Caminando a través de la puerta dimensional negra, Lin Huang llegó a la habitación de un hotel con el señor Fu. Una señora con una bata rosada estaba saliendo del baño en el momento en el que aparecieron, y ella comenzó a gritar—: ¡Ayuda! ¡Hay pervertidos en mi habitación!—
El señor Fu se empezó a reír mientras guardaba la reliquia dimensional negra y se tiró por la ventana junto a Lin Huang.
La señora estaba totalmente sorprendida de que los supuestos pervertidos habían saltado por la ventana.
—Pero este es el piso 99…—Pensó asombrada.
Ella corrió hacia el balcón y miró hacia abajo, en dirección a donde el dúo se había lanzado, pero no estaban en ninguna parte. Mientras tanto, los dos aterrizaron en un callejón enfrente del hotel.
—Hehe, lo siento. Esa fue la antigua ubicación en la que estuve la última vez. Yo no sabía que había alguien quedándose ahí ahora —el señor Fu tocó el collar de Lin Huang, de donde lo había jalado para saltar.