Cuando los jueces pasaron a la sala contigua, los estudiantes comenzaron su misión en el lugar, asegurándose de que todos los ingredientes que necesitaban se cortaran adecuadamente. Todos tenían tres horas asignadas para dos platos que podrían darles la oportunidad de ganar la selección. Sin embargo, hacer una sopa pho tradicional podría tomar todo ese tiempo, dándoles otro desafío para usar su tiempo de manera eficiente.
Este desafío de selección tenía que ver con trabajar de manera inteligente, rápida y obtener el mayor sabor posible para sus platos. Un simple error podría llevarlos fácilmente a perder sus posibilidades.
Con un chef de renombre juzgando sus platos, la presión para los estudiantes de tercer grado era más alta que sus actividades de cocina anteriores.