El Emperador Víctor miró el campo de batalla de hoy mientras esperaba en el palco privado.
"Estoy bastante emocionado." Dijo Víctor y soltando una risa entretenida, señaló. "Academia de Héroes contra la Academia Aetherium. Dos pesos pesados enfrentándose entre ellos."
"De verdad luces demasiado emocionado." Murmuró Cécile que estaba presente acompañando a unas de las personas más poderosas e importantes del mundo.
"Por supuesto, por eso adelante los combates del cuarto y quinto grupo." Respondió Víctor entretenido.
La expresión de Cécile tembló, pero cuando vio al Anciano Harris y el Director Vincent mirando con tranquilidad controló sus emociones.
En realidad, no era mentira.
Víctor había adelantado los grupos todo porque en ellos se encontraba la Academia de Héroes y la Academia Aetherium.
La Academia Zerzura y la Academia de Paladines también eran interesantes para observar en el quinto grupo, pero no tanto como esos dos gigantes del cuarto grupo.
"Lo debes tener muy difícil…" Murmuró Cécile mirando a la elfa que estaba actuando como secretaria.
Ersin siempre estaba siguiendo al Emperador y ella dio una pequeña sonrisa.
"Días más pesados que otros." Respondió en calma.
Un tono simple y casual, que no revelaba ningún tipo de cansancio, manteniendo su profesionalismo.
El Emperador Víctor la miró fijamente por un segundo y luego observó hacia adelante ocultando su sonrisa.
"Primero tendremos que ver la Academia Zerzura contra la Academia de Paladines, todo para esperar a los pesos pesados." Comentó Víctor cambiando de tema.
"Al menos esto le dará una oportunidad a la Academia de Rusia y a la Academia de Mecánicos para elevar sus puntos. Sus oponentes no son tan fuertes que digamos." Respondió el Anciano Harris con un tono simple.
"¿Qué tal si al final hacemos un combate? Ya sabes, dos grandes Archimagos en contra mía… O dos grandes Archimagos enfrentándose, eso sería interesante." Preguntó Víctor de repente mirando al Director Vincent y el Anciano Harris.
Estaba invitando a dos grandes Archimagos de Rango SS que se enfrentaran a él o que se enfrentaran entre ellos por puro entretenimiento.
"No. Prefiero mantenerme al margen de esto." Respondió el Anciano Harris con un tono simple.
"Solo lucharé sí creo que es necesario." Respondió el Director Vincent dando una media sonrisa.
"Oh, es una lástima. Si luchamos eso ayudara a que los terrícolas tengan más confianza sobre los héroes. Sabiendo que ellos pueden ser capaces de enfrentarse a los portales abismales." Dijo el Emperador Víctor agitando la cabeza revelando decepción.
Cécile que estaba mirando controló su expresión ante la situación y la mirada extraña que le daban ambos grandes Archimagos.
"Su Majestad por favor no presione a sus invitados." Intervino Ersin con una mirada seria.
El Emperador Víctor dio una sonrisa y murmuró. "Entonces, me contendré hasta que llegue la limpieza."
Alguien de su fuerza no tenía demasiados rivales y por ende no tenía demasiadas batallas llevando a que todo fuera aburrido.
Al final solo podía conformarse con ver algunos buenos combates.
******
"¡Buena suerte!"
"¡Da lo mejor de ti!"
"¡Tú puedes!"
Escuchando a sus compañeros a su espalda Nicole que estaba entrando a la arena se sintió revigorizada.
Ahora a ella le tocó luchar un combate individual.
El primer enfrentamiento contra la Academia Aetherium.
¿Estaba nerviosa?
No, estaba emocionado.
No se trataba de confianza excesiva, solo emoción pura.
Caminando lentamente a la arena a sus ojos no se desviaron a las gradas en donde se encontraban los espectadores ni tampoco los drones que grababan de los lados.
A su atención estaba en la arena y en su oponente que llegaba al otro lado.
Un psiónico de Rango B cuya especialidad era usar la energía psiónica para sus ataques, así que iba a ser común ver ataques creados a partir de la energía psiónica.
Andrés se había esforzado para encontrar información y ahora la estaba usando.
Mirando a su oponente, Nicole se concentró.
Las voces de la multitud y la del anfitrión desaparecieron de sus oídos.
Ahora era ella y su oponente… Eso era todo.
Su respiración se volvió lenta inmersa en un estado en donde lo único que importaba era la batalla.
Ella abrió sus puños mientras los guantes relampaguearon alrededor de los puños y ella tensaba su cuerpo preparado para la batalla.
Lentamente, el anfitrión dio la introducción de los estudiantes y entonces les prestó atención a los combatientes.
"¡Que comience la batalla!"
Eso fueron las palabras que ella deseaba escuchar y al momento de escucharla pateó el suelo para abalanzarse hacia delante, elevando una nube de polvo por el impacto.
Nicole quería acortar la distancia y su oponente se dio cuenta lo que deseaba hacer y en respuesta abrió sus brazos lanzando decenas de dagas psiónicas.
Esas dagas que parecían luces que resplandecían con elegancia fueron disparadas a Nicole directamente.
Sin necesidad de esquivarla, ella reforzó su cuerpo con energía mágica mientras preparaba pequeñas descargas en sus guantes.
Golpeando las dagas con sus manos ella continuó su carrera mientras los relámpagos debilitaban las dagas psiónicas y su cuerpo soportaba las heridas ligeras.
Conocía sus límites y su cuerpo, así que sabía cuánto podía soportar y por tal razón, avanzó sin perder el tiempo.
"Mierda…"
Pudo escuchar la voz de su oponente cuando empezó a retirarse y cuando ella estaba a diez metros notó que él, lanzó un poderoso cañón de energía psiónica.
Fue en ese momento que Nicole saltó impulsándose en el aire y realizando una excelente pirueta esquivó el cañón psiónico que explotó a su espalda.
En vez de caer en el suelo, ella produjo plataformas en el aire y volvió a saltar a otro lado zigzagueando en el aire mientras contorsionaba su cuerpo para evitar que el psiónico la fijara como objetivo.
Su traje de combate fue mejorado gracias al Director Vincent que apoyó a todos los estudiantes y Nicole eligió un traje de combate casi similar al que obtuvo en áfrica.
"Tch…"
Acercándose lo suficiente para golpear a su oponente, escuchó que el psiónico chasqueaba su lengua y luego desapareció.
Usando una capacidad de movimiento rápido se retiró a unos treinta metros de Nicole y ella en vez de enfadarse, dio una sonrisa.
Preparando su descarga también uso su habilidad de parpadeo.
Su traje de combate era 'casi' igual que antes, solo con el añadido de la habilidad de moviendo para acortar distancia.
"Maldita s…"
*BOOM*
Antes de que ese joven pudiera maldecir, Nicole que se movió a su espalda golpeó la barrera que formo el joven y luego…
*BOOM*
La siguió golpeando una y otra vez mientras los relámpagos se extendían desde sus puños.
La fuerza hizo retroceder al joven dentro de la barrera psiónica y Nicole siguió presionando con ferocidad sin permitirle atacar.
Defendiéndose con su barrera, su oponente no tenía espacio para respirar y realizar ataques.
Ella continuó presionando.
Nicole estaba tomando la delantera revelando la ferocidad de un luchador en su máximo esplendor mientras su poder se elevaba con salvajismo y ferocidad.
"¡AH!"
Soltando un grito de ira, el joven psiónico hizo que su barrera se destruyera liberando una poderosa energía psiónica en forma de dagas.
Nicole activó la barrera de su propia armadura, pero ese ataque fue potente logrando quebrar su barrera y las dagas cortaron sus brazos, piernas y parte de la cintura.
"…"
Sin embargo, la diferencia de un luchador y un psiónico se reveló, cuando Nicole volvió a cargar a su oponente ahora desprotegido.
El cuerpo de un luchador era su arma y su escudo… Eran máquinas para soportar ataques y para causar daño.
A diferencia de un psiónico cuyo cuerpo por lo general era igual de débil que los magos y dependían de sus barreras, un luchador podía cargar hacia el enemigo con solo su cuerpo.
Necesitaban ser audaces y también requerían confianza en sus propios cuerpos.
*BOOM*
Golpeando al psiónico su puñetazo rompió la barrera del traje de combate del joven y luego llegó a la cara.
Nicole tenía ambos.
******
"¡Vamos!"
"¡Tú puedes!"
"¡Golpéalo!"
En el área de descanso Clémentine miró como sus compañeros alentaban a Cristian que se encontraba en una batalla feroz.
Para el combate grupal de Rango B se dejó a Alexey, Dalia, Jordán, Frank y Leslie, mientras que Nicole, Cristian, Marc, Érica y Lucas estaban en los combates individuales del Rango B.
Ahora estaban observando el último combate y era Cristian que en la primera ronda había perdido.
Todos estaban alentando debido a que los combates individuales estaban muy cerrados.
Nicole y Érica ganaron, pero Marc y Lucas perdieron.
Ahora Cristian determinaría el tercer lugar y estaba teniendo un combate difícil contra su oponente.
En la pantalla ambos estaban luchando con ferocidad dando todo de sí para llevar la victoria a sus respectivos equipos.
Era solo un punto, pero en otros términos era una forma de revelar que academia era la ganadora.
En un empate de 2 y 2, el tercero definiría todo.
Por tal razón Nicole, Marc, Lucas y Alexey estaban animando a su compañero.
"Está cerca." Murmuró Gregorio mirando cómo se desarrollaba el combate de Cristian.
Clémentine volvió a prestar atención a la batalla proyectada en la sala de descanso.
A pesar de que Cristian estaba agotado seguía mantenía sus manos en su espada tratando de acabar con su oponente.
Su oponente estaba en un estado similar y su nariz estaba sangrando debido al gasto excesivo de energía psiónica, pero ambos estaban dando su último hurra.
"¡Bravo!"
Los aplausos resonaron cuando Cristian pudo cortar a su oponente que no tenía fuerza ni para crear una barrera psiónica o para activar la barrera de su traje de combate.
Al final ante ese golpe que sería letal la barrera del torneo se activó evitando ese ataque, logrando que el psiónico cayera al suelo inconsciente.
Los festejos vinieron de los espectadores y Cristian salió de la arena y tras unos segundos entró a la sala de descanso, en donde lo estaban esperando.
Cristian estaba agotado y su cuerpo tambaleante, en un estado de adrenalina y emoción, que fue atrapado por los demás estudiantes presentes.
"¡Felicidades!"
Marc y Lucas perdieron sus combates, pero la victoria de Cristian los hizo sentir como si su academia hubiera ganado esta pequeña 'ronda'.
Todavía faltaba los combates grupales de ambos rangos y ahora estaba por empezar los combates individuales de Rango A, no obstante empezar con una moral en alto siempre era agradable.
Cristian dio una sonrisa agotada y solo se dejó caer en el sofá sin hablar.
La Academia Aetherium era un duro oponente con algunos estudiantes muy capaces entre ellos y era normal que ellos consiguieran tres victorias y terminaran perdiendo dos.
Estaba bien estar feliz por esas tres victorias.
"Parece que será mi turno." Murmuró Clémentine mirando a su oponente.
Xu Long un Rango S.
Ese sería su oponente y esa era el primer combate entre los Rangos A o al menos los individuos de ese supuesto rango.
"Da lo mejor de ti, pero no te sientas presionada." Dijo Edward dando una mirada seria.
Podía luchar como deseara, pero no tenía que presionarse al extremo por una victoria.
Estaba por enfrentarse a un Rango S y era normal que un Rango A como ella terminara perdiendo.
Clémentine lo sabía, y asintió.
"¡Da lo mejor de ti!"
Ante la mirada de su grupo y el ánimo de Nicole que ignoraba que se enfrentaba a un Rango S, Clémentine abandonó el área de descanso.
Era cierto que se enfrentaba a un Rango S, pero eso no significaba que no daría lo mejor de sí misma.
Perder o ganar no importaba demasiado en este combate, lo que importaba era que ella pudiera superar sus límites.
Clémentine sabía cuáles eran sus prioridades y por tal razón no estaba molesta que algunos no tuvieran confianza en ella y tampoco estaba asustada por enfrentarse a un oponente más poderoso.
Saliendo del pasillo, ella caminó a la arena mientras ignoraba a los visitantes y se concentraba en su oponente, que la esperaba mientras daba una sonrisa arrogante.
"Tú estabas en el grupo de esa mujer. La que saca brazos negros. ¿Tal vez debería llamarlo monstruo o criatura?" Preguntó Xu Long y con una mirada llena de desprecio, comentó. "No importa, todos son basura a mis ojos."
Estaba tratando a Alice como si fuera algún tipo de rareza tal vez por su habilidad, sin embargo, Clémentine no se molestó.
Era apegada a Alice y la admiraba, pero cuando miraba a alguien como ese joven insultarla… Era ridículo.
Tal como había dicho Alice era solo un idiota.
"¿Silencio? Debes ser tan mediocre que lo único bueno que sabes hacer es controlar tus emociones." Dijo Xu Long y como si estuviera aburrido, declaró. "No te preocupes, para darle un poco de diversión a tu insignificante vida jugaré contigo."
Un tono de alguien superior y arrogante, que la miraba para abajo.
¿La estaba intentando provocar o esa era su personalidad?
Clémentine supuso que era un poco de ambos, pero no le importo demasiado e hizo sus preparativos para la batalla.
"¡Que comience la batalla!"
La voz del anfitrión resonó y Xu Long que la miró de forma arrogante, instó. "Ven. Demuéstrame de lo que eres capaz."
Clémentine produjo dagas con su energía psiónica y la envió a su oponente y Xu Long en respuesta agitó su mano y una onda eléctrica las suprimió a todas.
Electroquinesis, la capacidad para manipular la energía eléctrica a través de su mente.
Esa era la capacidad de Xu Long como psiónico y era bastante fuerte, ya que había logrado convertirse en un Rango S.
"¿Esto es todo lo que tienes? Wow, ¡no pensé que fueras tan mediocre!" Exclamó con un tono falso y sin interés.
Clémentine se preparó en secreto mientras lanzaba otra ronda de dagas psiónicas.
A su oponente le gustaba provocar a su contrincante y no realizaba ningún ataque, disfrutando ver como sus oponentes luchaban con todo lo que tenían sin poder vencerlo… De la misma forma que lo hizo en la primera ronda.
En tales acciones ella basó su plan y empezó de inmediato.
Sacando enormes partes del suelo la envió volando a su oponente con telequinesis.
"Basura…" Murmuró Xu Long cuando extendió su mano y la energía eléctrica despedazo la enorme roca.
A Clémentine no le importo y volvió a hacer lo mismo, esta vez con mayor fuerza, arrancando el escenario parte por parte y elevándola en el cielo con su telequinesis.
Xu Long levantó sus cejas al ver su capacidad y ocultando su sorpresa, dio una sonrisa burlona.
"¿Esto es todo lo que tienes?" Preguntó abriendo sus brazos y extendiendo desde sus manos enormes rayos de energía eléctrica que destruyeron las rocas.
Una nube de polvo cubrió los alrededores y Clémentine pudo ver como ahora Xu Long le apuntaba.
"Si esto es todo, entonces si eras basura." Anunció Xu Long extendiendo un poderoso ataque eléctrico hacia ella.
En vez de esquivarlo, Clémentine creo una barrera psiónica para protegerse.
"Ugh…"
Sin poder evitarlo dejo salir un gemido de dolor cuando ese poderoso ataque golpeó su barrera.
Una masiva cantidad de electricidad se extendió tratando de rodearla lo que hizo que ella tuviera que generar un pequeño domo con su barrera.
En secreto contuvo esa electricidad en su barrera poniendo su mente al límite y su cuerpo en una extrema presión.
Xu Long empezó a aumentar la cantidad de energía eléctrica como si deseara presionarla.
"¿Esto es lo más lejos que vas a llegar?" Preguntó con un tono aburrido dejando de enviar electricidad.
Aun así, la corriente eléctrica se mantuvo alrededor de la barrera tratando de derribarla.
Ese fue el momento que Clémentine esperaba y abriendo sus brazos hizo que su barrera presionara la energía eléctrica creando una esfera para contenerla.
"Oh."
Xu Long no hizo demasiado solo la observó como si viera una hormiga dar su último hurra.
De eso se aprovechó Clémentine cuando envió esa esfera que contenía la energía eléctrica de un ataque de Rango S.
Su nariz sangró de vuelta y ella sin detenerse extendió su control de telequinesis y preparó su próximo ataque.
"¿Intentas usar mi energía en contra mía? ¡Que broma!" Murmuró Xu Long extendiendo su mano.
Cuando Xu Long intentó volver a controlar la esfera de energía que iba directamente hacia él, Clémentine liberó la barrera.
"¡!"
Un enorme torbellino se liberó cuando esa esfera empezó a atraer la energía eléctrica de los alrededores y con ello la barrera que cubría el cuerpo de Xu Long.
Sin detenerse, Clémentine agitó la mano velozmente.
Desde la espalda enormes rocas salieron del suelo volando para golpear a Xu Long cuya energía eléctrica se encontraba atraída.
*BOOM*
Xu Long no se movió cuando dejo que la barrera de su traje de combate soportara los golpes.
"Utilizaste electroquinesis para crear un campo magnético que atrajera mi barrera. Eso es algo notable." Comentó Xu Long caminando directamente hacia ese campo magnético y tomando el control de la energía, mirando a Clémentine que había caído arrodillada, señaló. "Pero no importa lo notable que sea, la basura es bas…"
Antes de que pudiera terminar sus palabras, Clémentine agitó su mano y con su telequinesis levantó una púa desde el suelo.
Impregnada con una fuerza impresionante, fue tan veloz y fuerte que penetró en la barrera del traje de combate y cortó la mejilla de Xu Long, quien no tuvo tiempo para esquivarlo totalmente.
Había preparado este ataque para el momento que bajara la guardia y la viera cansada.
Tal como había esperado, su actuar arrogante y al verla débil se dejó llevar con facilidad creyéndose que tenía el combate ganado y su presa era indefensa.
Lo había esquivado por puro reflejo, pero Clémentine pudo ver temor en los ojos de su oponente.
"…"
Ante la mirada sorprendida de su Xu Long, provoco que Clémentine diera una sonrisa.
No necesitaba decirlo en palabras, ella no era una presa indefensa y tenía la capacidad de morder con ferocidad.
"Tú… Perra…"
Ante la burla de ser herido y manipulado por un Rango A, Xu Long se desató.
Lo primero que hizo fue agitar sus manos y disparar una terrible descarga eléctrica.
Clémentine intentó protegerse, pero ese poderoso ataque rompió su barrera psiónica y luego la barrera de su traje de combate.
Y cuando sintió el poderoso golpe directo mientras la barrera del torneo se activaba dejando ver que ya estaba fuera de combate, vio como Xu Long se movía otra vez lanzando otra esfera de energía.
Su cuerpo se sentía adolorido y por sobre todo adormecido, llevando a que lo único que pudiera hacer fue depender de la barrera del torneo para defenderse de esa potente esfera de energía.
"Ugh…"
Ella voló como un trompo cuando la esfera de energía la golpeó y el impacto fue tan grande que al momento siguiente había golpeado la pared de la arena.
Cayendo inconsciente por el dolor que atravesaba la barrera del torneo.
******
Rachael y los demás miraron como Clémentine abría sus ojos en la sala de descanso.
"¿Estás bien?" Preguntó Edward con una expresión solemne.
"Si… Solo fue más fuerte de lo que esperaba…" Murmuró Clémentine y mirando a todos los estudiantes que la miraban, preguntó. "¿Estuve mucho tiempo inconsciente?"
"No, solo unos minutos." Respondió Cithrel que estaba cerca y lanzando varios hechizos diferentes, señaló. "La barrera soporto todo el daño fatal, pero el dolor se extendió en todo tu cuerpo. Es mejor que tomes un descanso."
El ataque que había recibido fue muy poderoso y si bien la barrera del torneo evitó que el daño se volviera letal, los remanentes la golpearon.
"Tch… Maldito bastardo." Gruñó Marc dejando ver las emociones de todos.
Un ataque cuando la barrera se había activado, sin duda fue realizado con malicia.
Todos se detenían cuando la barrera final se activaba, ya que eso demostraba que la batalla había terminado.
Sin embargo, hoy Xu Long continúo atacando.
"Puedes presentar una queja. Es un torneo, pero hay que competir con honestidad." Dijo Edward y mirando a Clémentine, agregó. "Claro, todo depende de ti. Aunque supongo que él alegara que se dejó llevar o que no pudo retirarlo, igual tendrá consecuencias."
Estaba bien luchar lo más posible y enfrentarse a sus oponentes con todo lo que tuvieran, pero había límites.
La barrera final del torneo era para evitar accidentes fatales y era muy eficaz, pero una vez que alguien continuaba, entonces era otro asunto.
Presentar una queja, llevaría a las autoridades a analizar las situaciones y tras comprobar que fue realizado con malicia, entonces aplicaran castigos respectivos.
"El combate se detuvo, el Emperador Víctor espera tu decisión." Agregó Rachael con una expresión seria.
Esto era un torneo de suma importancia que el mundo estaba mirando.
Sin embargo, si un accidente fatal ocurría a quien culparían serian al Emperador Víctor, quien era la persona que organizó todo esto y quien estaba al mando.
Los estudiantes podían golpearse entre ellos, pero la barrera estaba para detener ataques fatales para que nadie muriera.
¿Quién en su sano juicio permitiría que las personas mueran en un torneo académico?
Básicamente, nadie lo deseaba y por eso fue creada tan poderosa barrera.
Ahora que se atacó con malicia cuando finalizó el combate, se debía seguir las reglas respectivas.
Clémentine dudo un momento y mirando a los presentes, se detuvo cuando vio a Alice mirarla detenidamente.
"No, no importa. Pueden seguir con el combate." Respondió Clémentine notando que los labios de Alice se elevaron.
Antes de que los demás se quejaran, Edward levantó la mano y los detuvo.
"Ella ya ha hablado." Dijo Edward y al ver que había miembros disconformes, aclaró. "Pero si quieren demostrar su enojo, háganlo en la arena."
Las quejas se detuvieron y fue Rachael que era la siguiente en el combate, quien soltó un bufido enojado.
"Eso haré." Respondió Rachael mientras se preparaba para el combate.
Edward asintió y envió su aviso de que podían empezar el siguiente combate, recibiendo la confirmación al instante.
Cuando tuvo que salir Rachael sacó su varita mágica y caminó en dirección a la arena.
Si bien no conocía bien a Clémentine no significaba que ella permitiera que un compañero fuera maltratado de esta forma.
Estaba bien que Clémentine lo dejara pasar, pero ella no lo haría.
Mirando al oponente que llegaba del otro lado, Rachael sintió como su energía mágica empezaba a burbujear cuando se convirtió en el elemento fuego.
Si alguien atacaba a su compañera, entonces ella devolvería el golpe a la otra academia.
Era cierto, que su actual oponente no era Xu Long, pero para ella que estaba ardiendo en furia este era un buen objetivo.
Le demostraría lo que era el infierno.
******
En la sala de descanso de la Academia Aetherium varios estudiantes estaban observando el combate.
"Tch… Los miembros de mi equipo son una basura." Murmuró Xu Long mirando el último combate.
La joven que sacaba brazos negros y lo llamo idiota delante de todos estaba derrotando a uno de sus compañeros con facilidad.
En los combates individuales de Rango A, él fue el único que gano.
"Es tu culpa. Los provocaste demasiado." Declaró Ryu Sujin con una expresión seria y sin importarle la mirada de su compañero, añadió. "Lograste que ellos se lo tomaran más personal sorprendiendo a nuestros compañeros."
Ryu Sujin era la miembro de Rango S de la Academia Aetherium y a pesar de que era el miembro principal de ese rango, no dirigía al equipo de la academia.
Tal como decía el dicho 'dos tigres no pueden estar en una misma montaña'… La Academia Aetherium estaba dividida.
"No importa. Mientras gane el combate grupal de Rango A y los demás ganen el combate grupal de Rango B, será fácil." Respondió Xu Long y mirando a Ryu Sujin, señaló. "Solo preocúpate por tu propio combate."
Ryu Sujin frunció el ceño ante ese tono y la orden.
"Ahora las autoridades dejaron pasar tus acciones, pero espero que te controles o serás tú quien asumas las consecuencias si la cagas." Dijo ella finalmente.
A pesar de que Ryu Sujin no le gustaba dirigir el equipo, los premios del torneo eran demasiado preciosos como para perder.
"Si quieres provocarlos para que nos desafíen después es inútil. Lo único que has logrado es que se desahoguen con nosotros." Precisó Ryu Sujin y agitando su cabeza se retiró.
Esos trucos solo funcionaban con muy pocos oponentes y este no era uno de ellos.