tras alejarse de la pagoda, ella leyó el pergamino y su expresión tembló.
"Una tarea…" Murmuró Clémentine de forma seria.
En el pergamino estaba descrita lo que ahora tenía que hacer y eso era aprender a sacar su conciencia fuera de su cuerpo por su cuenta.
Una vez que estuviera allí, debería aprender sus límites y de lo que era capaz de hacer.
Lo que le dieron en el anillo espacial fueron algunos inciensos para estimular la mente y a la vez varios libros para aprender a realizar esa tarea.
Básicamente le estaban diciendo que aprendiera lo básico antes de ir más lejos y Clémentine en vez de estar decepcionada, dio una sonrisa animada.
Mientras empezara, no le importaba hacerlo desde el inicio.
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