En la Cuenca Neblinosa.
...
Después de la muerte de tres de los no-muertos, Link y Herrera escucharon mucho ruido proveniente del bosque y vieron a una gran cantidad de cosas que se acercaban a ellos. Al mismo tiempo, el aura de magia negra se hizo más y más intensa alrededor de ellos.
Lo que hacía esto mucho más impactante era el hecho de que también había un sonido de alas batiendo en el aire, lo que significaba que tampoco podían escapar volando.
¡No cabía duda de que estaban escuchando al ejército no-muerto del nigromante!
—El oponente está empecinado en mantenernos aquí—dijo Herrera con el ceño muy fruncido—, ahora escapar de este lugar es casi imposible.
—¡La única manera de escapar es matando al nigromante! —dijo Link.