Capítulo 52: Capítulo 52: Seguir coqueteándole a Dios

Tan pronto pensó esto, todo el pesimismo desapareció, y ya no estaba tan resentida por las langostas en sus manos.

¡Sin importar cuánto dinero le haya quitado un dios, ella lo ganaría de vuelta usándolo a él…! ¡Esto era llamado justicia!

En ese momento, los ojos profundos de Qin Mo aún se fijaban en eso textos que había recibido con sentimientos encontrados en sus ojos.

El joven ni siquiera dijo una palabra de lo que él creía que mencionaría…

El Capitán se dio la vuelta, lo miró y le dijo con duda,

—Al parecer Fu Jiu no vino al capitán por sus problemas familiares. Es increíble que haya cambiado tanto de la noche a la mañana. ¿Acaso antes actuaba para acercarse al Capitán? Tal vez él sabía que al capitán le gustaban las personalidades gentiles. Pero ahora, sentía que no había necesidad de actuar, ¿así que está revelando su verdadero ser?

Con sus fríos ojos, Qin Mo miró a esa parpadeante imagen de perfil.