—¡Que rápido!
—¡Ni siquiera el Tigre Nube de Truenos fue tan rápido!
—¿No estuvo usando toda su fuerza antes?
Todos quedaron atónitos por las imágenes que Shi Feng dejó atrás. Con tal velocidad, seguirlo de cerca sería difícil, por no hablar de golpearlo con ataques a distancia. Ni siquiera los Grandes Señores de tipo velocidad con los que se habían encontrado antes fueron tan rápidos como Shi Feng.
—¡El Comandante No Viviente se está moviendo! —Autumn Goose se puso nerviosa cuando el monstruo abrió los ojos repentinamente.
La habilidad de Shi Feng para dañarlo decidiría el destino de esa incursión.